Eres la única a la que veo

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A veces me he puesto a pensar que Jae min podría darle todo lo que quisiera a Minjeong, una vida feliz y tranquila, sin preocupación alguna, el hombre perfecto, hombre que cualquier chica quisiera tener como novio o futuro esposo no?, sin embargo, me pregunto cotidianamente . . . yo que podría dar?, soy una chica simple, común y con un ser apagado, no me considero alguien extrovertida ni mucho menos chistosa, más bien encajo como un "ratón de biblioteca" porque termino siempre sumergida en los libros de la universidad para luego darme cuenta que el día ya había acabado de terminar y que lo único que podría entregarle a alguien, es mi preciado corazón, no en el sentido denotativo de la palabra, porque quien quisiera el órgano vital de un ser humano, nadie quien estuviera cuerdo desearía algo así como regalo, yo solo podría darle mi amor, porque para mí no es un simple juego que se da, el amor de por si es algo grande para una única persona con la que pasaras el resto de tus días y esa persona a quien entregaría mi pequeño ser seria Kim Minjeong, quien se encontraba en este momento estudiando para los parciales con ayuda mía, agradecía a mis padres por haberme dado el habito de la lectura y a mí misma por la inquietadle curiosidad que tenía por siempre aprender más tampoco no me sorprendía saber que era una de las mejores de la clase y que de vez en cuando me encargaran como tutora de algún chico o chica de créditos bajos. Por mí no habría problema pero lo que más me gustaba de todo esto era cuando Minjeong pedía mi ayuda, me llamaba con esa tierna voz que la caracterizaba que la ayudara con los parciales, ella era buena estudiante, no sé porque me pedía ayuda pero yo siempre estaba dispuesta y con una dulce sonrisa en el rostro ante su llegada, además, este lugar, este polvoriento pero histórico lugar era uno de los cuales solo éramos las dos, las dos y nadie más que nos interrumpiera . . .

Y si se preguntan por lo que paso aquella vez en la playa el tema se terminó dejando atrás, había muchos temas que siempre quedaban inconclusos, pero a mí no me importaban en lo más mínimo, era irrelevante en este momento porque la belleza de mi amada era lo único en lo que podía pensar y admirar

Rina, tanto te gusto?

Pero que tontearías estas diciendo de nuevo Min...

Me había olvidado decir que desde ese día Minjeong comenzó a hablar de forma "bromista" sobre ese asunto . . . no sé a qué quiere llegar con esto, pero no me desagradaba del todo, se seria como lo recordaba de mis sueños, un coqueteo inocente pero exótico al mismo tiempo

Oh vamos, te has quedado mirándome por un buen rato, que quieres que piense

Sentencio con un adorable puchero para luego comenzar a acercarse a mi tímido rostro y decirme en el oído en un sublime susurro

Tu también eres la única a la que veo

Tal vez tenía que estar agradecida por aquel día en la playa, agradecer a mis tontas expresiones corporales que originaron lo sucedido, realmente no todo estaba peor que nunca

Kim Minjeong, veo que estas muy bromista, lamento informarte que yo he venido a estudiar y como veo, parece que tu no, así que, si me disculpas, me retiro

Pero que palabras tan exquisitas había utilizado para alejarme de la impetuosa Kim, no podría soportar más aquella supuesta seducción y el perfume que emanaba su cuerpo sobre mí, había terminado de embriagar todos mis sentidos y pudiendo llevarme a cometer una locura inaudita, cosa que no estaba en mis planes aún...
Y justo en el momento de escapar de esa lujuria impregnable, sentí como Minjeong mi jalaba consigo y como si fuera a caer rendida ante ella, me regalo aquella sonrisa que tanto deseaba ver

¿Lo siento...podemos ir por un helado?

Si, creo que he descubierto una nueva faceta mía, el sadismo . . . amaba ver a Minjeong apenada y con un dolor de arrepentimiento, ver esos cachetes rojos y ojos llorosos y apenado era una sensación que podría volverse una adicción y claramente comenzaba a gustarme más de lo normal

Está bien, pero tu pagaras el mío, ese es tu castigo

Tampoco piensen que soy una aprovechada, claro que no, mi familia no me habría dejado ser de esa forma y claro esta que yo tampoco me hubiera dejado ser así, solo que, en este momento, el dinero no quería ser amigo mío en este día, pero había ciertos días que ambos convivíamos en armonía

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Ambas nos encontrábamos acostadas en el parque admirando las blancas y esponjosas nubes que luego tornaban colores diferentes al ver como el atardecer se pronunciaba, yo en este momento agradecía que el director haya implemento una sala de cine en la universidad, debido a que a estas horas los chicos de la facultad se encontraban ahí y nosotras en una cálido y tranquilo ambiente, sin ruido alguno que invadiera el hermoso lugar . . .

Y mucho más hermoso era ver a Minjeong, con ese rostro angelical que tanto la caracterizaba, esa dulce mirada y sus mejillas al carmesí de la vida, pero al ver sus facciones detenidamente, note que se encontraba vagando en sus recuerdos. . .

Minjeong, en que estás pensando?

Le pregunte, mientras veía esa típica expresión de "me da vergüenza decírtelo", era tierno y gracioso, porque, aunque estuviera apenada siempre terminaba contándome para luego apoyar su cabeza sobre mi hombro, pero esta vez fue muy diferente a lo habitual . . .

En nosotras

If I were a boy- WinrinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora