Siempre te he anhelado.

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Jimin se escapa hacia la sala y Jungkook se queda en su lugar estático, avergonzado de haber sido descubierto, siempre pensó que sus sentimientos hacia el omega eran indebidos. ¡Lunas! ¡Jimin era un maldito niño cuando él apenas tenía catorce!

Pero no pudo evitar enamorarse de la manera más pura posible de ese pequeño y adorable niño que corría tras el ganado o ayudaba o ordeñar las vacas, verlo con sus adorables botas rojas de lluvia y su lindo paraguas de florecitas hacía que su alfa mueva su colita y quisiera protegerlo de todo. Incluso de si mismo.

Cuando Jimin se le insinuó con apenas dieciocho Jungkook sintió que estaría traicionando a toda la familia Park, incluida especialmente Nami a quien tomaba y adoraba como a su propia hermana. Jungkook siempre cuidó de Jimin también, pero siempre fue una protección algo distinta con él, su alfa siempre lo quiso de una manera más especial y eso siempre lo asustó. Tal vez por eso intentó acallar las súplicas de su alfa con distintas parejas.

—En realidad, desde que Jimin cumplió sus doce años supimos que ustedes dos estaban destinados a ser —Eunbin lo devuelve a la realidad y Jungkook solo se limita a palidecer más ante las palabras—. Cuando él entró en la preparatoria no hacías más que gruñir molesto y quejarte de los alfas hormonales, cuando tú también eras uno y jamás te oímos decir lo mismo cuando un alfa intentaba cortejar a Nami.

—Perdón... yo... nunca quise... —niega con su cabeza, intentando no dar una mala impresión de todo su remolino de emociones hacia ese precioso omega.

—No hay nada que aclarar, jovencito —el padre del omega lo calla con un tono cortante y amable a la vez—. Ustedes ya están grandes y nuestra bendición la tienen desde hace tanto tiempo atrás —suelta un jadeo de sorpresa y su alfa gruñe feliz en su pecho, burlándose de él y de todas sus estúpidas inseguridades.

—Y aunque no sabemos lo que sucedió en la semana de la boda de Nami, creemos que deberían arreglar las cosas —Eunbin toma su mano sobre la mesa y la acaricia suavemente con sus dedos. Es como si la gran pared para contener sus sentimientos hacia el omega se fuera derrumbando con cada palabra—. Es una lástima que desperdicien tanto tiempo...

Jungkook asiente pensativo a toda la nueva información de la familia Park, Nami incluso ha demostrado su aprobación de cierta manera insinuando que haría una linda pareja con un omega hombre o preguntándole constantemente sobre el aspecto de Jimin o lo mucho que ha cambiado últimamente. Jungkook siempre tiene que morderse la lengua para no suspirar y vomitar todos sus sentimientos.

La tarde se termina convirtiendo en una cena y Nami anuncia que serán los padrinos de su bebé, ella también anuncia el sexo del niño y prácticamente los obliga a que le den demasiados regalos. Jimin se desliza con su hermosa sonrisa de hoyuelos y abraza a su hermana hasta que el ambiente se llena de sus deliciosas feromonas y de su aroma tan dulce y exquisito.

Cuando todos se están despidiendo y Jimin anuncia que tomará un taxi, su cerebro y su alfa se fusionan para darle la idea más brillante que tiene desde hace mucho tiempo, así que con cuidado y controlando sus feromonas se acerca lentamente al omega y aclara su garganta. Jimin se gira a mirarlo con sus preciosos ojos jade y Jungkook pierde el aliento por un segundo, toda su saliva desaparece de su garganta cuando el omega tira de su cabello hacia atrás.

—¿Necesitas algo? —él pregunta expectante, siente la mirada de Luke quemando en su espalda.

—¿Quieres que te lleve hasta tu departamento? —pregunta suavemente y suelta feromonas tranquilizadoras para no alertar al omega, que sepa que no hay malas intenciones detrás de todo esto.

—¿No...? —él responde, sonando más como una pregunta que como algo concreto, así que sonríe suavemente revelando sus arruiguitas a los costados de sus ojos.

𝐘𝐎𝐔 𝐖𝐀𝐈𝐓𝐄𝐃 𝐅𝐎𝐑 𝐌𝐄? ᥫ᭡ kookmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora