Capítulo 2- "Bosque Da Hieri'

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"3 de diciembre del 2017"

Ya era del día de la misión, y como siempre, se me hizo tarde.
-¿Qué pasa? Así no se puede dormir-Dije sin aún abrir los ojos.

Me di cuenta de que el despertador estaba sonando.

-¡La misión!- Me levanté de golpe - ¡Me va a dejar el carro!

Me vestí lo más rápido que pude y salí corriendo hacia la puerta dejando caer mi gorra.

-¡No se vayan sin mí!- Me subí al carro que me llevaría al punto de partida.

Al llegar, el carro se estaba yendo, tuve que correr para alcanzarlo.

Estaba segura de que algún día me echarían por llegar tarde.

Milagrosamente, logré subir al carro; para mi suerte, el jefe no estaba en el carro; me hubiera dado una regañiza terrible.

El carro era bastante grande y en realidad había espacio suficiente para los cuatro.

Apenas me subí al carro, los vi: Stefano, Basil y Miriam estaban hablando. No me sorprendí por los dos chicos, pero, ¿Miriam hablando? Con el aspecto que tenía me parecía raro. Aunque tampoco era como que hubiera hecho el intento de hablar con ella.

Me planteé la idea de ir a hablarles, pero la deseché cuando recordé mi interacción de ayer. Mis habilidades sociales no eran muy buenas, o bueno, por lo menos, eso era lo que yo pensaba, capaz y estaba exagerando. De todas formas, me las podía arreglar por mí misma.

¡Sí! Ya sé, miraré por la ventana y anotaré los colores de los carros que pasan, ¡Qué buena idea!- Celebré en voz baja.

Que mala idea, es lo más aburrido que he escuchado en toda mi vida.

-Ya cállate- Musité.

Entonces me llamaron.

-¿Cómo estás, Sully?- Preguntó Basil.

-Mientras el jefe no se entere de que volví a llegar tarde, bien-respondí con miedo.

-No le diremos, tranquila- Dijo Basil entre risas- ¿Por qué no hablas un rato con nosotros?

Acepté, preferiría mil veces hablar con Miriam a quedarme mirando afuera y anotando los colores de los carros como una niña pequeña.

El camino fue largo, unas 3 horas de viaje aproximadamente, en ellas hablé bastante con los tres, era muy fácil hablar con ellos y eso que yo era una persona introvertida de esas "antisociales"

El carro paró, bajamos nuestras cosas del maletero del carro y empezamos a caminar hacia el sur. Iban a estar esperándonos en un punto clave, así, si nos perdíamos en medio de la investigación podían ir a rescatarnos.

-Uff, ya me dolían las piernas de tanto tiempo sentado- Exclamó Stefano mientras se estiraba.

-Creo que a todos nos duelen las piernas después de un viaje tan largo, después de todo la presión en las venas de las piernas aumenta por lo que se acumula líquido, el cual... - No terminé.

Todos se me habían quedado mirando, incrédulos de que hubiera dicho eso en ese momento.

No empieces ahora Sully.

Y ahí estaba yo, arruinándolo todo siempre con mis datos estúpidos.

-Vamos, sígueme el chiste- Dijo chocándole el hombro a Basil- ¿Qué le dice una piedra a otra piedra?- Dijo Stefano para intentar calmar el silencio incómodo que se había formado.

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⏰ Última actualización: Jun 28 ⏰

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