- No me importa si piensas que aún no tengo la edad suficiente, ¿Podrías amarme de una vez? - sonreíste maliciosamente montándote encima del pelinegro - Quiero hacer estallar tu dulce corazón de chicle...
• Inspirada en la canción de MARINA - BUBBL...
Antes que nada quiero decir que, los amo mucho personitas que se toman el tiempo de dejar su estrellita y comentario <3 ahora si a lo que venimos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Capítulo 23 Promesa . . .
Abriste los ojos y te levantaste de golpe mirando a tu alrededor. Nada fuera de lo común, tocaste tu cuerpo y notaste que tenías la ropa puesta.
— Fue... un sueño? — musitaste
Fuiste a la orilla y trataste de levantarte pero a los dos pasos te caíste al suelo — Eh?....
Tus piernas se sentían débiles y sentiste dolor cerca de tu zona íntima — No fue un sueño... — te sonrojaste al recordar la noche anterior pero la puerta del baño se abrió dejándote ver a Shinichiro con el cabello húmedo.
Este te vio en el suelo y se espantó — ________! — rápidamente te levanto y sentó en la cama — ¿Estás bien?..... perdón anoche...— evitó tu mirada — Nose lo que me paso...
— Entonces, estamos juntos?...
— Que... — sudo
— Bueno, anoche hic-
Shinichiro tapó tu boca avergonzado — No hace falta decirlo...
Relajaste la mirada y sujetaste sus manos dejando libre tu boca — Si no quieres está bien — guiaste sus manos a tus mejillas con lentitud — Solo....no me dejes — musitaste cerrando tus ojos con suavidad.
Aquello estremeció a Shinichiro y no puedo evitar sentirse miserable — Aún tienes 16...y yo...yo te hice eso anoche
— Ya te lo dije...No me importa la edad— abriste tus ojos mientras tu mirada se perdía en el vacío — puedes usarme las veces quieras....
— _______ no se trata de eso — cerro sus ojos y respiro antes de continuar — Tu realmente me importas, me importas demasiado...pero si tú madre se entera de esto...
— No lo hará — interrumpiste — ella no lo sabrá...
— No entiendes....— cerró sus ojos — yo no quiero mantenerlo en secreto...
Abriste los ojos y ladeaste una pequeña sonrisa — Entonces espérame, espera a que tenga la mayoría de edad...
Shinichiro te observo durante varios segundos, ¿Realmente podían estar juntos?...No, eso ya no le importaba... simplemente quería hacerlo
Cerró sus ojos y apretó los dientes — Bien — se acercó a su rostro — esperemos a que crezcas — musito relajando el rostro con una sonrisa — hasta entonces me encargare de poder darte un mejor futuro — musito rozando tus labios
— Contigo mi futuro es más que mejor — correspondiste besando sus labios, lo sujetaste del cuello y empezaste a recostarte sobre la cama.
— ¡_________!....
La vos de tu madre llamándote hizo que ambos se separaran de golpe.
— Mi madre — respiraste entrecortadamente — el armario! — apuntaste — ¡ocúltate en el armario!
Este te hizo caso y sin más remedio se metió.
Entonces puerta de tu habitación se abrió — Cariño mira lo que te compre — sonrió sentándose en tu cama — Es plastilina
Rápidamente de sonrojaste — ¡Mamá!
— Ara ara acaso no te gusta — musito extrañada
— No... bueno si — la tomaste — pero estaba por alistarme para mis clases — te levantaste pero te retorciste cayendo de rodillas — mierda... — susurraste empezando a sudar
— Cariño estás bien? — preocupó acercándose
— Jaja Si solo se me durmieron las piernas — sonreiste nerviosa aguantando el dolor — ya me levanto
Ahogaste un grito interno y te pusiste de pie con máxima fuerza — Ves...ya estoy mejor ahora me cambiare
Caminaste como robot hacia la puerta.
— Bieeen, te prepararé el desayuno — sonrió saliendo de tu recámara y al segundo cerraste la puerta.
Sin aguantar más caíste sobre tus piernas mientras Shinichiro salía del armario yendo hacia ti.
— Perdón... es por mi culpa — te levanto y te llevo a la cama mientras cerrabas los ojos desganada.
— No quiero ir a clases, quiero quedarme echada todo el día — hiciste berrinche mientras shinichiro buscaba tu uniforme.
Se acercó y tomó una de tus piernas para después flexionarla — Esto te ayudará — musito masajeando tus muslos sin dejar de flexionar.
— Uhmm.... — sonreiste de manera coqueta — No te estás aprovechando... ?
El pelinegro te miro sin entender pero entonces se dio cuenta de la posición en la que te tenia y se sonrojó.
— Deja de pensar en cosas raras — se molestó con vergüenza.
Cerraste tus ojos y dejaste que masajeara tus piernas, entonces recordaste algo importante.
Las cámaras.
— ¡Shin! — te levantaste con las mejillas rojas — anoche las cámaras...
Este empezó a sudar — Si... anoche no pensaba con claridad....
— ¿¡Y si mi madre las revisa?! — te paniqueaste — Debo ir a resetearlas y borrar todo su cache — empezaste a levantarte, pero Shinichiro te empujó a la cama.
— Si lo haces ahora será evidente, debes hacerlo cuando tú madre no se encuentre en casa.
Miraste el techo — Es verdad.... Pero.... Tú sabes resetear esas cosas? — lo miraste — Porque yo no...
Centro de Shibuya - 13:08pm
Cerraste tu celular después de leer el mensaje de Shinichiro.
— Ahhh — te relajaste al saber que shin había podido borrar la grabación de esa noche — Un problema a menos — continuaste tu paso.
Aún no podías creer que ahora tenías una relación con el pelinegro, bueno o por lo menos es lo que querías creer. Se podría decir que tenían una relación ¿confidencial?
Frunciste los ceños — Mmmm — en menos de dos meses cumplirías 17 años, por lo que no era mucha la espera hasta tus 18, aun así te molestaba esperar — Un año.... Ahhhhh — suspirante pero entonces chocaste contra alguien tumbando tu celular.
— ¡Mgh! — Quejaste por el golpe, entonces viste a un moreno de cabello albino agacharse y después entregarte el celular
— Una disculpa...— Te miro de manera fija con una sonrisa falsa
— N-no pasa nada — te incomodaste tomando el celular, de alguna manera sentiste haber visto a aquel joven.
Ambos continuaron su paso, pero el albino se detuvo y giró su rostro. — Al fin te encuentro — musito mirándote con recelo.
Aún lo recordaba con claridad, recordaba las veces que "su hermano" dejó de prestarle atención poco a poco.
Todo por tu culpa...
— ¿Debería deshacerme de ti..._______ ?— el albino sonrió me manera macabra continuando su paso — Si no participaras en el enfrentamiento del 22, supongo que tendré que buscar otro método...
. . .
Quiero aclarar, que en esta línea Izana se sintió desplazado no por mikey, sino por la rayis. Ya que como estuvieron leyendo, la rayis fue la que más robó el tiempo de Shinichiro.
