Silent Cry.

20-Buena noche.

[...]

-Jamás pensé que Ari fuera así- Sonia miraba a su compañeras las cuales estaba igual de sorprendidas por lo que Oscar les estaba contando.

-Siempre fue así, dejó ir muchas relaciones antes de conocer a Juan por sus celos enfermizos, aún que su matrimonio duró bastante en la estabilidad hasta que de nuevo volvió a lo mismo-

Todas las chicas que estaban en aquella recepción se quedaron en silencio analizando la situación y con una pregunta en la cabeza ¿Qué tanto habría tenido que pasar Samantha estando sola en México en las manos de Abril?.

-¿Cuanto tiempo tuvo que aguantar esto la presi?- Se atrevió a preguntar Berta.

-Supongo que bastante, yo realmente no sé mucho, la que sabe todo es Ama y ustedes conocen a Rivers, es bastante aguantadora en este tipo de situaciones pero después de la Velada tuvo un bajón de emociones muy cabron, siempre supuse que había sido por la pelea contra Marina pero ahora lo dudo muchísimo- Oscar suspiro mientras miraba al ascensor esperando a que su esposa o Osvaldo junto a Mar y Rivers bajarán.

No había tenido que esperar mucho tiempo cuando vio a su esposa salir de aquel ascensor enfurecida -¡Es un pendejo, enserió es un pendejo!- Ama se acercó a sus esposo y a las chicas de pío.

-¿Qué sucedió?-Oscar preguntó tomando la mano de su esposa la cuál estaba enfurecida.

-El pendejo de Juan no me dejo hablar con ella, me dijo "Yo lo arreglo ¿Qué no ves como viene?" Y me cerro la puerta en la cara el cabron, no pudo arreglar esto desde un principio menos ahorita que ya se le salio de las manos- Ama recargo su cabeza en el pecho de su marido, tenia un mal presentimiento.

-Calma, cuando estemos en México vamos a cortar todo esto de raíz-

-Espero que así sea por que ya estoy harta, Sam no merece esto-

Amairani estaba intranquila, sentía que algo sucedería en cuanto pisaran México nuevamente, quería deshacerse de aquel pensamiento, Rivers no estaría sola en México, Mar iría unos meses con ella y Osvaldo tampoco la dejaría, quizás solo era la tensión del momento la que la hacía sentir de esa manera pero Amairani no estaba equivocada, siempre debía hacerlo caso a su intuición y esta vez no sería la excepción.

[...]

Mar y Osvaldo había tranquilizado a Samantha la cuál no de había quedado tranquila y aun que Mar se negará a su capricho no había tenido más remedio que aceptar y seguir a todos a la fiesta.

-No estoy conforme con venir después de lo que pasó- Mar hablaba con Nuria, ambas sentadas viendo como Rivers bailaba con Aitana, Ona y Autero.

-Tienes que relajarte tía, la presi acaba de pasar por algo difícil, fue un carrusel de emociones para ella el día de hoy y tu en lugar de estar divertiendote con ella estas con cara de culo sentada- Nuria le dio un pequeño golpe a Mar en la cabeza haciendo que esta la viera mal-Ve a divertirte con tu mujer por dios, no seas aguafiestas- Dijo esto último Nuria antes de ser jalada por Carlinha hacia la pista de baile.

Mar se quedó pensativa, quizás Nuria tenía razón, tenia que divertirse, después de todo el día de hoy había ganado la Queens y eso no pasaba todos los días, decidida se levanto de aquel lugar donde estaba sentada para ir hacia Rivers.

Samantha estaba en la pista de baile cuando sintió como alguien lo tomaba de las caderas y se pegaba a ella, ni siquiera se molesto en voltear sabía de quien se trataba por lo que siguió moviéndose al ritmo de aquella canción que sonaba en la discoteca, el agarre en su cadera se intensificó para tener mejor control de sus movimientos, de pronto también tenía cerca la respiración de Serracanta en su cuello.