Cuando conoces a alguien no siempre te da una buena impresión, y no es para menos cuando se trata de Suguru Geto.
📍FICCIÓN📍
FINALIZADA
Este es mi esfuerzo y mi trabajo. NO acepto copias o adaptaciones. Quién no cumpla con lo anterior será denuncia...
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Satoru y yo estábamos con los viejos hablando de un niño. Yuta Okkotsu.
- ¿Encubrimiento total y ejecución secreta? -preguntó Satoru-. No sean ridículos.
- El muchacho estuvo de acuerdo -dijo uno.
- Es menor de edad, apenas tiene 16 -intervine.
- Quién sabe que generará su maldición.
- Se las pudo arreglar contra tres hechiceros de segunda clase y uno de primera.
- Por eso nos necesitan -soltó Satoru-. ¿Ya se les olvidó?
- O sea, que...
- Sí -respondió mi compañero.
- Yuta Okkotsu irá a la academia de hechicería -informé.
Satoru y yo estábamos con Yuta en una sala en la que no podía invocar a su maldición. El chico estaba sentado en la silla cabizbajo.
- ¿Qué es esto, Yuta Okkotsu? -preguntó Satoru sacando un cuchillo.
- Era un cuchillo -respondió-. Intenté matarme, pero Rika interfirió.
- Que tétrico -comentó tirando el cuchillo al suelo.
Miré al chico con algo de lástima. Era muy joven y el pobre ya había intentado quitarse la vida.
- Hoy asistirás a una nueva escuela -añadí.
- No pienso ir. Ya no quiero lastimar a nadie, así que no pienso volver a salir.
- Pero, es muy triste estar solo -respondió Satoru.
Lo miré de reojo, ambos sabíamos el porqué de su respuesta, Suguru, nuestro antiguo compañero y amigo que decidió seguir su camino solo.
- La maldición que tienes, también podría usarse para salvar a otros -comenté.
- Aprende a usar su poder. Ya te rendiste una vez. Pero aún estás a tiempo -continuó Satoru.
Me acerqué a Yuta y me agaché a su altura. Le sonreí de forma cálida y agarré su mano con firmeza.
- No estás solo en esto -le informé.
Yuta me miró con los ojos llorosos, por lo que me sorprendí. No dudé en abrazarle, después de todo puedo entender lo que siente. Estar solo es horrible, pero sentirse solo es muchísimo peor.
Al final Yuta aceptó nuestra oferta, tampoco tenía otra opción. En unos minutos empiezan las clases y yo ya estaba en la clase. Satoru iba a ir a por Yuta, él insistió demasiado y todos sabemos como es Satoru.
No tardaron mucho en llegar los de primero. Maki, Panda y Toge. Los tres son increíblemente fuertes y tienen unas habilidades increíbles.
- Buenos días, Naiara-sensei -saludaron todos menos Inumaki.
