Capítulo único

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Podemos apreciar a cierta pelinegra con falta de afecto masculino acostada boca arriba sobre su cama y a su lado la Demonio que vive en la mitad de su cerebro, ellas son Asa Mitaka y Yoru alias la Demonio de la guerra.

-Yoru...- Dijo la pelinegra tratando de llamar la atención de la chica de la cicatriz.

-Qué ocurre niña...- Respondió sin más mientras miraba fijamente el techo.

-Tú... ¿Tú en verdad odias a Chainsaw Man?- Pregunto mientras dirigía su vista hacia su compañera.

-...- La chica de la cicatriz no dijo ni una sola palabra al respecto.

-¿Yoru?- Pregunto Asa al notar el silencio de su contraria.

-Yo...- La chica de la guerra balbucea un poco antes de poder decir algo entendible-, Por supuesto que odio a Chainsaw Man... Después de todo, por su culpa la gente ya no le teme a la guerra... Me arranco un trozo en una pelea... Yo... En verdad lo odio mucho...

Asa no se terminaba de creer aquellas palabras, esta misma tarde cuando fueron atacadas por un Demonio, Yoru tomo el control del cuerpo para pelear pero justo llegó Chainsaw Man rescatandolas y al mismo tiempo pelear con el demonio.

-Si ese es el caso...- Asa se aclara un poco la voz mientras miraba fijamente el techo al igual que Yoru-, ¿Que ocurrió exactamente hoy...? Cuando Chainsaw Man nos salvó, no actuabas cómo si lo odiaras... Yoru, pude sentir lo mismo que tú sentiste en ese momento...

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Flashback.

Asa estaba caminando a casa tras haber concluido el día de clases, se notaba lo agotada que estaba, esperaba que su maldita suerte no le ponga algún obstáculo en el caminó, lastima que eso fue justo lo que pasó.

Ante ella apareció un demonio de aspecto monstruoso que se encontraba devorando el cadáver de una persona.

Yoru rápidamente toma el control del cuerpo estando lista para pelear contra aquel Demonio.

Justo cuando iba a transformar su vestimenta en arma o lo que sea que tenga a su alcance, logra escuchar el sonido de una motosierra, pero no cualquier motosierra.

-¡Muere!- Grita un eufórico Chainsaw Man.

El híbrido se lanza hacia el Demonio el cual responde rápidamente agarrando un vehículo y lanzándoselo para tenerlo, evidentemente esto no sería suficiente para tener al híbrido quien a pesar de recibir de lleno el el vehículo y la explosión del mismo quedando estampado contra una pared, se impulsa con la pared saltando directamente hacia el demonio quien no tuvo tiempo de reaccionar y uno de sus brazos fue fácilmente rebanado.

-¡Agh!- Gruñe de dolor el Demonio al sentir su carne siendo desgarrada en segundos.

El Demonio sabía que no podía ser rival contra la fuerza y velocidad de su enemigo así que opta por una medida desesperada, un rehén, aprovechando la distracción de Yoru quien se había distraído mirando la pelea, el demonio la atrapa con un gigantesca mano que aún tenía intacta.

Lágrimas de un Demonio.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora