Adiós a un buen día

18 1 0
                                    

CAPÍTULO 20

-Debes presionar el embrague hacia el fondo y luego presionas el acelerador de a poco. Luego quitas el embrague despa.... -No funcionó. El auto no comenzó a andar por lo que tuve que volver a intentarlo una y otra vez.
-Es inútil -Digo mientras oculto mi cara en mis manos.
-Tu puedes hacerlo, nunca es fácil a la primera vez. Luego te darás cuenta que será como un patrón, vamos de nuevo.
-Me rindo John, no puedo.
-Te reto a algo.
-¿Qué? -Le digo mientras sigo con mi manos en la cara.
-Si lo intentas te compraré algo.
-No quiero nada.
-Vamos A, debes hacerlo.
-Esta bien, pero no prometo nada -Vuelvo a intentarlo y de a poco el auto comienza a avanzar.
-¡Muy bien A! -Dice John.

Llegó al otro extremo del camino y freno.

-Sabia que podías -Dice John-. Ahora debes manejar hasta nuestra casa.
-¿QUÉ?
-Tu querías aprender ¿no?
-Si pero...
-Tu puedes.

Intento a manejar hasta la casa muy lento pero seguro. Se me dificultó estacionar pero llegamos, por fin. Ya estaba atatdeciendo así que íbamos a realizar la última cosa de la lista solo por hoy. Sacamos un papel de la pequeña bolsa y dudamos en hacerlo.

-Creo que paso -Le digo a John.
-Podriamos hacer algo ligero.
-¿Cómo que? No voy a robar.
-No estaba pensando en eso. Pensaba en hacer una pequeña broma a una persona a alguien que se pasó de la raya.
-Nada de violencia.
-¿Por qué piensas así de mi?
-Eres un chico.
-Buen pinto. Solo quiero hacerle una broma a alguien que se desubicó en la playa.
-Esta bien pero ¿Sabes dónde vive?
-Se dónde está. Pero está vez manejo yo.

Cambiamos de lugar y comienza a conducir. Llegamos a un supermercado.

-Debemos conseguir espuma, mucha espuma.
-Tengo miedo.

Ingresamos al lugar y buscamos la espuma. Tomamos dos, no siete, no quince frascos de espuma. Pagamos y nos vamos.
No sabía a dónde nos estábamos dirigiendo pero estamos alejándonos del centro.

-¿Y qué hizo este chico?
-La pregunta es qué no hizo. Se fue de manos con Blair.
-¿Qué?
-Al parecer estaban saliendo al principio de las vacaciones de verano pero la engañó con otra chica. Tiempo después quería pelear conmigo porque pasaba mucho tiempo con ella pero yo no quería involucrarme en su acto de violencia. Dijo cosas desagradables sobre Blair y... sobre ti.
-¿Que? ¿Me conoce?
-Si estás con nosotros te conoce.
-¿Y qué dijo sobre mi?
-Prefiero no decirlo. Ahí es.

Estaba oscuro. Era una casa. El auto de este chico estaba estacionado a un par de casas después, sabíamos que estaba con una chica adentro de esa casa. Quitamos la espuma y fuimos hacia su auto.

-¿Ahora qué?
-Solo diviértete.

Colocamos espuma en todo su auto. Desde el techo hasta el picaporte. Estaba totalmente cubierto. Luego esperamos. y Seguimos esperando hasta que el chico salió de la casa y miró su auto.

-¿Qué diablos?
-¡Conduce! -Le digo a John.
-¡Me las van a pagar! -El chico corre hacia su auto pero no puede abrirlo. Sus manos se resbalan con la espuma y fue inútil. John manejó a toda velocidad hasta que lo perdimos.
-Fue estupendo -Le digo-. Gracias por defenderme.
-No hay de qué.
-¿Puedo saber qué te ha dicho?
-No quiero decirlo.
-¿Puedo hacerte una pregunta? -John asiente-. ¿Acaso te incómodo?
-¿Qué? ¿Por qué dices eso? -Dice John mientras me mira de reojo.
-A veces lo siento así. Desde el beso de la otra vez nunca volvimos a hablar del tema.
-Porque no quiero hacerlo A.
-¿Pero por qué? Solo dime que no te gusto y te dejaré en paz.
-Es complicado A.
-No es complicado.
-Me estoy muriendo A, y no quiero... -Sus ojos se llenan de lágrimas-. No quiero hacerte sufrir.
-Estoy sufriendo ahora sin saber que nos pasa. Y no digas que vas a morir.
-¡Pero es cierto A! -Dice quitando la vista del camino y mirando a mi-. No quiero hacerte sufrir.

Lo miro a sus ojos pero siento que una luz nos ilumina, era un auto.
-¡John! -grito. Él intenta girar el volante pero caemos sobre una montaña de arena y el auto da vueltas. Solo escucho el sonido de las sirenas.

mejor decir adiósWhere stories live. Discover now