Desastres de amor (Jikook)

Veintiseis

La cena comenzó con el saludo de los invitados. Irina y Soobin eran el centro de atención, hasta que el rey se acercó al conde.

"Mi tercera ex esposa, está por llegar Park. Ella no sabe que eres el padre del novio"

"Es broma? Espero que no haga un escándalo" dice Taehyung bebiendo su whisky.

"No voy a dejar que dañe la cena de mi hijo Nowak. Además Irina pasará a ser mi hija tambien, y no tolero la falta de respeto para con ella tampoco"

"En eso estamos de acuerdo. No voy a permitir que Nikola arruine esta noche, y me acaban de avisar que los asistentes de mi yerno llegaron"

"Asistentes? Quiénes?"

Jungkook ingresa seguido de Yoongi a su lado y todas las miradas caen sobre ellos. Se dirigen directo a Soobin y le entregan una bolsa, dándole una gran sonrisa y moviéndose a un costado por un momento.

"No puedo creer que lo consiguieras Kook"

"Te dije que lo haría; además Yoongi hizo el trabajo duro" se rien los tres.

"Oh solo fue un rasguño y lo disfruté. Ese idiota no robará nunca mas" sonrie en grande.

"Qué estan haciendo aquí?" Llegan Jimin y Taehyung.

"Solo traemos un encargo -responde y vuelve a mirar a Soobin- y mañana no estoy en todo el dia. Tengo un trabajo de Seung, asi que nos vemos pasado mañana en la oficina"

"Bien, veo que Yoon te cuida, asi que solo avisen si todo va bien"

"Gracias, nos vemos" responde Yoongi y con un asentimiento se van caminando con sonrisas en el rostro, recibiendo las miradas de todos nuevamente.

"Estos peces parecen tiburones ahora. Están secretando para llamar la atención, que asco"

"Jimin, calma. No digas mas nada y mira acaba de llegar otro problema a tu vida" señala con la cabeza, a la madre de la novia.

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Jungkook llega a la gran biblioteca de Seul y se acomoda con los libros. Ama leer, no se cansa nunca de encontrar cosas nuevas y además tiene su lugar privado por lo que mientras ojea y bebe café, a lo lejos ve a Yoongi dormir.

Han pasado ya cuatro horas, y cada hoja nueva es una parte mas de su familia que a veces, se aparece como imágenes una tras otra, y sabe que son la memoria de su padre.

Aun no abre su carta. Leyó la que su madre recibió cuando los abandonaba y lo odio tanto, que teme que ese odio vuelva y termine por despreciar a Momo y a Seung, aunque ellos no sean los culpables de su dolor.

"Np entiendo porque tantas uniones por poder si al final, todos parecen tan infelices. Por qué no luchaste por ella?" Suspira y vuelve a su libro.

Yoongi no duerme, y quiere decirle tantas cosas. Él sabe bien que el entramado de la corte era muy complicado.

Amar a Hobi le costó su título y el desprecio de sus padres, que aunque tenían al primogénito para una futura unión ya tenían todo planeado.

Ser estudiante del Conde Jeon, lo ayudó. Fue recibido en la casa y recibió instrucción para en un futuro, cuidar del futuro heredero.

Algun día, debía decirle a Jungkook todo lo que sabia, pero no aun. La carta seguía cerrada, y los secretos no podían tocarse antes de tiempo.

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El Conde Park estaba mentalmente contando hasta mil. Desde que Nikola lo saludó, se instaló a su lado y no para de planear reuniones con él.

"Si me sigue hablando le arrancaré la garganta"

"Jimin, usa tu hipnosis y se callará; está incomodando a todos, y la cara de Irina no es de felicidad"

Ambos miran a los novios en la punta de la mesa y la chica está muy apenada viendo con ojos de cachorro a su padre y al conde.

*Irina, te molestaría que hipnotizara a tu madre?*
~Conde Park, que pena con usted, por favor solo quiero que se calle~
*No pasa nada, y no me trates de usted, ya eres mi hija, aunque falte la ceremonia* le sonrie y levanta una copa hacia ella.

La joven sonrie de vuelta y le responde el gesto.

"Nikola, cierra la boca, disfruta la cena y retirate sin molestar hasta el día de la ceremonia"

Aunque nadie lo admita en voz alta, todos están agradecidos. Soobin se levanta pidiendo un momento a solas con su prometida y busca la bolsa que recibió de Jungkook.

Le entrega el regalo a Irina y ella salta a abrazarlo. Un hermoso collar de esmeralda y un broche  a juego se encuentran en la caja.

Su herencia materna era muy importante para ella. Su abuela había fallecido hacia poco y aun estaba dolida por eso.

"Juro que solo tuve que pedirlo; sabes que Jungkook es tenaz y buscó ayudarte porque te aprecia"

"Lo sé Soo... Gracias, gracias por pensar en mi"

Se abrazan y en medio del beso, se rien notando al conde llegar.

"No quise interrumpir, pero ya me despido. Todo queda a cargo de Taehyung y sé que lo que falta será hermoso"

"Ten cuidado papá"

"Lo tendré... Irina, sé que te dí un regalo hace poco, pero todavía debo darte algo mas. Al volver tendremos una reunión en la mansión, porque Taeyang quiere conocerte"

"Esta bien, puedo planear algo?"

"Claro que puedes, ya eres mi hija, una Park y puedes hacer lo que quieras" le deja un beso en la frente y se va hacia Taehyung.

"Vigila a todos y busca lo que te pedí. No quiero fiestas mientras no estoy, avísame cuando vuelva Jungkook"

"De acá a cuando te interesa?"

"Desde que hablé con Seung y me preocupa porque no quiero una guerra en mi casa"

"O sea que de su bienestar nada? Ni un ápice de preocupación?"

"Taehyung no te pases conmigo. En vez de querer analizarme, haz lo que te digo" sale para subirse a su auto y no dejar que le replique.