⛓️CAPÍTULØ 42⛓️

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Sus labios ya estaban rojos e hinchados de besarse, sus manos temblaban y tocaban todo a su paso con nervios y deseo, ese deseo que volver a tenerse y unirse.
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Auron iba casi todos los días a Casa de Reborn, Horacio ya vivía casi casi con él, se le pasaban todo el día juntos junto con Auron, estaban recuperando los momentos en familia que habían perdido durante años.

Su relación había vuelto a ser lo que era, el cariño permaneció intacto y ahora eran una pareja muy feliz frente a su hijo.
Se daban cortos besos y se habían vuelto a hablar de forma cariñosa, junto a ellos Auron era tan feliz.

Al final del día siempre regresaba solo a la casa de Ismael, Horacio se había acostumbrado tanto a Reborn que no quería volver a vivir con el "hombre malo",
Para Auron era difícil dejar ir a su pequeño bebé, pero prefería eso a que escuchara las cosas que Ismael le hacía.

Meses despues, Ismael se fue de la ciudad dos días por un viaje de negocios, obviamente le había puesto a una persona que lo vigilara, a Reborn solo le bastaron unos cuantos miles de dólares para que los dejara en paz.

La primera noche tuvieron una cita y durmieron en la misma cama, pero ya habian pasado muchos años desde que lo hicieron, ambos estaban nerviosos y optaron por dormirse.

Al día siguiente Reborn estaba decidido a pasar tiempo con el amor de su vida.

Llevó a Horacio a casa de sus padres y lo dejó para que se quedara a dormir, así pasaría tiempo con Auron.

Después de cenar en el mejor restaurante y muchos ramos de rosas, llegaron a la casa, Auron estaba nervioso, él quería hacerlo desde hace mucho con Reborn, era el único al que verdaderamente deseaba.
Pero se sentía asqueado de él mismo, recordaba todo lo que Ismael le había hecho, no quería que Reborn sintiera asco.

Ambos entraron a la casa e inmerso en sus pensamientos no sintió cuando Reborn se puso detrás de él, dejó unos cuantos besos en su cuello mientra rodeaba con sus brazos su cintura.

―Reb..―Auron temblaba bajo su toque, habían pasado tantos años que ya lo extrañaba, lo extrañaba tanto.

―¿Qué ocurre, cariño?―Le Preguntó sin dejar de besar su cuello.

Auron volteó su cuerpo para quedar frente a él, se dió cuenta que no tenia que pensar en otro imbecil, Reborn estaba frente a él y era lo unico que importaba.

Se abalanzó a sus labios, un beso un tanto torpe por lo ansiosos que estaban, pero pronto sus labios quedaron en una perfecta unión, el sonido lascivo de los besos resonaron por toda la casa, con cuidado y sin ganas de separarse, Reborn llevó a Auron hasta la habitación, continuaron besándose y con delicadeza cayeron a la cama.

Debajo de Reborn, Auron se veía tan pequeño y tímido, quería comérselo a besos.

Los recuerdos de su adolescencia aparecieron en su mente, los días, las horas, los minutos a su lado, quería recuperar todo eso, su primera cita, su primer abrazo, su primer beso, su primera vez...todo, desearía regresar el tiempo atrás y vivir nuevamente esos momento con su fueran eternos.

Lentamente comenzó a desabrochar la camisa del más pequeño, cuando dejó al descubierto su pecho no le bastaron más de dos segundos para besar, tocar y lamer todo a su paso.

Auron estaba sonrojado a más no poder, el toque de Reborn hacia que todo su cuerpo quemara, tímido pero decidido comenzó a desabrochar la camisa de Reborn, se la quitó por completo y sus ojos deleitaron ese cuerpo que amaba tanto, vaya que había cambiado tanto, ahora estaba más fornido, no dudó en tocarlo también, ambos se deseaban tanto.

Toda la habitación se esfumó, solo existían ellos dos, su amor y las ganas que tenían de demostrarse cuanto se amaban.

Los gemidos y los suspiros, el choque de sus cuerpos, el sonido de los besos, todos los "Te amo". Todo eso fue música para sus oídos.

Ya habían pasado muchas horas desde que habían comenzado, ninguno de los dos quería parar, tenían la necesidad por el otro que las horas pasaron volando

A la mañana siguiente Auron abrió los ojos, estaba muy cansado, le dolía todo el cuerpo, sintió el agarre de Reborn en su cintura, sonrió con felicidad, estaba muy feliz, creía que ese solo era un paso para por fin estar juntos todos.

―Buenos días, Mi amor― Le dijo Reborn al oído, Auron sonrió muy feliz, se sentía como cuando eran adolescentes.

―Buenos días, guapo.

―¿Te duele mucho?―le Preguntó preocupado, sabía que se habían pasado la noche anterior.

―no te mentiré, me duele como el demonio.

―lo siento, cariño―se disculpó y lo abrazó.

―no te disculpes, yo era el que te pedía que no pararas―Auron se sonrojó, Reborn soltó una carcajada ante eso.

―¿Cuándo te volviste tan travieso eh?― Reborn lo besó en los labios.

―Auch―se quejó por el dolor.

―Es temprano, amor, sigue durmiendo, iré a comprárte algo para el dolor.

―No, duerme conmigo, me gusta cuando estamos así―Auron escondió su cara en el pecho de Reborn y lo abrazó.

―Bien, pero duerme un poco más― le dió un beso en la cabeza y ambos volvieron a dormir abrazados.

Un par de horas después, Auron despertó, estaba solo en la cama, no sintió cuando Reborn se levantó.

Se sentó con cuidado de no lastimarse y se estiró, agarró algo de ropa y se metió a la ducha.

Bajó las escaleras y sintió en delicios aroma de un rico desayuno, también escuchó las risitas de su pequeño hijo.

Lento pero feliz, llegó a la cocina y vió al pequeño Horacio desayunando mientras Reborn le servía un vasito con leche.

―Buenos días, papi―Dijo Horacio con una enorme sonrisa al ver a su papi llegar, levantó las manitas para que su papi se acercara y le diera un beso.

Auron feliz fue con su bebé y le dió muchos besitos y abrazos.

―Buenos días, Mi amor, ¿Cómo te la pasaste con Gus y tus abuelos?.

―Muy increíble, Abuelo nos contó historias de papá, papi ¿Sabías que la mamá de papá se llamaba Gus también?―Preguntó el niño muy emocionado.

Reborn se acercó a su lado, le dió un beso y luego le sonrió a su hijo.

―Así es, mi mamá se llama Gustabo, como Gus, es tu abuelita, como mami Julia, algún día te hablaré de Mami Gus.

―Sí, papá. El abuelo nos mostró muchas fotos y no paraba de repetir lo mucho que Gus y yo nos parecemos a ti.

―eso es porque los tres nos parecemos al Abuelo, pero tú tienes los lindos ojos de ti papi.―miró a Auron y sonrió, no había duda de que Horacio había sacado lo mejor de ambos.

La familia, desayunó en un ambiente tan lindo de risas y pláticas.

Sin duda Reborn los quería juntos pero ya.

Aunque eso no sería posible...Ismael se había enterado de que Auron se había quedado a dormir a la casa de Reborn.



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Uy, aparezco después de medio año, perdón jaja

Espero que les guste, esta semana vuelvo a actualizar y luego me desaparezco otro año jajaja bromi (no)

Díganme de cosas por abandonar a mis bebés.



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⛓️MI VECINØ⛓️~[ Rebornplay ]~ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora