𝗧𝗵𝗲 𝗚𝗿𝗲𝘆 𝗖𝗶𝘁𝘆 | 𝗝𝗶-𝗮

𝟬𝟬𝟲

Los dos lobos corrían por la calle oscura persiguiendo el olor de sangre. Corrían a gran velocidad, con sus ojos rojos.

⸺Este olor... ¿Hay un vampiro cerca? ⸺preguntó Najak⸺. ¿Será Ji-a?

⸺No, Ji-a tiene un olor diferente ⸺dijo Giri⸺. No te alejes de mí ⸺ordenó.

(...)

Los dos lobos siguieron corriendo hasta llegar al bosque, deteniéndose frente a la carretera y ambos mirando la montaña.

⸺El olor se dispersa aquí.

⸺¿Un vampiro ha pasado por la ciudad? ⸺preguntó Giri y miró a Najak⸺. Con Ji-a tenemos suficiente ya, ahora tenemos que estar alertas de dos vampiros.

Najak se convirtió en su forma humana y se sacudió su ropa.

⸺Espero sea solo eso y estuviera de paso.

⸺Pero no podemos relajarnos ⸺habló Giri, mirando el bosque⸺. Tendremos que mantener alta la guardia durante un tiempo. No permitiré que otro vampiro ponga un pie en esta ciudad.

Najak arrugó su nariz, recordando con furia todo lo que los vampiros le hicieron a él y a su pueblo cuando apenas tenía 9 años.

Sentía rencor hacia los vampiros, por las que quisiera olvidarse de lo sucedido no podía. Recordaba aquella mujer de colmillos afilados, que lo miraba con una sonrisa mientras que de su boca salía sangre.

(...)

Los cinco adolescentes caminaban de nuevo por la misma ruta de siempre, charlando de un tema relacionado con Khan.

⸺¡Eso es lo que dijo Khan ayer! ⸺habló Tahel.

⸺Ya veo ⸺dijo Enzy, sin ganas.

A lo lejos, Tahel divisó a Khan y escondió a todos menos a Najak detrás del muro.

⸺¡Es él!

⸺Él acabó así porque se negó a juntarse con ellos ⸺supuso Ji-a.

—¿¡Pero como pueden ser tan inmaduros!? —exclamó Tahel, furioso—. Lo supe desde el día que nos expulsaron de la azotea.

—Sí. Debí plantearles cara allí mismo —habló Enzy, mirando a Khan.

—¡Y deberías haber apuntado mejor con tu puño! —se quejó Junwo.

—¿Por qué nos estamos escondiendo? —ignoró Enzy.

—Porque Khan nos dijo que no nos acerquemos a él —explicó Tahel, después miró a Ji-a la cual estaba aún escondida mientras miraba a Khan.

—¿Y? —dijeron Junwo y Enzy.

—Yo no quiero hacer eso...— Tahel miró a Najak, el cual estaba en medio de la calle, mirando al de mechas—. ¿Tú que opinas, Najak?

Najak no lo escuchó, seguía mirando a Khan como si intentara descubrir algo. Tahel volvió a llamarlo, pero este solo se quedó mirando al de mechas sorprendido. El olor que Khan desprendía era parecido al suyo, al de sus hermanos y al de Junwo y Hyori.

—¡Te he pedido tu opinión! —gritó Tahel, enojado. Haciendo sobresaltar a Khan.

—¿Qué pasa? ¿Sobre qué quieres mi opinión? ¿Eh?

—¡Sobre Khan!

—¿Tú también crees que deberíamos ignorarlo? —preguntó Ji-a, algo desanimada.