Auradon

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— Bienvenidos a Auradon.

- Yo soy el Hada Madrina. La directora

- Le hada Madrina? La del "Bibidi babidi bu"?

- Así es, Bibidi babidi!-* hablo la señora con alegría

Caos ladeo la cabeza con curiosidad y miro a la princesa guiñandole un ojo. Jay se acomodo al ver la mirada de reproche de Caos y empezó a asistir a las palabras de Mal.

- Siempre me pregunté cómo se habrá sentido Cenicienta, cuando usted apareció de la nada, con la varita cemtellante y la calida sonrisa. Y esa varita brillante.

La varita, así que eso es lo que tramaba Maléfica, parece que su hija si que trataba de esforzarse en tener la aceptación de su madre.

- Eso fue hace mucho tiempo. Cómo siempre digo:"¡No se sentren en el pasado o perderán el futuro!"

Los villanos esbozarom una sonrisa falsa aunque a Caos le salió como una mueca. El chico de traje azul se acercó.

- Es un placer conocerlos a todos. Soy Ben.

-Principe Benjamín. Y futuro Rey.-*interrumpió la castaña sonriente

- Ya me conquistaste con "princupe"-*se acercó Evie*- Mi madre es una reina. Eso me convierte una princesa.

-La Reina Malvada no tiene estatus real aquí.-*interrumpió con falsa amabilidad*- Y tu tampoco.

- Está es Audrey.-* trato de aliviar el momento Ben

- Princesa Audrey. Su novia. No, Benyboo?

- Caos. Caos Lefay. Oh, perdón, princesa Caos Lefay. No hay excusa, mi madre era la heredera al trono, y fue reina.

La chica de rosa reflejo miedo e inclusive el hada madrina, Morgana Lefay era una bruja poderosa, la única sacerdotisa de la vieja religión, sus poderes eran mayores que los de ella. Y su hija, sea quien fuera su padre, debió imaginar que era alguien importante, por lo tanto poderosa.

- Ben y Audrey les mostrarán el lugar, y nos veremos mañana.

Mal le sonrio, tanto que el gato de Alicia en el país de las maravillas estaría celoso.

- ¡Las puertas de la sabiduría están siempre abiertas! -*exclamó separamos las manos de la pareja, los villanso por instinto retrocedieron, Caos separó sus pies, Jay noto que apretó el puño en caso de un ataque*- Pero al librería solo abre de 8:00 a 11. Y como habrán oído, me gusta que respeten los horarios.

El hada Madrina se fue y con ellos los que anteriormente tocaban la banda. Ben avanzó un paso y los miro, sobre todo a Caos, la chica mantenía un semblante serio.

- Es muy, muy bueno, porfin...-*Se acercó a Caos primero y ella retrocedio, Jay e Evie se acercaron, Caos en cambio, cambio sus ojos a azules por un rato*- Conocerlos.-*termino hinoptizado unos segundos

- La costumbre, perdón.-*le sornio inocente la chica

Ben fue con Carlos y al tratar de extender su mano Jay le golpeó el hombro, muy fuerte. El le sornio adolorido y Jay le divirtió. Le estrecho la mano a Mal y rápidamente cambio a Carlos.

- Está es una ocasión especial. Una que espero quedé en la historia... ¿Eso es chocolate? Cómo el día que comenzamos a unirnos.

- O el día que les mostraste a los cinco donde quedaba entrada.-* interrumpió Caos y el reino la chica se agarró del brazo celosa

- Fui demasiado formal?-*pregunto a aquella chica alta, casi de su tamaño

- fue un poco más que demasiado.

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