"Di ya estoy aquí" Dijo Camila sujetando el móvil con fuerza.
"¿En la entrada?"
"No, en la sala de descanso de la planta baja, tengo que ir a Recursos Humanos antes de subir, quiero que ella venga conmigo" Dijo Camila mirando alrededor, consciente de varias miradas curiosas dirigidas a ella.
"Vale, dame dos minutos"
Dinah cortó la llamada y Camila empujó su silla hacia una de las mesas libres y sacó de su maletín el papel que debía entregar en Recursos Humanos para indicar que iba a volver a incorporarse ya que se había olvidado de cubrirlo antes de salir de casa.
Varias plantas más arriba, Dinah se puso de pie y caminó hacia la puerta de Lauren golpeando tres veces en la madrera.
"Adelante"
Cuando Dinah escuchó esas palabras se asomó dentro del despacho.
"Lauren, hay un potencial inversor, ha venido sin avisar, te está esperando en la sala de descanso de la planta baja" Dijo la rubia.
"¿Qué inversor?" Dijo Lauren arqueando las cejas.
"Tienes que bajar" Dijo Dinah "Es importante"
"Dinah, no me reúno con nadie sin cita previa" Dijo Lauren negando "Y menos si no me dices de quien se trata"
"Viene de parte de tu padre" Dijo Dinah intentando que Lauren se tragase su mentira.
"¿Cómo se llama?"
"Em... Carlos..." Dijo Dinah tratando de pensar en un nombre falso para Camila "Carlos... Vives" Dijo finalmente, aquel nombre le resultaba familiar.
"¿El padre de Lucy?" Dijo Lauren arqueando las cejas.
"No, no" Dijo Dinah negando y maldiciéndose a su misma internamente "Otro Carlos Vives"
Lauren miró a la secretaria con escepticismo "¿Otro Carlos Vives?"
"Lauren, ve a la sala de descanso de abajo, yo tengo que trabajar, te está esperando"
Dinah salió rápidamente por la puerta y Lauren suspiró, tenía mucho trabajo que hacer. Desde que Camila estaba de baja tenía una carga enorme en la empresa, especialmente con todos los días que había faltado ella misma para estar con su familia.
La mujer salió del despacho lista para seguir cuestionando a Dinah, pero se encontró su mesa vacía.
"Creo que ha ido al baño" Dijo Ally.
Lauren negó con la cabeza y se dirigió a los ascensores para bajar a la primera planta donde había una gran sala de descanso donde muchos trabajadores se reunían para tomar café y discutir asuntos de trabajo.
Cuando puso un pie en aquella sala miró a su alrededor esperando que aquel hombre la reconociese y se acercase a ella, pero cuando sus ojos se posaron en Camila sentada en su silla de ruedas a unos metros cubriendo algo en un papel, su expresión reflejó la sorpresa que sentía en aquel instante.
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Secretos [Camren]
Hayran KurguDos mujeres en un mundo de hombres luchan contra los estereotipos y los prejuicios para que su trabajo se haga valer, pero no saben que pasará cuando sus carreras se junten e inevitablemente sus vidas lo hagan también, especialmente cuando hay secre...