"¿Puedo preguntar, porqué el tunel?" Le preguntó a su hermano, el se había imaginado el lugar más, no sé... ¿Más grande?
"No creas que es cualquier tunel, es solo la entrada" Dijo algo molestó por el comentario.
De cualquier forma siguió avanzando, el problema que ambos tenían ahora no se arreglaría solo. Le ofreció una mano como guía al cuerpo que antes era suyo mientras caminaban al exterior, y le parecio chistoso, no recordaba tener las manos así de frías.
"Te presento la base en la cual yacen mis grupos más poderosos de shamanes. Un lugar construido por ellos mismos, donde todos son completamente auto-suficientes como para mantenerse con vida" Resito como discurso con tono aburrido, Yoh solo miró su alrededor atónito, sin saber que decir o hacer. ¿Esto era lo que hizo su hermano todos estos años? Construir una lugar hecho y para únicamente chamanes.
"E-esto es impresionante" Dijo el pelilargo, la brisa que recorría en su pecho no hacía más que darles escalofríos de la emoción, todo parecía tan pacifico. Contrario al paraje que se había imaginado.
Una zona en específico le llamo la atención, un gran terreno rodeado de gente a su alrededor, por supuesto, su hermano mayor lo notó.
"¿Ahí es donde entrenan? Wow, es gigante.."
"Allí entrenan entre ellos para los combates del torneo" Explicó."Un combate a muerte hace que solo queden los mejores en pie"
Su hermano le miró algo molesto, eso había arruinado algo del encanto del sitio. Pero aún así no podía negar lo hermoso que era, lleno de plantas y aire que inundaba sus pulmones al respirar, tenían casas básicas, cultivos y ríos fluyendo a lo lejos. Pero tan pronto dió un pie fuera del tunel todo el mundo se detuvo.
"¡Señor Hao! Se demoró mucho en venir" Dijo una pequeña niña que apareció de la nada asustando a Yoh. "Todos están felices de que haya regresado, ¡y al parecer también trajo al señor Yoh!"
"Hola" Dijo Yoh acudiendo su mano.
La niña de inmediato dio un paso atrás, su rostro amigable había cambiado por completo, su oversoul se activo, lista para embestirle.
Eh.
"¡Usted no es el señor Hao!" Gritó la chiquitita antes de saltar encima suyo, sin prever que lo esquivaría. Quedó atónita e Yoh por su parte también, no creyó que su hermano le agarraría del brazo así de repente, aquel mismo arrastre que parecía que le acababa de salvar la vida.
"Opacho tranquila, aquí estoy" Habló Hao desde su cuerpo actual "Tuve un contratiempo como puedes ver"
La chica de un salto deshizo su O·S para saltar a los brazos del mayor.
"Opacho le extraño" Se acurrucó en sus brazos. "Todos pueden retirarse" Indicó la niña a los arbustos y árboles, de ellos salieron un montón de chamanes que yacían escondidos listos para volver a sus labores normales.
"Veo que siempre estás atenta"
"Sentí su furyoku más débil que nunca, aquello me preocupó. ¿No le había contado a Opacho que se juntaría con su otra mitad y luego volvería?"
"Se supone que eso pasaría, no que me atacarían fuera del torneo. Los hubiese asesinado si no fuera por--" Se detuvo a pensar. Miró a Yoh quién se encontraba confundido. "Olvídalo, no vale la pena. Supongo que alguien tan poderoso como yo también puede cometer errores"
"Pues Opacho piensa que esta actuando raro" Le sostuvo el rostro con sus manitas, acercando sus frentes "Siento como su energía fluje junto a otra, asumo que se trata de la del hermano del señor Hao"
"Así es"
"Señor usted..."
"Lo sé, yo me las arreglo. Por mientras puedes empezar con mostrarle el lugar a Yoh, ¿no crees?" Le guiñó bajándola al suelo.
"¡Claro!, pueden seguirme. Opacho será su nueva guía"
...
