Fantasía (Iida Tenya x OC)(TERMINADA)

Capítulo 19

El sol entró por la ventana iluminando la cara de Alicia por completo. No estaba acostumbrada a despertar tarde ni a recibir tanta luz de golpe, ya que su casa -como muchas de su aldea- se encontraba cubierta por los árboles del bosque. Se incorporó con un bostezo sonoro y se aseó con el agua limpia que una doncella había dejado para ella mientras aún dormía. Se cambió su elegante vestido por algo más sencillo y ordenó su morral de cuero, lista para volver a casa. Con parte del dinero que Lord Octavian le había dado, pensaba en comprarse un caballo y así viajar con mayor rapidez, además, le serviría de compañía en su día a día. Incluso había estado pensando en nombres adecuados, aunque todos los que se le ocurrían tenían que ver con plantas.

Camino a la oficina de Lord Octavian, un par de sirvientes le ofrecieron desayuno, pero se negó con delicadeza. Quería tiempo para despedirse adecuadamente, sobre todo de Iida, aunque confiaba en que se verían próximamente. Sin embargo, segundos antes de golpear la puerta de fino roble de la oficina del nuevo Lord, sintió un cosquilleo en el estómago que no presagiaba nada bueno. Tragó saliva y golpeó suave, pero lo suficientemente fuerte para que la oyeran. En cuanto escuchó el "pase" de Lord Octavian, entró con premura y esperó a que este hablara primero.

Lord Octavian se veía tenso. Tenía la mandíbula apretada y se giraba los anillos de su mano izquierda con torpeza. Las cortinas, ahora verdes, le daban a la habitación un aire de tranquilidad y esperanza que no coincidía con el aura de su ocupante quien miró a Alicia con una mueca de descontento antes de entregarle un bonito sobre azul.

- Muy temprano en la mañana llegaron al castillo un grupo de forasteros. Venían desde el Imperio del Sol Naciente- explicó- Todos jóvenes, como de tu edad. Los dirigía un jovencito de cabello rizado y juraría que con reflejos verdes...se llamaba Izuku o algo por el estilo. Me cuesta aquel idioma- rio con nerviosismo.

- ¿Han venido en paz? – preguntó Alicia, sin abrir la carta aún. Su malestar en el estómago, que nada tenía que ver con la comida o bebida, seguía presente.

- Sí, pero las noticias que trajeron no eran buenas- Lord Octavian se revolvió el pelo con una mano y estiró un mapa del continente sobre el escritorio. Estaba lleno de dibujos y rayas de colores que Alicia no supo descifrar correctamente- Algo oscuro nos amenaza.

...

Aún no salía el sol e Iida Tenya ya estaba listo y dispuesto junto al resto de caballeros, en fila y uniformados, a los costados de Lord Octavian que había aceptado recibir en el salón principal a un grupo de viajeros que había rogado a los guardias una conferencia con él. Cualquier otro los habría ignorado, sin embargo, aquellos muchachos provenían en su totalidad del Imperio del Sol Naciente e incluían a Shoto Todoroki, quien portaba en sus ropas símbolos de la realeza nipona que parecían verídicos y valiosos. Aunque él era quizás el de mejor situación, iba a la cabeza un humilde muchacho vestido no mejor que un campesino, pero con una reluciente espada plateada en el cinto y una mirada de determinación y seguridad envidiables en sus enormes ojos verdes. Las otras dos eran unas muchachas, ambas de buen ver, pero con evidente cercanía a la magia y la hechicería, que miraban todo y a todos con curiosidad y las cejas muy levantadas.

- Soy Izuku Midoriya- se había presentado el joven con una reverencia torpe pero bien intencionada- Venimos en busca de dos soldados que vienen de nuestra patria y la gente del pueblo nos dijo que vivían en este castillo.

- ¿Por qué buscas a dos de mis hombres? – preguntó Octavian, confundido.

Izuko respiró profundo antes de contestar.