ACEPTACIÓN

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Fui la última en llegar al desayuno. Mariana y Saul estaban tomando café en la mesa y María estaba terminando de preparar el desayuno. Decidí que era mejor ir al baño primero. Una vez allí me sorprendió la humedad entre mis piernas. Había tenido sueños eróticos antes, pero nunca nada como esto. Me limpié y después fui a cambiarme, por alguna extraña razón saqué las pantimedias naturales que tenía en la bolsa por sugerencia de Mariana, me puse unos shorts y salí para reunirme con los demás.

Se burlaron de mí como la dormilona y yo les dejé, sin confiar en ninguna conversación en profundidad todavía. A juzgar por la forma en que todos los demás actuaban, supuse que debía haber soñado todo el asunto, sólo que había parecido tan real. Estuve notablemente callada durante el desayuno y dejé que pensaran que era porque había bebido demasiado vino la noche anterior. Me pareció ver a Saul sonriéndome un par de veces, pero rápidamente aparté la mirada. Tengo que controlar las cosas y dejar estos pensamientos locos.

De nuevo Mariana y yo nos ofrecimos a limpiar los platos sucios y Saul y María salieron a caminar. No podía dejar de pensar en mi sueño y Mariana de repente me dijo que me veía muy sexy con mis pantimedias puestas, no sé de donde salió, pero sentí mi concha humedecerse solo del comentario de Mariana, estaba muy excitada.

Una vez que tuvimos todo limpio nos fuimos a cambiar y nos pusimos los trajes de baño ahora yo también usaba pantimedias debajo de mi traje de baño al igual que Mariana, cuando llegamos a la orilla del lago, Saul y María estaban muy ocupados conversando. No confié en mí misma para unirme a ellos, así que me bajé y fui directamente al agua sin embargo solo me senté a la orilla.

Me senté en el borde y miré a los demás. Parecían divertirse charlando. ¿Estaba yo loca? Tuve este extraño sueño de locura y ahora estoy dejando que afecte a mi forma de actuar con los demás. Tenía que darme cuenta de que todo estaba en mi cabeza y no dejar que arruinara el resto de mi viaje. Mi imaginación desbocada y el rápido enamoramiento de Saul se me habían ido de las manos y tenía que recuperar el control. Me decidí. Me puse de pie, y caminé hacia donde estaban los demás

Llegué junto a ellos y sonreí por primera vez ese día. Sintiéndome renovada, extendí mi toalla entre la de Mariana y la de Saul y me dejé caer para empezar a tomar el sol. Me uní a las muchas y variadas conversaciones que surgieron y me sentí bien por ello, sin embargo me quede dormida, dentro de mis sueños pude ver a Mariana y a María chupándole la verga a Saul mientras este se encontraba recostado, me estaba dejando ir por mis fantasías de nuevo, seguramente me vieron durmiendo porque Saul dijo despierta y yo pestañe un par de ocasiones, sentí muchísima pena porque una de mis manos estaba entre mis piernas, antes de que yo dijera nada Mariana me dijo que la siguiera y nos dirigimos a la cabaña para preparar unos sándwiches para el almuerzo.

El resto del día transcurrió rápidamente, pero fue muy agradable sin embargo me sentía cansada dormite de vez en vez durante el día y seguía teniendo sueños raros.

Saul se ofreció a hacer hamburguesas para la cena y Mariana se ofreció a ayudar. María y yo nos fuimos al cuarto con la promesa de que nos llamarían cuando la cena estuviera casi lista. Hablamos de muchas cosas y finalmente el nombre de Saul salió en nuestra conversación. María dijo que Saul era el hijo de un primo lejano y que lo conocía desde niño, pero que había desaparecido durante un tiempo. Él se había ido al extranjero a capacitarse en hipnosis y magia y parecía le estaba yendo muy bien con su espectáculo de magia y su habilidad con la hipnosis. Este último comentario me mojo entre la entrepierna. No sabía qué decir a eso, así que no dije nada y me quedé mirando al camino, llegamos a la banca que estaba afuera de la cabaña y nos sentamos

María Empezó a hablar de algunos de los trucos de cartas que había hecho para nosotras e intentaba averiguar cómo los había hecho. Luego cambió la conversación a cuando él la había dormido con su hipnosis y me contó lo extraña que se había sentido al sentir que se desvanecía escuchando su voz. Me dijo que no recordaba lo que había hecho después, pero que le había preguntado esta mañana y que él le había dicho que la próxima vez le haría recordar todo si quería.

Un viaje entre amigasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora