Carrera de Corazones | Charles Leclerc

Capítulo 2: Kilómetros de Corazón

A medida que los días se convirtieron en semanas y las semanas en meses, la relación entre Scarlett y Charles floreció a través de sus conversaciones en línea. Se habían convertido en confidentes y apoyo emocional mutuo, compartiendo cada detalle de sus vidas, desde las anécdotas más triviales hasta sus sueños más profundos.

A pesar de la distancia física que los separaba, encontraron formas creativas de mantenerse conectados. Hablaban por teléfono todos los días, enviaban mensajes de buenos días y buenas noches, y compartían fotos de sus vidas cotidianas. A través de videollamadas, podían verse y escucharse, lo que hacía que la distancia se sintiera un poco menos abrumadora.

Un día, mientras Scarlett exploraba un mercado de pulgas en un país extranjero, recibió una videollamada de Charles. La emoción la inundó mientras aceptaba la llamada y vio a Charles sonriéndole desde la comodidad de su casa en Mónaco.

"¡Hola, cariño!" dijo Charles con entusiasmo. "¿Qué aventuras estás viviendo hoy?"

Scarlett sostenía su teléfono y mostraba la cámara a su alrededor para que Charles pudiera ver el bullicioso mercado. "¡Hola, Charles! Estoy en un mercado de pulgas increíble en Tailandia. Mira todas estas cosas fascinantes."

Charles observó mientras Scarlett exploraba los puestos llenos de antigüedades y artesanías locales. "Debe de ser increíble estar allí. Me encantaría estar contigo en este momento."

Scarlett sonrió con cariño. "Yo también, cariño. Pero mientras tanto, puedo compartir todos estos momentos contigo a través de la pantalla."

A lo largo de los meses, las conversaciones se volvieron más profundas y significativas. Scarlett y Charles hablaban de sus esperanzas y sueños compartidos. Soñaban con un futuro en el que pudieran estar juntos, superando las barreras geográficas que parecían infranqueables.

Mientras Scarlett compartía sus planes de viaje y aventuras futuras, Charles también reveló sus deseos de tomarse un tiempo libre de las carreras para explorar el mundo con Scarlett. La idea de viajar juntos les emocionaba a ambos, y se convirtió en un objetivo común que los impulsaba a seguir adelante.

Sin embargo, la vida de Charles como piloto de Fórmula 1 seguía siendo una montaña rusa constante de carreras y compromisos. Cada gran premio significaba largos períodos de tiempo lejos de su teléfono y su computadora, lo que a veces creaba brechas en su comunicación. Pero, a pesar de las dificultades, siempre encontraban la forma de reconectar y mantener viva la chispa de su amor.

Un día, después de una emocionante carrera en el Gran Premio de Mónaco, Charles finalmente tuvo un respiro en su ajetreada agenda. Se sentó en su lujosa terraza con vista al puerto, con su teléfono en la mano, y marcó el número de Scarlett.

Scarlett respondió emocionada, y la cara sonriente de Charles apareció en la pantalla. "¡Scarlett! ¡Ganamos el Gran Premio hoy!"

Los ojos de Scarlett se iluminaron de alegría al escuchar las palabras de Charles. "¡Eso es increíble, cariño! Estoy tan feliz por ti."

Charles continuó, "Y tengo una noticia aún mejor. He decidido tomarme un descanso después de la próxima carrera. Quiero verte, Scarlett, quiero estar contigo."

Scarlett sintió que su corazón latía con fuerza mientras procesaba las palabras de Charles. Era un paso importante en su relación, un paso hacia un futuro juntos que habían soñado desde el principio.

"Charles, eso suena maravilloso," respondió con lágrimas en los ojos. "No puedo esperar para tenerte aquí, a mi lado."

El amor entre Scarlett y Charles estaba destinado a enfrentar pruebas aún mayores, pero estaban dispuestos a superar cualquier obstáculo para estar juntos. La distancia seguía siendo un desafío, pero su amor seguía creciendo, más fuerte con cada día que pasaba. El destino los había unido, y estaban decididos a escribir su propia historia de amor en la distancia, una que trascendería todas las barreras y los llevaría hacia un futuro lleno de promesas y aventuras.