Quizás contar nuestra historia no sería tan difícil, si la contaras conmigo.
Siempre creí que lo harías. Claro, mi público ideal hubieran sido nuestros hijos, o incluso nietos. Tal parece ser, que eso será imposible, ya que no estás aquí para hacerlo conmigo.
Pero, intentaré iniciar:
Esta historia, por muchas que haya leído, siempre será mi favorita. Y no, no tiene nada que ver el hecho de que la haya vivido. ¿No es cierto que al leer cada una de nuestras historias favoritas las vivimos? Una pequeña parte de todos nuestros romances favoritos, siempre se graban en nosotros.
Es aquí donde empieza esta inesperada coincidencia, que lleva por nombre: Nicolás.
Te explicaré un poco mejor. ¿Sabes cómo esas personas extrovertidas y llenas de energía, cada lugar por el que pasan dejan una gran huella, que por más que intentes, será difícil llenar? Bueno, así podría describir a Nicolás, a Nico, a mi más largo, y más doloroso amor.
Solía creer que el destino tenía todo previsto, que cada paso que daba era parte de una gran historia que el universo tenía escrita para mí. Claro, que mi mayor equivocación, fue no deparar el hecho de que toda esta historia, incluía un giro de 180 grados. Incluía una persona de ojos marrones y linda sonrisa, que al final, me dejó extrañando ver aquellos detalles día con día.
Sin más que hacerte saber, me gustaría que comenzaras a escuchar nuestra historia.
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La primera estrella de mi mar.
RomansaHasta la última estrella. Hasta el fondo del mar. Solía creer que el destino tenía todo previsto, que cada paso que daba era parte de una gran historia que el universo tenía escrita para mí. Claro, que mi mayor equivocación, fue no deparar el hecho...