Capitulo 3

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TN'S POV

Me levanté alrededor de las 7:30 am. De los nervios no pude dormir toda la noche.

Ah pero el señor Dybala, roncaba como si nada, se movía constantemente y hasta llegó al punto de robarme mi parte de las sábanas.

Supuse que no estaba acostumbrado a dormir tanto, por su trabajo, así que me levante lo más cautelosa posible y me dirigí al baño.

Luego de asearme y hacer todo lo que necesitaba. Salí ya cambiada. Deje el pijama en mi bolso y me dirigí hacia un pequeño negocio que había visto mientras llegaba al lugar. Pensaba armar un lindo desayuno para disculparme con Paulo y tratar de empezar con el pie derecho.

Salude amablemente, y recibí una bienvenida bastante afectuosa. No estaba acostumbrada a tanta amabilidad por lo que me sentí feliz y bien recibida. Compré facturas, variadas, pero en especial churros. Amaba los churros.

Al llegar a la cabaña. Feliz por tener mis facturas recién salidas del horno. Le "robe" el equipo de mate a Paulo y me dispuse a calentar el agua en la pava eléctrica del lugar.

Para eso de las 9 am. La mesa estaba preparada e iba a despertarlo pero me sorprendió verlo de pie, en el marco de la puerta de la habitación y sacando una foto a la mesa mientras sonreía.

— ¡fua! No sabes cuánto extrañaba comer esto por las mañanas ¿saliste sola temprano? Pudiste levantarme, es oscuro a esa hora —habló preocupado.

Negué rápidamente.

— había salido el sol tranqui, ademas necesitaba un tiempo a solas y vos estabas roncando como si nada, si llegaba a despertarte me ibas a revolear una almohada —me burlé.

Paulo me señalo y sonrió. Esa bendita sonrisa suya.

— Tenes razón —chasqueó la lengua e hizo señas para que me sentara frente a él. —Gracias... ¡y a comer! —agarró el mismo churro que justo yo había tomado.

Ambos nos miramos con el ceño fruncido.

— ah no nena, con la comida no, soltalo ya o no tomas mate hoy —advirtió él.

— vos soltalo nene porque te hago dormir en el piso esta noche —amenace usando el mejor tono de voz de malota que pude hacer.

Paulo de la nada me guiño uno y de un tirón me arrebató el churro. ¡Que estupida! Baje la guardia por fijarme en sus ojos. ¿Por que Dios lo tuvo que hacer tan lindo?

Estaba molesta, con él por manipularme usando su encanto, y conmigo por haber caído como una más. Del enojo, lo patee de forma inconsciente, debajo de la mesa y el puteo en voz alta provocando que se me escapara una que otra risa.

•••

Cuando era la hora de almorzar ambos se habían bañado y cambiado de ropa.

Los dos de negro se miraron sus outfit y suspiraron.

— ¿voy a comprar algo? Porque no hay nada —hiciste una mueca.

Paulo estaba revisando los bolsillos de una campera y luego su bolso, que estaba apoyado sobre la mesa.

— ¡acá esta! —tomó su billetera feliz. — ¿comer acá? Ni en pedo, vamos, te invito a comer afuera —sonrió de costado.

— ¿que? No, mira si nos ven juntos —lo miraste aterrorizada.

Paulo río y negó.

— no es época de vacaciones, ademas la mayoría de las personas son como Jorge: adultos que no les interesa la vida de los demás, y algunos me conocen de cuando era un pibe. Quédate tranquila ¿venís o te quedas acá? —caminó a la puerta y con la velocidad de flash tomaste tu celu y corriste hacia el.— ah bueno me parece que alguien tiene hambre —se burló al escuchar tu panza rugir y le pegaste en el brazo.

Cruel Summer - Paulo Dybala.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora