¡No mires! O3

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Jungkook.

Descansé de maravilla, cuando desperté tenía la ilusión de ver a Jimin pero su cuarto estába vacío, eso me decepcionó. Me fui al estudio, trabajé mucho, estoy muy ilusionado con este proyecto, de vez en cuando las pequeñas piernas de Jimin se cruzaban por mi mente.

—Pareces un pervertido con esa cara.

—Tienes razón, Yoongi. Koon parece un depravado con esa expresión en el rostro.

Así pasé la tarde con comentarios de mis amigos, cuando llegué a casa había una caja en la puerta, la tomé y entré.

—Para Kookie.

Estaba escrita con una bonita letra, olía a dulce, la abrí y tenía galletas, tambien otra nota.

Espero que te gusten las galletas, por cierto, a las 10:00pm deberías ver tu ventana.

Mordí mi labio y probé una de las galletas, saben tan bien, mire mi reloj, faltan 20 minutos así que me metí a bañar y me puse ropa limpia, era la hora.

Me senté en mi cama viendo a la ventana.

—Vamos Jiminie.

En eso aparece en el cuarto con...

—Madre de dios.

Jimin.

Me levanté temprano, fui a la escuela, después de mi aburrido horario de clases salí con Tae al centro comercial.

—¿En serio lo harás?.

—Si lo haré y este es perfecto.

Tomé la ropa con lo demás y la fui a pagar.

—¿Me acompañas a casa?

—¿Me darás de las galletas?

Sonreí y asentí, nos fuimos de ahí para mi casa, una vez ahí coloqué las cortinas rosas en mi ventana, las puse de una manera que no se notarán, no todavía.

—Listo, ¡ahora a cocinar!

Bajamos, me puse a hacer las galletas, una vez acabe hice las notas para después dejar la caja en su puerta.

Ya de noche

Tae ya se había ido de mi casa y yo me metí a bañar, ya era casi hora.

—¡Yo puedo!

Me animé, me puse la lencería, miré la hora en mi reloj para salir del baño rápidamente, noté su presencia, sonreí. Me acerqué a mi reproductor de música y puse una canción bastante buena, estaba un poco fuerte para que escuchara, mi madre no está y a los vecinos no les molesta, ya lo sabía.

—Perfecto.

Moví mis caderas al ritmo de la música poco a poco dejándome llevar por esta, prontamente me encontraba de espalda moviendo mi trasero para el. Me empiezo a acariciar mi cuerpo quitándome la lencería y cuando estaba casi desnudó me acerco a la ventana, Jungkook me miraba con tanto deseo, se está tocando, miré como se masturba, con mi imagen me despedí con la mano y este frunció el ceño.

—Bye.

Cerré las cortinas y terminé de desvestirme.

Jungkook.

Se mira jodidamente sexy, seguí mordiendo mi labio escucho la canción y sonrio.

Eso, bailame Baby.

Susurré para mí. Miraba cada parte de su ser tan perfecto cuando se da la vuelta y mueve su trasero para mi, tuve que desabrochar mi pantalón, estoy tan duro, saqué mi erección y la empezé a acariciar sin dejar de verlo.

—Joder Jimin...

Se empezó a desvestir tocar su cuerpo, eso hizo que aumentará la velocidad de mi mano soltando varios gemidos roncos, todo era perfecto lo vería desnudo, estaba cerca del orgasmo pero se detiene y se despide con la mano. Fruncí el ceño confundido.

—¿Que diablos?

Cerró con unas cortinas rosa, su silueta se ve todavía.

—Tiene que ser una broma.

Con la sombra se ve como se termina de desnudar y otra vez tuve que terminar con mi imaginación, pero noté que me estaba viéndo, puso un cartel.

La próxima vez te ayudaré a bajar eso.

sonreí. será MÍO.

¡no mires! › kookmin. +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora