Capitulo 10.Visita Al Medico

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- ¿Que escribes, Ari? - le pregunto Paul mientras absorbia por el pitillo el jugo que Ariana le acababa de preparar.

- Mmm... - exclamo. - No, nada... ¿Quieres un poco mas de jugo?

Paul fruncio el ceño y se levanto del extremo del sillon para pararse atras de ariana y hechar un vistazo a lo que tecleaba. Parecia como si estuviera escribiendo una historia.

- ¿Que es? - le pregunto con interes. Ariana cerro la pantalla de la laptop y lo miro bien.

- Tonterias - dijo sin darle mucha importancia.

- ¿Te gusta escribir? No sabia que te gustara... - dijo sintiendose culpable.

- No es nada importante, cariño... - dijo con la voz suave. Paul se froto los ojos y le devolvio una sonrisa.

- ¿De que estabas escribiendo?

- Minimas historias. *****.

- ¿De?

- Amor - dijo con un poco de timidez.

- ¿Podria ayudarte en algo? - le mostro todos los dientes en una sonrisa.

- Claro, puedes venir aqui y darme un beso - dijo en medio de una carcajada mientras miraba como Paul se acercaba a ella y besaba sus labios con ternura.

- ¿Escribirias un libro que llevara mi nombre si te llegas a hacer famosa? - le pregunto divertido mientras dejaba un camino de besos en su rostro.

- Depende, ¿serias capaz de darme una buena historia para escribir? - le dijo y lo vio directo a los ojos. Paul lo penso unos segundos, si ella lo conociera de verdad, si supiera quien era el. Tendria una buena historia para escribir.

- Quizas - dijo y le pico un ojo.

- A veces me gustaria saber que piensas, eres algo misterioso - dijo sincera. Paul fruncio el ceño y se carcajeo.

- ¿Tu crees, mi niña?
***

Hoy tenia el dia libre pero tenia cita con el doctor, pero que *beep*. Estaba pensando pasar todo el dia durmiendo.
Pearce, el doctor que estaba tratando su caso lo habia llamado con un ataque de histeria.

- Pensaba que eras un tipo serio pearce, aqui estoy histerico - dijo soltando un largo suspiro. Roman, era uno de los mejores medicos , era su medico de confianza. Sabia que esto de su enfermedad era un secreto y el era leal con su buen colega paul. Roman levanto la vista hacia Paul, estaba extresado, Paul lo conocia. Lo que se venia no era bueno. - ¿Que pasa Roman, paso algo malo?

- No estas respondiendo al tratamiento, Paul - dijo con la voz un apagada.Paul se sento en la silla que estaba justo frente a el y se froto la frente.

- ¿Que? Pero... Pero si yo... - no podia nisiquiera especular una palabra mas. Ambos se quedaron en silencio, mirandose entre si. Paul se recosto en el escritorio con los puños cerrados y ganas de llorar.

- Paul... Hermano - Roman puso la mano en su hombro como modo de apoyo. - ¿Que tan mal te has sentido?

- Bueno... - Paul levanto la cabeza y penso unos segundos. Habia sentido nauceas y dolor en el cuerpo, pero nada grave. Mareos y desgana. Al parecer no eran sintomas normales. Paul trago saliva con dificultad y se paso la mano por los ojos, quitando el exceso de lagrimas. - Dolor general, nauceas y mareos.


Roman junto los labios en una fina linea mientras asentia y dejaba a un lado los papeles que estaba chequeando.

- Podemos empezar el tratamiento cuando tu quieras.

- ¿Estoy muy grave? - le pregunto tomando un poco de aire.

- No, pero puedes empeorar, Paul. A medida que pasen los dias, comenzara con mareos y dolor, luego pasaran las infecciones de todo tipo, quizas presentes hemorragias o desmayos. Habra un momento en el que necesitaremos hospitalizarte y ya sabes lo siguiente.

- Quiero pensar esto, Roman - le dijo asintiendo para si mismo. - Necesito tiempo para pensar que es lo que quiero de la vida. -Murmuro- que me queda

- ¿Acaso no lo sabes? - dijo con un tono preocupado. - ¿Que acaso lo que quieres no es vivir lo mas que puedas?

- Tenemos diferentes definiciones de 'vivir lo mas que pueda' - dijo soltando un suspiro y levantandose del asiento. - Gracias Roman - le extendio la mano, extrechando la del doctor.

- Esperare tu desicion Paul, piensalo muy bien - le dijo antes de ver a su pasciente salir de su consultorio.
***

Paul aparco su auto frente al edificio, se bajo y paso las manos por sus ojos que estaban rojos y llorosos. Tenia que arreglarse con ella o la consiencia lo iba a matar.
Simplemente era imposible molestarse con una de ellas.

- Paul... - susurro abriendo la puerta de su apartamento. Paul la miro con cara de pocos amigos. Victoria se quedo petrificada.

- ¿Me dejaras entrar o nos quedaremos aqui afuera a esperar a que Dios decida por ti? - dijo divertido. Victoria sonrio de medio lado y se hizo a un lado para que terminara de entrar.

- Solo te voy a advertir que no me interesa lo que vengas a decirme Paul, te pasaste con todo lo que me-- no pudo seguir hablando por que Paul la tomo de la cintura y la pego a su cuerpo, plantandole un beso feroz y salvaje. Victoria se separo con dificultad de su agarre y lo miro con rabia. - ¿Que crees? ¿Que por que me estoy muriendo por ti vas a venir y hacer lo que quieras conmigo? ¿Acaso sabes que .___ y Danielle escucharon todo?
Paul se separo un poco de ella para pensarlo mejor.

- ¿Que?
- Si. .__ escucho todo. ¿Que te esta pasando con esa mujer? ¿Te gusta, o que?

- ¿Vas a empezar Victoria? - dijo sentandose en la silla de su comedor, Paul paso la vista por todos los libros y papeles que tenia encima. - Que bella, me encanta que estes juiciosa, estudiando como debe ser.

- ¿Por que me cambias el tema? - Paul suspiro y no pudo evitar reirse.

- Basta nena, tu sabes que no puedo estar molesto contigo - dijo jugando con las hojas de un libro. Victoria tomo el libro y lo puso en la mesa.

- Deja de jugar con los libros que bien caros que cuestan y bien dificil que se me hace comprarlos. Soy clase media no rica.

- ¿Acaso necesitas dinero? ¿Por que no me lo has pedido antes? - Paul se levanto para buscar dinero en su billetera. Victoria nego con la cabeza.

- No necesito tu dinero.

- No te pongas caprichosa - le dijo mientras sacaba unos billetes y se los daba. Victoria renego.

- No, Paul... Me cuesta pero terminar mi carrera es lo que mas deseo y hacerlo por mi misma es lo que quiero - Paul sintio pena por ella, por ella y por el mismo.

¿Por que sentia la necesidad de hacer feliz a cada una de ellas? ¿Por que? ¿Que era lo que sentia por ellas que no lo dejaban elegir entre cada una?

¿Acaso estaba enamorado de todas? Imposible.

Paul coloco el dinero en el libro de Victoria y lo cerro. Escucho a Victoria quejarse a su lado, pero en cambio, el se acerco a ella y beso dulcemente la comisura de sus labios para luego salir de alli y pensar en la conversacion que habia tenido hoy con su medico.

Le quedaban pocos dias de vida y aun no sabia que era lo que mas deseaba hacer.
No tenia hijos.Y no sabia a cual mujer o a cuantas amar

Las Mujeres De Paúl Walker. [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora