Enemies to Lovers.

Capítulo 1.

TaeHyung.

Ni bien habia llegado a la escuela en la mañana y ya estaba de camino al gymnasio para buscar al estupido de Jeon JungKook.

Resulta que el muy imbecil le dijo a todo el mundo que yo estaba enamorado de el y que estamos saliendo, ¿que carajos? Solo lo hace para vengarse de mi y humillarme.

Estaba furioso, abri las puertas del gymnasio de par en par y su mirada se poso sobre mi, para mi sorpesa y suerte, el estaba ahi solo, aunque hubiera preferido que estuviera todo el equipo para que se enteraran de esta mentira tan mal hecha.

— Tu, Jeon JungKook, a ti era a quien queria ver.

Al principio me miro confundido pero despues su sonrisa burlona aparecio en su rostro.

— ¿Querias verme? Claro, eso es obvio, quien no quisiera verme a mi.

Rode los ojos y camine hasta ponerme frente a el, el enojo me salia por los poros.

— ¿Desde cuando estoy enamorado de ti? ¿Me puedes explicar por que le dijiste eso a todo el mundo?

El se encoge de hombro.

— Tal vez lo estes y por eso seas tan detestable, por que no sabes como expresar que me amas.

¿Que habia dicho este ridiculo? ¿Que yo no sabia como expresar mi amor hacia el?

— ¿Que te hace pensar eso? No seas ridiculo.

Dios mio, que desagradable era este chico, de lo más desagradable.

— Tal vez que viniste aqui a decirme esto cuando nisiquiera sabes si fui yo quien dijo eso.

Mierda, tenia un punto, pero no podia dejar que lo supiera.

— Claro que tuviste que haber sido tu, las chicas del equipo de porristas me dejeron y la mayoria de ella salen con los chicos de tu equipo, ¿por que lo inventaria? Es evidente que te odio.

— Bueno ahora parece todo lo contrario, luces como un amante enojado por una pelea.

Solte un largo suspiro y me pase las manos por el cabello, no podia dejar que sus estupidas palabras me afectaran y ademas parecia muy satisfecho desesperandome.

— ¿Podrias dejar de decir que te amo? Carajo te odio, eres de lo peor, no me gustas pero parece que es todo lo contrario.

La seguridad en mis palabras parecio darle un golpe fuerte a su gran ego, me cruze de brazos y ahora yo reflejaba su gesto, esa sonrisa burlona.

Pero no tardo demasiado para que contraatacara.

— ¿Estas diciendo que quieres que me enamore de ti? ¿Me pides salir? Deja de finjirque me odias, ya se que me amas.

Lo matare, Dios, juro que lo hare.

— ¡Que no! Dios, no se puede hablar contigo en lo más minimo, eres de lo peor.

Lo tome del cuello de su camisa mientras lo miraba con enojo, me habia sacado de mis casillas este tonto, mi respiración estaba un poco erratica por la rabia.