"Tu novia es el equivalente a una contusión cerebral"
"Honestamente, ella va a tomar eso como un cumplido"
En el que las cosas se complican cuando Jessica Stanley reta a Frankie Roman a besar a Emmett Cullen
[pre-twilight - breaking dawn]
...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"No puedo creer que lo hicieras. No puedo creer que lo hicieras", repetía Jessica mientras caminaban de la clase de inglés a la de historia, en la que casualmente estaba Emmett Cullen.
"¿Qué quieres decir? Me retaste a hacerlo", le recordó Frankie mientras reía.
"Sí, pero no creí que estuvieras tan loca como para hacerlo", dijo ella.
Sacudió la cabeza con tristeza mirando a su amiga. "Es como si no me conocieras", murmuró juguetona.
"Bueno, ¿cómo fue? No dijiste nada en la comida. Prácticamente me estaba muriendo, Frank, muriendo".
"Estuvo muy bien", fue todo lo que dijo Frankie, sonriendo mientras entraban en la sala, dirigiéndose a sus asientos en la parte de atrás. "Creo que ahora las entiendo perfectamente".
"Bueno, por fin", dijo ella, riendo. Había sido agotador estar cerca de la única persona en la escuela que no pensaba que la familia Cullen era todo eso. "Además, te conozco, por eso sé que nada va a salir de esto, por desgracia. Tu mundo va a seguir girando alrededor de un balón de fútbol".
"Y la banda en la que también estás", dijo, sentándose en su escritorio.
"¿Pero tener novio te mataría?".
"Podría", dijo dramáticamente, haciendo que Jess pusiera los ojos en blanco. "Mira, sabes que no tengo tiempo para bajar el ritmo. Tendría que seguirme a todas partes como un cachorro para pasar tiempo de calidad conmigo. Sabes que no puedo entrar a Stanford contigo con mis notas. Tengo que conseguir una beca de fútbol que lo pague".
"Lo sé, lo sé. No se puede estropear el plan", concedió finalmente Jessica. Iban a asistir juntas a Stanford y continuar con la banda todo el tiempo que pudieran. Ambas pensaron que Tyler sería el primero en abandonarlas, pero no importaba. Aceptaría una beca de fútbol en cualquier universidad del país con tal de salir del puto Forks. "Al menos dejarás este lugar como la leyenda que pescó a un Cullen, aunque sólo fuera por unos breves momentos".
Frankie miró a Jessica, que estaba girada en el escritorio frente a ella y apoyada en el respaldo con una expresión soñadora en el rostro. "No es un pez, Jess".
Jenson Taylor era el compañero que estaba en el pupitre a la derecha de Frankie. A ella le sorprendió que se sentara atrás porque era una especie de mascota del profesor y un nerd. Pero ella no se quejaba, porque si se veía lo suficientemente patética durante los exámenes, él le susurraba las respuestas.
Sin embargo, diez segundos después de haberse acomodado en su pupitre, alguien se cernía sobre su escuálido cuerpo.
"Muévete", le dijo Emmett Cullen, llamando la atención de Frankie y Jessica.
"Pero este es mi asiento", dijo Jenson, empezando a temblar un poco sólo por lo enorme que era Emmett.
Si Jenson pensaba que Emmett iba a intimidarlo, se equivocaba. "Por favor, amigo. Mi asiento está delante. Te ves como el chico que se sienta frente la clase", dijo, sonando un poco desesperado por cambiar de asiento a mitad de semestre.
