14-No la amas.

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[...]

Un día antes.

–No puedo creer todo lo que paso en esta maldita semana ¿Por qué no estuviste con Abril?– Ama hablaba con molestia, recién habían llegado a España acampañada de Filis y Osvaldo, los cuales al enterarse que Juan había llamado desesperado por ayuda se ofrecieron a ir con ella.

–Lo siento Ama, trate de que no pasara a mayores pero ¿Qué podía hacer? Intenté de todo para que Abril entendiera pero no pude–

–Debiste llamarme desde un principio, no esperar a que Rivers terminará en el hospital por un desmayo a causa de la idiota de Abril y si, antes de que lo digas, se que es mi hermana pero no la voy a defender  cuando se está comportando como idiota– Amairani estaba molesta, tan molesta que hasta cierto punto estaba olvidado que Abril era su sangre.

–No discutan por esto, lo importante ahora es ver a Rivers y saber como esta ¿Ya salio del hospital?– Hablo Filis tratando de calmar el ambiente.

–Si pero no creo que puedan verla hoy, ya no se queda en el hotel– Juan rasco su nuca nervios.

–¿Entonces donde se queda el chaneke?– Osvaldo y Filis se volteaban a ver confundidos, no entiendan como era que Rivers no estaba quedando en el hotel.

–Se está quedando con Mar ¿No es así?– Ama preguntó mirando fijamente a Juan y el cual solo se limitó a asentír.

–Woa, esperen ¿Mar?¿La de pio?– Osvaldo frunció el seño confundido– ¿Desde cuando–

–De ahí surge el problema, Mar y Rivers ya están en algo y parece que a Abril se le botó la canica– Juan comenzó a contarles todo lo que había pasado en esos días, mientras más contaba, la sangre de Amairani más hervía, tenia tanta furia acumulada que quería irse contra su hermana.

–Creo que lo primordial es ver a Abril ahora mismo, antes de que quiera cometer un disparate en el partido de mañana– Filis hablo con calma a lo que todos asintieron estando de acuerdo.
La primera parada sería hablar con Abril.

[...]

Abril se encontraba sentada en la cama del hotel mirando fijamente si teléfono, le había mandado mensajes desesperada a Rivers pidiendo perdón pero esta no le contestaba, ya no sabia que hacer, se estaba volviendo loca, solo había logrado verla después que salio del hospital pero fue imposible acercarse ya que las jugadoras de Pío la habían detenido.

Quería hablar con ella pero era imposible, la había lastimado otra vez y ya no podría remediarlo, no teniendo a Mar Serracanta cercar de Rivers evitando que se le acercara.

El sonido de la puerta abrirse la saco de sus pensamientos, Abril se paró de la cama exaltada al ver quien era la persona que había entrado por aquella puerta.

–¿Ama?– Miró a su hermana con sopresa–¿Qué haces aquí? –La menor intento acercarse a darle un abrazo a su hermana pero esta la rechazo dándole un manotazo en el hombro –Eh ¿Qué vergas traes?– Dijo una Abril un poco adolorida por el golpe.

–¿Qué traigo yo? Más bien tu pendeja, ni creas que no se la mamadota que hiciste con Rivers y Mar ¿Qué vergas te pasa por la cabeza?–

–Ama, no es como tu crees, es que yo...–

–Es que tú que– Amairani interrumpió abrubtamente a su hermana–Samantha terminó en hospital por tu culpa y no puedes justificar eso–

–Se que no lo puedo justificar pedo entiendeme, la amo, quiero estar con ella y no me importa si tengo que pasar por encima de todos ustedes para estar con ella–

La seriedad con la que hablaba Abril sorprendida a Amairani ¿Enserió era capaz de pasar por encima de todos solo para quedarse con Samantha aún sabiendo que la estaba lastimando?.

–Tu no la amas, estas encaprichada con ella por que ya encontró a alguien más pero eso es todo por que si realmente la amarás dejarías que fuera feliz al lado de Mar así que como Rivers dejo que tu fueras feliz al lado de Juan, lo que haya pasado entre ustedes dos en su matrimonio y seas infeliz por eso ya no est problema de Samantha, suéltala de una vez–

Ambas hermanas se miraban fijamente, Amairani había dejado sin palabras a Abril, no sabía que decir, si hermana tenía razón pero no podía aceptarlo, no dejaría ir a Samantha tan fácilmente.

–No la voy a dejar y no me importa lo que digas Amairani, yo la amo y voy a estar con ella pese a quien le pese.–

La sangre de Amairani comenzó a hervir del coraje, sabía que si esto seguía así la única que saldría mal sería Rivers.

–Si algo le pasa a Samy, será tu puta culpa Abril, no dejare que te la acerques– Amairani encaro a su hermana.

–No puedes impedir que este con ella– Abril y se hermana se miraban fijamente,ninguna daría su brazo a torcer.

–Eso lo veremos–

Su lazo como hermanas se había roto, ahora lo único que las unía era la sangre pero ni eso iba a poder evitar la guerra que se avecinaba por tener y proteger a una persona en específico.

Samantha Rivera Treviño.

Presente

–¿Ama?–

–Pues sí pinche pelo wero, ni modo que Dios– Amairani se acercó a su amiga y la abrazo.

–Pendeja– Rivers correspondió al abrazo, feliz de que Ama estuviera aquí con ella.

Ama se separo de Rivers y acarició su cabello levemente mientras sonreia, Samy se miraba mejor estando en España que en México, se miraba más feliz, más sana y menos jodida.

La mayor se giro para mirar a Serracanta la cual trago grueso al notar la mirada y la aproximidad de Amairani hacia ella.

–Así que tu eres Mar, la chica de Rivers– La morena se cruzo de brazos mirando fijamente a la chica frente a ella.

–S-si soy yo, un gusto– Serracanta estaba nerviosa, estaba nerviosa solo conociendo a la mejor amiga de su chica, no quería mi imaginarse como estaría cuando conociera a la familia de Rivers.

–Mmm– Ama la examinaba con la mirada cosa que ponía más nerviosa a Mar, las chicas de pío y Rivers solo miraban la escena con burla al ver lo nerviosa que estaba Serracanta.

–Ya Ama, deja a la niña ¿No ves que le va a dar algo?–

–Es que quiero saber que intenciones tiene contigo, no te voy a dejar en manos de cualquier persona–

–¡Yo juro que tengo las mejores intenciones!– Mar hablo rápido –Yo quiero todo con Samy, quiero hacerla feliz– La mirada de las dos chicas se conecto y ambas sonrieron, se notaba que Mar Serracanta amaba con todo su corazón a Samantha Rivera.

–Ay que cueris son– La mayor las miro con ternura.

–Bueno, ya a la chingada, que me voy a chivear–

–Se chivea la perra, se chivea– Ama le hacía burla y Mar reía.

Quizás eso era lo que le faltaba a Rivers, que todas las personas que quiere estén juntas para estar completa, amaba a sus amigos con todo su corazón y amaba a sí  chica con todo su corazón y alma.

Su felicidad quizá ahora si sería duradera ¿o no?

[L.N]
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Espero que les guste este cap, los tqm

Silent Cry.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora