01

1K 28 2
                                    


Mirarte me duele horrores, ya no puedo ver colores
si te vas le pido al cielo que algún dia te perdone

💚

Cerré mis ojos, apoyé mis manos en su pecho y lo empuje con todas mis fuerzas

– Mírame, dale — grito agarrándome de la cara

Me negué empujándolo más pero era en vano, el tiene el triple de fuerza que yo.

– Mateo por favor

– ¿Por favor qué? — empujaba con más brusquedad

– Basta, me duele

Sentí que paro cuando de mi boca no salió un gemido sino un quejido.

– ¿Con él también lloraste? — salió de mi, me soltó la cara y sentí un portazo

Me acurruque en la cama, abrazándome a mi misma y llorando sintiendo dolor y ardor en mi parte baja.

No podía seguir acá, me tengo que ir

Me levanté de la cama, caminando con dificultad agarrando mi ropa que se encontraba por toda la habitación y cambiándome lo más rápido posible.

Entro a la habitación y lo vi tirarse sobre la cama con el celular en mano

– Andate o quédate... hace lo que quieras — me tense al escuchar su voz.

Salí de la habitación, agarre mis cosas y sali de esa casa

No lograba colocar la llave para abrir la puerta del auto, eso me generaba más desesperación, más terror.

Llegué a mi casa y me encerré en mi habitación. Note el amanecer asomarse por mi ventana, no habia podido pegar un ojo en toda la noche, sentía que si me dormía el podía volver, esas imagenes y esas palabras, su voz en mi cabeza me estaban atormentando.

No tenía apetito, sentia un enorme vacio dentro de mí

Ignore las llamadas de mi amiga, se que a ella no le iba a poder mentir, y no quiero que nadie se entere de nada.

Me meti bajo la ducha y al cerrar los ojos esas imágenes volvían, sus manos apretando partes de mi cuerpo, sus labios sobre los mios

Empecé a refregar mi cuerpo con brusquedad, me daba asco, me sentía sucia

Sentía odió y dolor, mucho dolor

El dolor era tan fuerte que lloraba con desesperación, se me entrecortaba el aire.

No sé cuantas horas pase bajo el agua, refregando mi cuerpo, maldiciendo por dentro, odiandome a mi misma por todo lo que había pasado

Me mire al espejo y me odiaba más

Estaba marcada, tenía moretones en mis piernas, brazos, abdomen, pechos y brazos. El que más me preocupaba era el de mi pómulo derecho que aún seguia hinchado

Escuché voces acercarse, rápidamente me cubrí con la bata

Un golpe en la puerta hizo que sobresalte

Estaba por salir cuando escuché esa voz, tenía miedo, me sentía desprotegida. Pero mi hermano hablo

– Sis necesito usar el baño ¿Te falta mucho? — no quería salir. – ¿Estás bien? ¿Querés que pase?

Tome valor y abrí la puerta.

– Hola Milo, ya terminé — trate de hablar normal, disimular el temblor de mi voz

– ¿Qué te pasó ahí? — alzo mi cara y me miro el pómulo

Mire a Mateo, quien bajo la vista.

– No es nada, ayer estaba buscando algo arriba del armario y se me cayo encima

– Tene más cuidado princesa... y cambiate — dijo mirando a Mateo

Sonreí y comencé a caminar a mi habitación con rapidez.

Quisiera entender porqué actuó así conmigo. De encargo de hacerme entender que no íbamos a tener una relación, que solo era para sacarnos las ganas, pero cuando yo intento conocer a alguien más, así como el lo hace con otras, se enoja y actúa de esa forma

Y me aterra el hecho de recordarlo así, fue la primera vez que lo vi asi, al menos conmigo, siempre me trato diferente, con mucha delicadeza, paciencia, con cariño

Lo único que se es que fue la primera y última vez. No quiero que esto vuelva a pasarme, rompió algo dentro de mí, me siento insegura, no quiero que nadie me toque, me abracé.

Sentí la puerta abrirse y cerrarse rápidamente

Me di vuelta y retrocedí un paso

– No... no tenes nada que hacer acá — dije con mi voz temblorosa

– Vine... yo... sabes que

– ¿Yo se qué? — mi cuerpo comenzó a temblar cuando lo vi acercarse – No, no te acerques

– Perdoname — bajo su mirada al piso

Tenía que ser fuerte. Demostrarle que no le tengo miedo, por más que por dentro este muriendo de terror.

– Si me vas a decir algo hacelo mirándome a los ojos

En ese momento alzo su cabeza, estaba llorando. Algo dentro de mi se movilizó, pero por otro lado me convenci de que estaba actuando, que no tenia que creerle mi una sola palabra o acción que venga de su parte.

– Yo no queria lastimarte. Sabes que te amo, y el... el hecho de imaginarte con otro me ciega

Intento acercarse una vez más pero retrocedí con miedo, no medi mis pasos y termine chocandome contra mi escritorio. Me miro frunciendo su frente

– ¿Querés ver que me hiciste? — sin darle tiempo a responder deje caer mi bata, dejando a la vista cada marca que dejó en mi – ¿Esta es tu forma de demostrarme cuánto me amas? Mirame dale, mírame como vos me lo pedías anoche

Mis lágrimas comenzaron a caer, un nudo se formo en mi garganta y presionaba mis puños con bronca y dolor.

– Yo... perdón

– Me destrozaste Mateo... y mataste todo el amor que sentía por vos — se quedo en silenció. Mirando cada parte de mi cuerpo – ¿Sabes que siento por vos? Lástima. Cada vez que te veo recuerdo y siento miedo, asco — escupí mirándolo directamente a la cara

Levanté la bata y me tape, esperando alguna respuesta, pero no hubo ninguna.

– No quiero que me hables. Si te saludo es por respeto y para que mi hermano no sospeche de nada

– ¿Cómo querés que haga eso?

– Vos provocaste esto. Ahora bancatela y agradece que no cuento nada

– Mirá hasta donde llegaste Mateo. No entiendo porque siempre dañas a quienes estan con vos, a quienes te aman y quieren lo mejor para vos... no te reconozco

– Basta, no digas más... quédate tranquila que no te voy a molestar — paso sus manos por su cara – Perdón, ojala algun dia me puedas perdonar

Salió de mi habitación. Cuando la puerta se cerro por completo cai al piso y comencé a llorar

Me sentía sola, frágil, rota

Quería morir.

💔💔💔

One shot - Trueno ✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora