Kinktober 2023 - Bunguo stray dogs

Día 2 - A través de mi persiana americana

Día 2: Persiana Americana - Striptease 

Ship: Dazatsu

Este capítulo no tiene relación con ningún otro fic escrito. Capítulo único. Universo alternativo - Sin poderes.

Se recomienda escuchar "Persiana americana" de Soda Stereo para ambientar pues saqué la inspiración para esta historia de allí.

[...]

Llegó a su apartamento exhausto, completamente drenado por él día tan agotador que tuvo en la agencia de detectives donde su socio y compañero de casos Kunikida, lo hostigó hasta el cansancio para que hiciera los reportes pendientes sobre aquel asesinato efectuado hace tres meses en el club de strippers de la zona centro del barrio chino.

Un sitio bastante concurrido y movido, especialmente por la noche, por lo que la cantidad de sospechosos era enorme. Sin embargo, gracias a sus grandiosas capacidades deductivas y a lo diligente de su ruidoso compañero, pudieron resolverlo relativamente fácil, algo que la policía no había podido lograr en semanas hasta que por fin decidieron involucrar a los detectives privados.

Con el asesino de prostitutas atrapado y siendo procesado, la calma en los barrios bajos volvió, dentro de lo que cabe, pero por supuesto el papeleo no se pudo evitar y dado que él participó en el caso Kunikida injustamente pidió que hiciera su parte.

— Si sabe que odio hacer informes porque no los hace él...se ahorraría sufrir de la presión arterial y ambos estamos felices — reprocho para sí mismo mientras se quitaba los zapatos para entrar a su apartamento solitario y desordenado, rodeando algunas latas de cerveza tiradas por ahí, mientras se quitaba su abrigo y lo arrojaba sin cuidado en el sofá, aflojando su corbata y desabotonando su chaleco para estar más cómodo.

Después miró su reloj de muñeca para comprobar la hora dándose cuenta que eran casi las 7:00 pm. Oh que bueno, llego justo a tiempo para la hora del show.

— Ah~ esto al menos me relajara esta noche — el castaño sonrió, suspirando con anhelo mientras tarareaba la melodía de una canción aleatoria que escucho por ahí camino a casa, o tal vez fue en los barrios bajos, donde tuvo que pasar mucho tiempo estas últimas semanas debido al caso, quien sabe.

Busco su telescopio y lo posiciono junto a la ventana, después, movió su sofá individual, reclinable por supuesto para mayor comodidad, ubicándolo frente al telescopio.

Reajusto la altura del aparato de modo que pudiera observar bien incluso sentado, y reviso con cuidado la parte de la montura para asegurarse que estuviera ajustada de modo que no se inclinara y apuntará hacia abajo repentinamente cuando él no estuviera sosteniendo el tubo del telescopio por tener sus manos ocupadas en otra cosa.

Ya le pasó una vez, y aquella interrupción de su espectáculo fue realmente molesta. Claro, no necesitaba precisamente el aparato para ver, pues el objeto de su entretenimiento estaba relativamente cerca, solo debía asomarse en la ventana, pero prefería observar a detalle para más satisfacción.

— ¡Bien! ¡Todo listo para mi noche de entretenimiento! — cantarino y como un niño emocionado que esta a punto de ver su película favorita, fue dando brinquitos a su habitación buscando una botellita ya medio gastada de lubricante — Diablos...he usado esta cosa mucho últimamente, tendré que comprar mas mañana — comento de nuevo para si mismo, sintiéndose tonto momentáneamente de hablar solo pero, ya estaba algo acostumbrado por tanto años de vivir por si mismo, incluso si la gente dudaba de su cordura por este habito. (A decir verdad si tenia mas de un tornillo zafado y una brújula moral que no apuntaba precisamente al norte, pero detalles).