capítulo O3

1.1K 89 4
                                    

-¿A quién tenemos aquí?

Jimin pregunta, su rostro
iluminado con una expresión sería y
dominante, su voz manteniéndose
ronca y segura de sí a la par que
entraba al lugar, cerrando la puerta
de acero antes de dirigirse en pasos
firmes, hacia el cuerpo amarrado
y acorralado en medio del amplio
lugar.

- Kim Jusso, señor.- informa el
beta dando una reverencia hacia el
alfa antes de volver a su posición
inicial, su mano siendo cubierta por
un guante de cuero con un cuchillo
en medio de sus dedos.

Los ojos del alfa recorren a la
persona amarrada y silenciada
por la cinta en su boca, la mirada
cabizbaja por estar frente a un alfa
de categoría alta, su olor a vinagre
con limón llamando su atención de
manera rápida captando quién era
tan solo con olerlo.

Su ex mano derecha, a quién
le confiaba todo, desde lo más
mínimo de su vida personal y todo
lo que necesitaba para seguir
haciendo crecer su imperio. Soltó
un suspiro agarrando los guantes
negros que se le fueron extendidos
para él.

-Háganlo hablar, necesito saber
que les soltó a los Kang.

Los betas asintieron, antes de
acorralar al cuerpo amarrado sobre
una silla.

-¡Jiminie!

Todos voltearon procesando la voz
aguda, un cuerpo solo un poco
más bajo adornado con un bonito
abrigo de color amarillo patito,
unos pantalones de color celeste
bebé y unas botas del mismo
color con los bordes en algodón.
Aunque aquello no fue lo que más
llamó la atención, sino que fue
la barriguita que sobresalía y era
acariciada por una pequeña manito
de un pequeño niño. Jimin
cubrió lo que sobresalía del cuerpo
del hombre atrás suyo, dejando
a su prometido con un pequeño
puchero en sus rosaditos labios.

- Jungkook…

Un pequeño suspiró sale por sus
labios, pareciendo más un pequeño
susto por la presencia de su omega
mirándolo fijamente.

-Jiminie... ¿Qué hacen?

Jimin rio nervioso, negando
levemente antes de sonreírle a su
pareja, rascando con suavidad su
nuca; nervioso.

-Nada, cariño. Solo hablamos
con un amigo…-Jimin
miró al pequeño niño frente a su
prometido, riendo tímidamente
al recordar cuantos niños había
traído su omega de "visita" desde
que se enteró de su espera con
su cachorro. - Cariño... Puedes
esperarme unos minutos a fuera,
dejaré a mi amigo jugando.
Prometo salir ahora ¿Sí? -pidió
dulcemente rogando con un
puchero.

El tono meloso se nota, haciendo
toser a los betas por lo dominado
que podía llegar a hacer su jefe por
su lazo que ahora tiene con aquel
omega.

-Ahora,Jiminie- amenazado por
una simple mirada de su pareja,
Jimin asintió feliz viendo
como Kook salía feliz con el niño
agarrando su mano.

- No lo dejen hasta que suelte
todo. Una vez hecho, no quiero que
quede rastro de él. Dam, quiero que
sufra cada palabra.

La voz firme fue escuchada en un
gruñido por los betas, observando
como su jefe les entregaba los
guantes antes de arreglar un poco
de su ropa y salir por la puerta tras
su omega.

Jimin solo cerró la puerta
dirigiéndose hacia donde su
pareja podría llevar al cachorro, la
habitación de juegos. Acercándose
escucha una pequeña melodía
con el tono suave y dulce en ella,
un escalofrío lo invade sintiendo
a su lobo removerse en alegría y
emoción.

Posa sus manos en la manija,
suspirando cuando le llegó por
la mordida un sentimiento de
tranquilidad y amorío puro.

Sí, él era un alfa que amaba
complacer y eso llevaba a que su
omega fuera feliz, dominado, quizá,
entonces lo es con orgullo, Jungkook se
convirtió en su todo desde que lo
conoció en aquella faceta tan suya.
« Con el cabello en ondulaciones y
castaño cayendo sobre su frente en
una maravillosa sincronía. Con
una sonrisa en sus labios; Con sus
feromonas en expansión nublando
mayormente sus sentidos, y claro,
con los ojos puestos en él, mientras
que con una mano sostenía una
arma hacia su víctima, que ya hacía
extendida sobre una cama.

𝗷𝗲𝗼𝗻'𝘀 𝗽𝗿𝗼𝗽𝗲𝗿𝘁𝘆 ᰔ jikookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora