Comenzaba el mes de Halloween, Octubre. El mes más esperado para cualquier fan de las películas de horror, los disfraces o simplemente un motivo para beber y pasarla bien con las personas que los rodean. Así que esta vez la festividad sería llevada a cabo en casa de Melisa quién insistió todo el año, día tras día para organizar ella misma la fiesta.
—Eres una maldita zorra, Melisa. Todo el año jodiendo que ibas a encargarte de todo y ahora nos tenés como esclavos a estas dos pobres almas.
—Fran, cariño no te hagas si te fascina que te tengan como esclavo. Además, rompí con mi novio y estoy muy sensible, necesito contención.
—Reina, terminaste con Héctor hace tres años, así que deja el drama. De seguro estás así por algún chongo tuyo, esos que te encontras en la calle.
La decoración en el área de la cocina iba muy lenta por las discusiones de Melisa y Franco, por otro lado Marcos se encontraba en el pasillo que dirigía hacia el baño decorando con mucho entusiasmo, en verdad disfrutaba esa festividad. Ya había terminado de decorar cuando escuchó el ruido de un vaso romperse en el suelo, así que corrió hacia la cocina pensando que alguno de sus amigos se hizo daño.
—¡Qué sucedió! ¿Están bien?
—De verdad te queda la frase "Eres una zorra, Palmer". Viste lo que hizo tu amiga, Marcos. Se revolcó con el novio de una de sus amigas, en medio del campo, que asco, quién hace eso y después se la da de fina que no le gusta comer carne cruda, pero bien que a esa salchicha se la comió entera y sin cocinarla antes.
—Sos un hijo de puta Franco, por eso no te quería más en mi grupo de amistad. Solo te invito porque eres el amigo gay de Marcos, lo hice por lástima. Nadie te soporta y lo peor es que sí al menos fueras lindo y flaco pasaría por alto tu personalidad de mierda, pero ni con eso ayudas. Sos una puta barata y desechable.
—Te voy a matar, milipili de cloaca.
Marcos no podía creer que solo haya dejado media hora a solas a sus amigos y ya se estaban peleando. Melisa y Franco se daban empujones y tiroñaban de los pelos mientras que Marcos los veía de lejos, si fuera una persona ajena a ellos pensaría que era una pelea sería, pero la verdad es que esa era la relación que tenían ellos dos, luego de diez minutos de insultarse se pusieron a llorar y a disculparse por las tonterías que dijeron.
Esos dos individuos son el claro ejemplo de que al menos Marcos debería alejarse de esas relaciones tóxicas si de verdad quisiera tener una vida tranquila como desea. Pero conoce a sus amigos desde la infancia y el alejarse de ellos le parte el corazón, lo único que puede hacer es soportar y amarlos por quienes son.

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ᴇʟ ʙᴇɴᴇꜰɪᴄɪᴏ ᴅᴇ ʟᴀ ᴀᴍɪꜱᴛᴀᴅ
Short StoryLlega un punto en que la amistad se vuelve monótona, decidimos estar con las mismas personas solo por comodidad o costumbre, es lo que conocemos y no queremos soltar esa seguridad que nos da. Se siente el miedo en las entrañas cuando comenzamos una...