"Debo admitir que no fue del todo justo... Atacar antes del torneo es considerado de cobardes, pero era necesario para la familia" Ren le observó enfadado por lo dicho, pero no dijo nada.
Anna continuó con lo suyo. "Usamos los escritos de Hao que teníamos en nuestro poder en su contra. Llegamos a la conclusión de que el único que podía derrotar a Hao era él mismo"
"Eso no explica el porqué ese idiota se comporto así, si efectivamente después de atacarle se fue a devorar a ese tonto, ¿ahora Yoh es Hao?" Dijo Ren confundido.
"No sabría decirlo del todo"
"Pero si ese fuera el caso ¿uno de los dos cuerpos no se habría muerto? O almenos desaparecido" Comentó el pequeño acomplejado.
Al no recibir respuesta, miró hacia su alrededor, todos tenían la mirada baja, no podía creérselo.
"En efecto.. Supongo que tener dos cuerpos tampoco era el deseo de Hao, por eso tenemos que encontrarle lo antes posible para derrotarlo mientras esta así de débil" Levantó el ánimo del grupo. "Si lo capturamos podemos ver si puedo recuperar el alma de Yoh de alguna forma"
Ella lo sabía, era ahora o nunca. Aún así, después de su discurso salió y se fue a su habitación sin saber que hacer.
Se tiró en la cama, toda su energía estaba abajo del límite, pero sabía que debía mantener su imagen fuerte ante estos momentosde crisis. Después de todo era la esposa de un Asakura.
"Ni siquiera pude engendrar heredero alguno" Susurro con un nudo en la garganta, decepcionaría a la familia que la había acojido después de todo.
Su todo fallaba entonces sería solo la viuda de la familia Asakura, y con ello terminaría el linaje de sangre. Pero derrotarlo siempre fue primero, ¿no?. ¡No se suponía que las cosas terminarían así!, que Yoh se vería involucrado.
Imaginar que esa misma mañana estuvo con Yoh a su lado quién siempre iba mostrandole una tierna sonrisa. Ahora deseaba más que nada en el mundo que el tiempo retrocediera para poder verlo otra vez.
Estaba sola, al igual que años atrás antes que Yoh llegara a su vida. Su pecho dolía, apenas podía respirar y aún así no caía ni una lágrima en sus ojos.
Quería llorar, y parecía no poder hacerlo.
Como Itako estaba bajo presión siempre, pero ahora demostrar aquel carácter inquebrantable parecía imposible.
"Annita.." Se abrió la puerta, alumbrando la habitación. Ella se alarmó cubriendose rápidamente entre las sábanas.
"¿Q-qué quieres Manta?" Maldijo en su interior lo quebradiza que su voz sonaba y rogaba porqué este no lo hubiera notado.
"Sé que nadie quizo decirlo pero, ¿Yoh esta muerto, no es así?.. Y las almas que Hao devora no pueden volver a este mundo"
"Tienes razón"
"¿Estonces?"
"Yoh no volverá por más que lo intentemos, pero hay que seguir peleando" Dijo fría, molestando a Manta con su actitud distante. "Por eso tuve que engañar a esos idiotas para que sigan peleando hasta el final"
"¿Cómo puedes decirlo de manera tan fría? Aún cuando se que en realidad no te sientes--"
"¡¡No sabes como me siento!! ¡Como esposa de un Asakura debo estar firme sin importar que!" Le gritó con voz desgarrada. ¿Como hasta ahora no lo entendía? Su personalidad, su ser, todo, le pertenecían a los Asakura, y no podía hacer nada contra de ello.
"Annita..."
Sintió como algo caía de sus mejillas, humedeciendolas, llevó sus manos a estas y finalmente lo notó. Estaba llorando.
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INTERCAMBIO DE ALMAS***
Fanfiction¿que esta pasando? "Tan pequeños" El espíritu del fuego apareció y lo envolvió en brasa. ¿Una traición de Yoh? *Asakuracest *Historia corta *Age-up