Capítulo 003

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Pov. Apollo

Desde mi primera visita al Bosque Muerto-Viviente, mi vida había cambiado. La belleza y la magia de ese lugar me habían dejado profundamente impresionado, y no podía dejar de pensar en la misteriosa guardiana, Hinata. Sus ojos ciegos, su conexión con el bosque y su naturaleza intrigante me habían cautivado por completo.

Decidí regresar al bosque, esta vez con un motivo más claro: quería conocer mejor a Hinata. La dualidad del lugar me atraía, pero era ella quien había dejado una huella imborrable en mi corazón.

Al llegar a la entrada del bosque, las hadas oscuras, que parecían haberme aceptado como un visitante frecuente, me dieron la bienvenida. Sus ojos brillaban con complicidad mientras me guiaban hacia el corazón del bosque.

Pov. Hinata

Podía sentir la presencia de Apollo acercándose al bosque antes de que apareciera. Mis sentidos se habían agudizado con los años, y ahora podía detectar incluso las más mínimas perturbaciones en la energía del lugar.

Esta vez, no me tomó por sorpresa. Me encontraba cerca del arroyo, donde las flores negras y blancas crecían en abundancia. Sabía que Apollo volvería, y estaba dispuesta a recibirlo.

Cuando finalmente lo vi, emergiendo de entre los árboles con su brillo dorado, no pude evitar sonreír. Sus ojos reflejaban la curiosidad y el respeto que sentía por este lugar.

"Bienvenido de nuevo, Apollo" le saludé mientras las hadas oscuras se acercaban con sus curiosas miradas.

"Hinata, es un placer volver a verte" respondió con una sonrisa cálida. "Espero que no te importe que haya regresado".

Sacudí la cabeza.

"Por supuesto que no. Este bosque es un lugar de bienvenida para aquellos que lo respetan. Además, siempre es un honor tener a un dios visitante.

Las hadas oscuras nos rodearon, ansiosas por escuchar lo que compartiríamos. A medida que explorábamos el bosque juntos, compartimos historias y experiencias. Hablamos de nuestros deberes divinos y de las rarezas de nuestras vidas".

Pov. Apollo

A medida que compartíamos nuestras historias, me di cuenta de cuánto teníamos en común, a pesar de nuestras diferencias. Ambos éramos guardianes de nuestros respectivos hogares, y ambos habíamos encontrado soledad en esa responsabilidad.

Hinata tenía un don único para comprender la vida y la muerte en un nivel profundo. Sus percepciones eran sorprendentes y únicas, y eso me fascinaba. Había una serenidad en ella que me tranquilizaba, y su belleza única no se limitaba a su apariencia física.

A medida que pasaban las horas, nuestras conversaciones se volvían cada vez más personales. Compartimos nuestros sueños, nuestros miedos y nuestras esperanzas. Había algo en la forma en que Hinata escuchaba atentamente mis palabras, a pesar de su ceguera, que me hacía sentir comprendido y valorado.

A medida que el sol se ponía en el horizonte, supe que era hora de partir. Había pasado un día increíble en compañía de Hinata y las hadas oscuras, pero tenía que regresar al Monte Olimpo.

Pov. Hinata

Con el tiempo, la conexión entre Apollo y yo se hizo más fuerte. Había encontrado a alguien que apreciaba mi mundo y mi naturaleza de una manera que nadie más lo había hecho. Él no me veía como un ser limitado por mi ceguera, sino como alguien con una percepción única del mundo.

Mientras caminábamos juntos por el Bosque Muerto-Viviente, nuestros corazones se entrelazaron en un vínculo que ni la vida ni la muerte podían romper. Era una amistad profunda y sincera que estaba destinada a perdurar.

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⏰ Última actualización: Jan 09 ⏰

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Η αγάπη του φ Eωτός στο σκοτάδι(El Amor de la Luz en la Oscuridad)(Reescritura)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora