Desastres de amor (Jikook)

Veintitres

Jungkook entró a su cuarto y se quitó la ropa para darse un baño mientras su mente procesaba lo que había ocurrido.

En qué estaba pensando, ya ni sabía. Lo disfrutó, claro que si.

"Y ahora cómo vuelvo de eso?"

Limpiaba su cuerpo y dejaba que el agua enjuagara la espuma que caía de su pelo.

Terminó y se colocó una bata mientras se secaba su rubio cabello. Se puso a buscar algo para dormir y cuando tomaba su boxer golpearon su puerta.

"Pase" dijo sin mirar. Sacó un pantalón de pijama y lo arrojó a la silla y siguió con su pelo cerrando el armario.

La puerta se cerró y nada mas se oyó. Giró para ver quien era, y contuvo el aliento al verlo frente a él.

"Sucedio algo?"

"Si, sucedió todo..." se acerco juntando sus labios con voracidad.

(🔞 leve)

Retroceden para caer en la cama y es el conde quien desata la bata, y recorre el cuerpo del rubio bajo él.

Los jadeos se vuelven a sentir. Los chasquidos aumentan. La mano de Jimin llega a la erección de Jungkook y lo toma con parsimonia.

"Aahg... Si, asi"

El vampiro sonrie y recorre con sus labios y su lengua el cuerpo bajo suyo. Lo siente retorcerse y apretar las sábanas.

"Esto va a gustarte" lame su falo y lo chupa despacio y usando sus colmillos en los bordes.

"Mier-da! Aagh" retuerce sus manos buscando que mas apretar.

"Y falta lo mejor" lo toma en su boca para comenzar a moverse con una lentitud que tortura.

"Mmg, ca-rajo... Se siente de-li- cioso, aagh" sus ojos se nublan de placer.

El reflejo de su ventanal, muestra dos cuerpos sudados. Uno recostado semidesnudo y otro a sus pies, usando sus manos, y boca enloqueciéndolos.

El movimiento no se detiene. El calor aumenta y con ello, los gemidos de Jungkook que retiene y a veces quedan entre sus labios.

"No te contengas, que todo es insonoro" y lo toma hasta el fondo de su garganta.

"Aagh, por fa-vor... Voy a aca-bar, mas..." lo toma del pelo y hunde sus dedos en él.

Las lamidas sobre su cuerpo se detienen y al alzar la vista puede ver a esos ojos rojos, destellando la lujuria.

"Eso fue intenso"

"Y puede serlo mas, pero no hoy, debes descansar" lo besa con un leve toque en la mejilla y se levanta saliendo de la habitación.

Todo se vuelve silencio y el rubio vuelve a la ducha.

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Las siguientes dos semanas se fueron y el ajetreo de la casa, los tenia a todos en movimiento.

Las novedades llegaron y daban cuenta de la unión de Baekhyun y Yunyeon que se había realizado bajo la venia del Archiduque, quien tambien llamó al joven unos minutos y le dejó una clara advertencia.

Jungkook no sintió absolutamente nada.

Perdido entre trabajo y Soobin con la boda, solo tenía algunos respiros. En medio de eso, Jimin se escabullia y lo hacía delirar con sexo oral y recorriendo su cuerpo enloqueciéndolo.

No habían tenido sexo y ambos estaban a punto de estallar.

"Jungkook cerrarás el contrato de la celebración japonesa esta noche en el restoran. La invitación está en tu escritorio y puedes quedarte a cenar si quieres, después vemos la asistencia"

"Gracias Soo. Entonces solo firmarán y ya está. Qué vas a hacer hoy?"

"Tengo una comida con los abuelos de Irina. Los humanos fueron muy comprensivos y ella quiere a toda su familia en la boda"

"Y cómo lo tomó tu papá?"

"Lo tomó bien. Creo que tu influencia sobre él, está dando frutos"

Jungkook se ahoga con su café.

"Mi influ-encia? Cual?"

"Hey vamos! No te quites ese mérito, que gracias a que están juntos casi siempre, él está de buen humor y hasta habla mas con todo el mundo"

"Bue-bueno, yo no sabía eso"

"Haces que mi papá se suelte mas, y te agradezco mucho... Cuando te vayas de aquí, no te olvides de visitarnos" suelta con cierta tristeza.

"Ten por seguro que no lo haré" le sonríe. "El conde estirado de la amargura, ya no es tan estirado" hace que los dos rian.

Soobin se retira y la oficina está en calma, aunque los teléfonos no paran de sonar.

"Jungkook, la línea dos para ti" le dice Mina.

"Gracias, ya la tomo" se sienta y atiende.

*Hola?*
-Hola pequeño. Como has estado?-
*Seung, todo esta bien. Qué pasa?*
-La sesión por el ataque de los rusos se llevó a cabo. Hice mi pedido de justicia por ti, y el rey tritón Nowak asistió también-
*Ok, entonces ya está resuelto?*
-Si, ya no tienes que preocuparte por ellos-
*Algo mas?*
-Leiste algo de lo que te envié?-
*Bueno algunas cosas, no leí su carta si eso te intriga*
-Esta bien, no voy a presionarte con que la leas. Pensaste en lo que hablamos?-
*Lo pensé. Este mundo está rodeándome y aunque debería no tengo temor...*
-Entonces?-
*Solo promete que nada cambiará. No me casaré por obligación, no seré un estirado de la corte, no dejaré que me falten el respeto*
-Solo pasarás por el cambio de la inmortalidad, no voy a cometer el error de unirte sin que lo quieras-
*Gracias... Entonces nos vamos a ver pronto*
-Si pequeño, tu hermana irá a buscarte y te llevará a una locación segura y lo haremos todo asi-
*Esta bien... Bueno, supongo que nos veremos*
-Cuídate Jungkook-
*Tambien tu, hasta pronto*

Jungkook se queda pensando y se pierde. Las chicas lo ven suspirando y no lo molestan con mas trabajo.

Unas horas mas y todo el mundo sale para seguir con la noche. Sube al auto que lo espera afuera y se va hacia el hotel.

La mesa estaba lista para él y la representante japonesa lo recibió cortesmente.

Hablaron de trivialidades y se firmó el contrato. La joven se despidió y le reiteró la invitación para luego perderse entre las mesas.

Cenó con calma y revisó su teléfono intercambiando mensajes con sus amigos.

Jackson estaba vigilando a Soobin, Yoon y Hobi buscaban un encargo de su abuelo y Eunwoo terminaba unos negocios. Taehyung se encargaba de las invitaciones y otras cosas y el Conde Park recibía comitivas casi todos los días.

Vampiresas y otras criaturas llegaban al hotel, a la oficina y una que otra a la mansión.

Mientras dejaba su teléfono y saboreaba las frutillas con crema, alguien se sentó a su lado.

"Puedo probar?"

"No crei que le gustara lo dulce"

"Me encanta si está en tu boca" lo toma del mentón y lo acerca, pasando su lengua por los labios.

Un beso comienza y ninguno es capaz de detenerse.

"Podemos ir a un lugar mas privado. Puedes llevar las frutillas con crema" se levanta y lo lleva de la mano hacia el ascensor. 

Las puertas se cierran y los labios se unen.