capitulo 1

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Esta historia será vista desde la perspectiva de las chicas, pero será desde el capítulo 2, ¡gracias por leer!

Eleanor, Elizabeth y luna son amigas desde que tienen memoria, siempre juntas, por siempre y para siempre.

No importa si les gusta el mismo chico, si una era mejor que otra, si una era perfecta y la otra un desastre, siempre se apoyaban, siempre estaban juntas y eso nunca lo iban a cambiar, o al menos no por voluntad propia.

Era el ultimo día para estar juntas antes de que cada una tomara su propio camino y seguramente se olvide de todo y todos, cada una cree su propia historia, vayan a la universidad, tengan una familia o simplemente caigan en la muerte cercana, cada una. . . . con sus propias historias y anécdotas.

Elizabeth, miss perfección, hija de una familia adinerada, seguramente le pagarán una universidad lejos de esta asquerosa ciudad, una donde solamente pondrán más peso en sus hombros.

Luna, mi amante del arte, seguramente terminará muerta en alguna de estas calles descuidadas, su familia pobre y con exceso de bocas que alimentar, ¿solamente le esperará un mal destino...o no?

Eleanor, solo ella sabrá que quiere ser en verdad, no hay mucho que decir de ella, tal vez solo conocerá a un chico y terminará criando a 3 niños que la dejarán cansada y con deudas que pagar, o simplemente la vida lo decidirá.

Escuchando la música a todo volumen, chicos bebiendo, otros drogándose, otros simplemente perdidos.

Eleanor estaba sentada viendo a todos tratando de saber que piensan, parecía calcular cuanto tiempo pasaría antes de que alguien la vomitara encima o simplemente la invitaran a bailar.

Elizabeth por otro lado estaba agobiada por este nuevo cambio de escenario, nunca estuvo en un lugar así, ni con personas así.

Luna, ¡ay! Mi dulce luna, ella estaba siendo testigo del mundo cruel que la acompañaba, viendo a una chica ser insultada por su apariencia física y aunque quería ayudar o hacer algo, solo no lo hizo, tenia miedo.

Las tres chicas se reunieron en el punto medio de la fiesta agobiadas.

-quiero irme de este lugar- dijo Elizabeth mientras trataba de esquivar a un borracho que se había desplomado en el suelo.

no lo pensaron mucho y salieron de la fiesta tratando de no pisar algún vomito o ignorando chicos que no querían pasar solos esa noche.

La calle estaba desolada, las chicas caminaban sin saber que hacer o decir hasta que de la nada a lo lejos un auto llamo su atención, estaba en mitad de La calle, con los vidrios llenos de sangre, aunque no se veía a ninguna persona cerca eso Daba mala espina.

Elizabeth no lo dudo y llamo a la policía, hasta que un movimiento agresivo algo volcó el auto a lo lejos, y antes de poder reaccionar unos hombres llegaron por atrás y las golpearon hasta noquearlas.

No se sabe cuánto tiempo estuvieron dormidas o quienes eran esos hombres pero lo único que se es que se es que esto no acabara bien.

Después de un tiempo las chicas despertaron en una habitación poco agradable a la vista pues era antigua, fea, y muy sucia.

Atrás de la puerta se podía escuchar a dos personas discutiendo el destino de las chicas.

-ellas no estaban planeadas! - gritaba uno

-¡Las necesitamos para la subasta! - respondía el otro

-¡Nos tomamos por sorpresa! ¡No sabía que vendrían hoy! -

-¡No se haga el tonto! Ahora mismo subastaremos a esas niñas y punto final.

Se escucho un gruñido de enojo antes de escuchar como el chico accedía.

vida cambianteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora