LONDRES

3 0 0
                                    

Mi tia me despierta, vaya si que es grande esto. Solía venir cuando era pequeña a pasar los veranos aquí con mi tia, siempre tuvimos una relación muy estrecha a pesar de la distancia. Estuve aquí cinco veranos. Desde los 7 hasta los 12 años. Me acuerdo que hice amigos. No puedo recordar nombre ya que han pasado cinco años desde la ultima vez que los vi,  y en ese tiempo han pasado muchas cosas, pero mis amigos solían ser muy molestos, es más, no eran mis amigos, solo tenia dos amigas. Los otros eran enemigos. ¿Que serán de ellos? No se acordaran de mi, yo no me acuerdo de ellos.
Mi tia y yo bajamos del coche y recorremos la ciudad. Pasamos por un parque, y me recordó mucho a mi niñez, aquí solía venir a hacer tartas de barro con mis amigas, luego nuestros "enemigos" venían y lo destrozaban, uno de ellos, cuyo nombre no recuerdo, me hacia la vida imposible, era ruloso, con ojos verdes, adorable pero insoportable, sus dos amigos uno rubio y otro moreno nos hacían la infancia imposible a nosotras, nos insultabamos. Ahora me entra risa cuando me acuerdo, eramos ridículos.
Estamos paradas enfrente de lo que es la casa de mi tia. Reconocería esta puerta en cualquier parte. Una puerta blanca con 4 huellas de mano pintadas en diferentes colores. La huella de cada miembro de la familia. Luego un felpudo con un letrero "Bienvenido". Entramos a la casa, vaya si que ha cambiado. Antes habían juguetes por el suelo. Mis primos dejaban todo por el medio. Mi prima Eli, de un año menor que yo, tenia una obsesión con las barbies. Habían por todas partes. Mi otro primo Josh, dos años mayor que yo tenia camiones y muñecos escampados por todo el suelo.
Recuerdos de niños correteando inunda mi cabeza y me hace sentir nostalgia.
-Ha cambiado mucho esta casa desde la ultima vez-Digo
-Ya, desde que se fueron tus primos ha hacer sus vidas, esto esta bastante limpio y solitario, los hecho de menos.
-Me imagino
-Ven cariño te enseñaré la casa. Hemos hecho alguna que otra reformilla. - Dice cogiéndole de la mano.
El salón es mas amplio. Ya no esta la pared que separaba la sala de estar con el comedor, esta todo junto. Separado por una barra esta la cocina muy grande y lujosa. Me enseña la lavandería.
-Aquí esta para hacer la colada, aquí va la ropa sucia, la limpia se dobla i se deja aquí.
Me vuelve a coger de la mano, y subimos las escaleras, observó que en una de las escaleras hay una pequeña M dibujada en rotulador de color rojo. Me entra la risa, eso lo hice yo cuando tenia 11 años, mis primos me retaron a pintar mi inicial. 
-Cariño, esta será tu habitación.
Abro la puerta y no me lo puedo creer es muy grande y bonita, han tirado otra pared y han juntado las dos antiguas habitaciones de mis primos. Las paredes son blancas, la principal, tiene finas lineas moradas que van del techo al suelo. Al centro de ella hay una cama grandisima, con la colcha blanca y mantas y cogines de color morado. Hay un escritorio gigante que hace esquina blanco también con un ordenador portátil abierto, un bote morado con reglas y bolígrafos, y un archivador con hojas en blanco, en la esquina hay una lampara blanca. En una esquina, hay un sillón color crema con un cogin morado y una mesita al lado donde hay una jarra de agua, un vaso y un libro de lectura, al lado hay una gran estantería llena de inmensos libros. Sin duda este es mi sitio favorito, me encanta leer.
-Esto es maravilloso, ¡me encanta!
-Aun hay más cariño. - Dice en tono dulce.
Me señala una puerta. La abro y me encuentro un pequeño baño hermoso.
Tiene dos lavabos elevados una pequeña escalera donde están las toallas la bañera con un diseño antiguo. Todo decorado con pequeños detalles color morado. Hay maquillaje, cremas, planchas, jabones... ¡Hay de todo!
Salgo del baño y me fijo en que hay otra puerta. Entro y es un vestidor, u na pared entera son perchas, donde están todo tipo de abrigos, chaquetas, chalecos... Mas allá hay otra percha donde hay vestidos de todas las formas y colores. Luego una cómoda grandisima, encima de ella hay perfumes. Abro los cajones y me encuentro camisas, sudaderas, pantalones, faldas... Un perchero donde hay gorras, bufandas, fulares... Dos hay un pequeño rincón donde hay pequeños ganchos pegado en la pared donde hay pequeñas bandoleras. Una estantería donde hay grandes bolsos de distintos colores. A la pared de enfrente es toda de estanterías con zapatos, bajo del todo están las botas altas, mas arriba los botines, si subimos más están las manueletinas y sandalias, en la baldosa de encima deportivas y calzado cómodo y en la de arriba del todo tacones y tacones. En el centro del vestidosñr hay tres maniquíes dos, con conjuntos ya formados y en el del medio un vestido plateado corto y ajustado con lentejuelas, es precioso, con tacones blancos y una cartera de mano del mismo color que los zapatos. Me encanta, no puedo evitar tocarlo.
-Ese lo llevo tu madre en la graduacion - Me dice cautelosa mi tia, observándome con ternura.
-Es precioso. -Es lo único que puedo decir.
-Tu madre me dijo que quería que lo llevaras en la tuya.
-Seguro - No puedo evitar que me salgan algunas lágrimas - Bueni - Digo limpiándolas - Es preciosa la habitacion , gracias.
-De nada - Dice mi tia abrazándome.

ChangeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora