"Tu novia es el equivalente a una contusión cerebral"
"Honestamente, ella va a tomar eso como un cumplido"
En el que las cosas se complican cuando Jessica Stanley reta a Frankie Roman a besar a Emmett Cullen
[pre-twilight - breaking dawn]
...
MI PUTO PROPÓSITO ES LARGARME DE AQUÍ E IR A STANFORD.
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OCTUBRE
Frankie Roman era una chica que estaba enfadada últimamente. Todo el mundo lo sabía. Mientras que Bella desapareció en una cáscara de sí misma después de que la familia Cullen se mudó, Frankie se convirtió en alguien diferente — alguien más duro y más reservado. Y ese cambio se tradujo en todos los aspectos de su vida.
En el garaje, donde cada vez trabajaba más horas, Paul apenas podía sacarle una sonrisa. No sabía que estaba enfadada porque le ocultaba vampiros. Y Frankie era demasiado testaruda para sacar el tema.
Todos los demás que lo sabían estaban en el mismo barco— Raylan, Billy, Sam, Jared, la maldita Bella.
Dios, Frankie no había mirado a Bella ni una sola vez desde aquella noche. Una vez que supo que la chica no iba a morir de hipotermia, se permitió enfadarse. Bella le había mentido igual que los Cullen. Puso la vida de Frankie —la de su padre— en peligro al no decirle lo que eran en realidad. Así que, si Bella quería consumirse en la nada en su dormitorio por un tipo que la dejó sola en el bosque para que muriera, entonces la dejaría.
Frankie odiaba a casi todo el mundo excepto a sus amigos del colegio, pero sobre todo, se odiaba a sí misma. Porque en mitad de la noche, en sus sueños, donde no podía controlar sus pensamientos, lo único que deseaba era a Emmett. Aún veía sus ojos dorados y su piel firme y pálida cuando cerraba los ojos. Soñaba con sus labios y su tacto, saboreando el sonido de su risa profunda que solía hacerla sonreír con tanta facilidad.
Pero nada de eso era real. Emmett, el Emmett que ella conocía, al menos, no era real. Ella nunca lo conoció del todo.
La ira también estaba presente en la banda. Los solos de Tyler eran mucho más ruidosos a medida que su sonido se orientaba más hacia el rock, y todas las canciones que Frankie escribía estaban llenas de odio hacia Emmett y la traición que ella sentía por parte de toda su familia.
Porque no fue sólo Emmett quien le mintió. Fueron Rosalie, Esme, Jasper y Edward. La tomaron por tonta y seguían siéndolo desde cualquier lugar del mundo en el que estuvieran.
La mayor diferencia en Frankie estaba en el campo de fútbol. Ya era agresiva, pero sin Emmett en su vida, se lanzó de lleno al deporte. Era lo único que la alejaría de Forks y de los recuerdos de Emmett que la atormentaban cada día. Tenían que ganar el estatal, tenía que conseguir una beca completa para Stanford, tenía que abandonar este lugar.
Si era una de las pocas veces que Frankie no estaba enfadada, giraba la cabeza y veía a Sam y se enfadaba de nuevo. Él no la dejaba en paz, siempre llamándola, apareciendo en los partidos, ofreciéndose a llevarla al trabajo y ella lo rechazaba. No dejaba de observarla como si estuviera esperando algo, y eso la enfurecía.
