Caballero Oscuro (Camren Gip)

El Plan

Lauren

Espera por mi Camila- susurre, el agua estaba fría, era mejor así, quería estar despierta- Cuida del bebe- intentaba calmarme, escuche dos toques en la puerta- Adelante- era la sirvienta dejando mi ropa en la silla

Su comida la deje en la mesa- hizo una pausa, no sabía cómo llamarme- 

Lauren- hable- no te preocupes, no me importa cómo me llames- ella asintió dándose vuelta para salir- 

Me mente solo pensaba en ella, no quería imaginar lo que estaría haciendo aquel imbécil, sabía lo que ocurría en estas situaciones. 

Maldita sea Austin- acabe de cambiarme, comí un poco de carne y pan- Te voy a matar maldito bastardo- me ira crecía, no podía controlar lo que sentía en el pecho, tome una silla lanzándola contra la pared, golpe varias veces la pared, hasta que perdí fuerzas y comencé a llorar, tenía miedo de no recuperarla, de no salvarla- Calma- recordaba su voz, la veces que me había calmado, me repetía a mi- Calma

Me levante, acomode mi cabello y respire profundo, mi mundo ya ardía, ahora yo le enseñaría lo que era incendiar el mundo. 

Alejandro- lo vi de espaldas a mi- Que tenemos- estaba demasiado concentrado en los mapas

Coloco el doble de seguridad- contesto- Eduard me dio una estrategia, dijo que sabrías que hacer- 

Donde esta- pregunte confundida, siempre compartíamos ideas. 

Salió hace un momento-repasaba las líneas marcadas- El hablo de una distracción, pero no entiendo cuál sería- su cara mostraba concentración- Como un caballo de troya 

Hace cuando que salió- mi desesperación volvió- Hace cuando Alejandro- grite

Que ha hecho- el sabia lo mismo que yo- Se llevo tu armadura- paso su mano por su rostro- Él dijo que la distracción debía llevar tropas, directo al enfrentamiento, mientras que los cañoneros atacaban de lado, la parte trasera quedaría libre pero no por completo aun así sería sencillo- golpe la mesa

Iré por con el- la mano de Alejandro sujetando mi brazo me detuvo- Suéltame

Se ha sacrificado Lauren, no le arruines los planes- mis lagrimas empezaban a salir- Calma- me abrazo- Ve a cambiarte, su armadura está en el salón- me dio tres golpes en la espalda- Ahora depende de nosotros- 

Narrador

Vamos muchacho Lauren te enseño a correr, corre conmigo- acariciaba al caballo, aquel majestuoso Caballo negro- Rescataremos a tu prima amor- miraba al cielo 

Aquel hombre, como lo había planeado la batalla comenzó arqueros lanzaban flechas, la artillería se acercaba, sonrió, le encantaba cuando tenía la razón, le abrieron paso dejándolo entrar. 

Se repetía así mismo que todo iba bien, pero resultaba todo muy sencillo, su espada ya estaba llena de sangre. 

Caminaba con sigilo hasta que escucho unas voces. 

Anciana- la voz de Austin demostraba odio- Has que beba eso- unos golpes lo hicieron corre hacia la habitación- Que lo bebas, el primer hijo debe ser mío- al abrir la habitación encontró a una Camila acostada en el suelo encima de ella Austin agarrándola del cabello mientras su otra mano intentaba vaciar el líquido en su boca, la anciana estaba tirada en el suelo, ella había recibido los golpes

Suéltala imbécil- grito-  

Vaya- sonrió, bajando el vaso- Has llegado- se levantó dejando a Camila recostada- Muy fácil no- limpiaba sus manos con un trapo- Veras quería que estuvieras en la muerte de tu hijo- sonrió- Por si no lo sabias- camino para tomar su espada- Y que ella mire tu muerte- 

Eduard tomo su posición en defensa, no quería lastimar, sabía que lo merecía, merecía la muerte, pero si aceptaba ese camino ya no habría regreso, Lauren por su parte estaba más profundo que él, por esa la razón de su armadura ella era la oscuridad de un caballero cuando la piedad y esperanza no existe, sin embargo, el, el mostraba la luz y compasión.   

El choque de las espadas lo saco de sus pensamientos, la sangre de sus enemigos ahora era compartida con la espada de Austin, un giro lo hizo esquivar la espada, mientras que Austin con su brazo detenía la espada, el no llevaba armadura no la necesitaba, solo utilizaba hierro en los brazos para esquivar o defenderse de ataques. 

Has perdido el encanto- su espada rayaba la armadura- No estas peleando enserio- volvió a lanzar un movimiento hacia él, directo al pecho, pero este lo esquivo moviéndose de lado haciéndolo caer- Me frustra- de reojo veía a la anciana con Camila en sus piernas, ambas seguían en el suelo, está la ayudaba a sobar su estómago mientras con la otra mano sostenía su cabeza- 

Que le hiciste- hablo-

A ella- limpiaba su labio con sangre- Solo bebió un remedio- tomo una postura de pensador- Aunque realmente quien le hizo daño fue ella- señalo a la anciana con la espada- aah sus golpes- la miro- Ella se arrepintió de darle la bebida así que- alzo los hombros- La castigue por su desobediencia- bebió de su copa con licor- Talvez en unos minutos tu hijo no exista- apretó la mano en un puño

Volvía la danza de sus espadas, los ataques eran fuertes, sus defensas eran lo suficiente buenas hasta que una había encontrado un lugar desprotegido, todo se volvía silencio y en el rostro de Camila una lagrima caía, aun casi inconsciente veía la escena. 

Lo logre- su grito era de locura- Lo logre- alzo su espada para volver a bajarla y enterrarla- Demasiada piedad- con su mano libre retiro el casco- Un hombre cualquiera - 

Eduard- el susurro de Camila apenas se escuchó, ahora más lagrimas salían de sus ojos- Noo- grito, la anciana dejo de sobar su estómago para tomar su mano en un agarre fuerte- 

Calma- le hablo al oído- Encontrare una forma de que te vayas- miro alrededor- Tu bebe está bien- volvió a sobar su estómago- Solo era te para dormir- sonrió- Pero tu hombre- miro la escena- Toda ira bien niña- Camila negó 

Ahora es mía- saco la espada de su estómago, para empujarlo con toda su fuerza- Ten un buen viaje- la sangre salía de su boca, el intento por respirar le dolía más que tocar la herida, en sus ojos había un brillo y una pequeña sonrisa se formaba en el

Eve- podía ver un destello de luz y a su mujer extendiendo su mano para él, con las pocas fuerzas que tenía alzo su mano, al mismo tiempo que lo hizo Austin enterró su espada en su pecho- 

Se termino- sonrió- Gane - peino su cabello- Que comeremos en la cena- volvió a llenar su vaso de alcohol- Oye anciana debes prepáramela- señalo a Camila- Esta noche será mía-