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sumario ..
DESDE EL MOMENTO EN QUE UN MESTIZO llega al mundo se ve condenado a esconderse, ese hecho fue lo primero que Cassia Vero aprendió tras estrellarse contra su nueva realidad. Con una personalidad nerviosa y el pobre instinto de supervivencia que aún le quedaba se dio cuenta que su única protección y fuente de esperanza era el campamento custodiado por la barrera del gran pino en la colina; a pesar de sentirse como animal en un corral, siendo preparada para el matadero, era lo mejor que tenía y lo máximo a lo que podía aspirar siendo una don nadie sin familia e irreconocida. Para muchos, seguir con vida es más que suficiente, es un regalo y un lujo del que podemos gozar manteniéndose dentro de los límites mágicos, muy pocos tienen el valor para arriesgar su vida por los demás, salir al mundo y luchar; no muchos sobreviven a lo que hay afuera.
Cassia ha estado estancada en la cabaña de Hermes desde que piso la colina mestiza a los seis años de edad, creyendo ilusamente que un nuevo comienzo la ayudaría a enfrentar el temor que la paralizaba. Genuinamente no era buena en nada. No tenía la destreza en el arco, ni la miníma fuerza para empuñar correctamente una espada.. ¡Mucho menos habilidades, cualidades físicas o cualquier tipo de poder semejante al resto de semidioses! Tal vez hija de un dios menor, pero lo suficientemente irrelevante para no mostrar señal alguna de poder divino.
