Consuelo

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Capítulo 22

La noche avanzó, y a medida que compartíamos momentos, me di cuenta de que Travis estaba comenzando a relajarse. La risa genuina comenzó a reemplazar su sonrisa forzada, y sus ojos recuperaron un destello de alegría. Estaba claro que la compañía de amigos y el ambiente de apoyo estaban teniendo un efecto positivo en él.

A medida que avanzaba la noche, me encontré a solas con Travis en un rincón tranquilo de la casa. Sabía que este era el momento adecuado para hablar de sus sentimientos y ofrecerle consuelo. Le animé a compartir sus pensamientos y emociones, y lo hice con el conocimiento de que estaba allí para escucharlo sin juzgar.

Con voz pausada, Travis comenzó a hablar sobre su relación con Kayla y cómo se había desmoronado. Habló de sus dudas y de la lucha por comprender por qué las cosas habían llegado a ese punto. Me di cuenta de que, a pesar de su apariencia segura y exitosa, estaba lidiando con una tormenta emocional.

A medida que compartía sus preocupaciones y su dolor, le ofrecí palabras de apoyo y consuelo. Le recordé lo valioso que era, no solo como jugador de fútbol, sino como ser humano. Le aseguré que el tiempo sanaría sus heridas y que tenía un futuro brillante por delante.

Travis escuchó con atención, y su mirada reflejaba gratitud y alivio. Se dio cuenta de que no estaba solo en su lucha y que había amigos dispuestos a estar a su lado en los momentos difíciles.

La noche continuó con conversaciones significativas y risas compartidas. La música llenó el aire y las preocupaciones de la vida cotidiana quedaron atrás, al menos por un tiempo. Travis comenzó a ver que la vida tenía un camino por delante, lleno de oportunidades y posibilidades.

Al final de la noche, cuando los invitados comenzaron a despedirse, Travis y yo nos encontramos de nuevo. Esta vez, su sonrisa era más genuina, y sus ojos reflejaban una esperanza renovada. Me agradeció por la fiesta y por estar allí para él en un momento tan difícil.

La historia de Travis y yo continuaba, con sus altibajos, pero también con momentos de amistad profunda y apoyo. La fiesta de consuelo había sido un recordatorio de la importancia de la amistad y el apoyo en los momentos de dificultad. A medida que enfrentábamos el futuro, sabíamos que, juntos, podíamos superar cualquier obstáculo que la vida nos presentara. La noche había demostrado que, en medio de la oscuridad, siempre podíamos encontrar luz y consuelo en los lazos que habíamos construido.

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