I DON'T THINK THIS IS RIGHT {[Mimobomba x Reader]}

#7

El reto no era pagar las pizzas, era encontrar un lugar donde no vieran su rostro tan identificativo por el maquillaje. Se levantó y revisó su reflejo en el cristal del coche más cercano. Pintura blanca corrida y desaliñada, las marcas del negro casi de habían desvanecido del todo.

"No puedo entrar a ningún lugar así..." pensó para si, limpiando un trozo en línea recta desde su mejilla hasta la comisura de la boca "seguro sabrán quien soy"

Se quedó viendo su propio reflejo, apoyando la mano en el frío cristal.

"Seguro sabrán quien soy" Claro que lo sabrían, era tan obvio, su rostro y el de ___ habían salido en portada de revistas, periódicos y noticias. Todos conocían quien era Mimobomba. Y eso le daba ventaja.

Miró en la dirección en la que ___ desapareció seguido de un reconocimiento de su alrededor. El aire se sentía húmedo y ahora, extrañamente pesado, como si todo el peso de la gravedad cayese sobre sus hombros. Como las manos de la loca que lo tenía para ella sola sobre si. Ese pensamiento provocó que mimo se llevase las manos a la unión del cuello y los hombros, como si realmente sintiera sus muertas manos acariciándolo.

"No intentes escapar porque te encontraré." Su voz sonaba igual de áspera en sus pensamientos "Ya lo hice 2 veces."

Miró la esquina por donde desapareció y no pudo evitar preguntarse si eso era cierto, si realmente ___ tendría tanta suerte como para encontrarle una tercera vez, tal vez ya custodiado por la policía.

Endureció la mandíbula marchando a paso lento. Si así era y ___ podía encontrarlo, presentía que no correría la misma suerte de permanecer vivo una vez más. Menos ahora. La imagen de aquella chica y su expresión dura forzada por el pensamiento le vino de la misma manera que empezó a sentir el frío en la punta de sus dedos, llevándose las manos a la boca para exhalar aire caliente mientras buscaba alguna pizzeria de dudosa calidad.

"Si te reconocen, corre" ¿Y luego que haría?¿Esconderse como un perro asustadizo entre las piernas de ___ esperando ser rescatado? Esa situación le parecía cómica, no era muy dificil imaginarla con esa sonrisa de estúpida dándole caricias más bien bruscas de nuca a espalda baja, con una expresión de pura complicidad.

Conforme avanzaba, manchó sus manos a base de sacarse la pintura del rostro hasta que solo quedaron pequeños vestigios de blanco o negro entorno sus ojos y mandíbula. Contra más avanzaba, más cerca veía la luces de los restaurantes locales y bazares que por lo general permanecían hasta altas horas de la noche abiertos. Mimobomba no podía evitar mirar hacia atrás con regularidad como queriendo asegurarse de que lo sentía en la nuca no era el aliento de ____ si no el viento anunciando que pronto volvería a tener un contacto humano que no fuera ella. Que extraño. Ahí afuera había un mundo aterrorizado por la presencia de la persona con la que él dormía bajo el mismo techo y aún que también la temía como quien teme a un oso al verlo de cerca, se dio cuenta que si permanecía lento y sumiso, no le atacarían.

El cerebro se acostumbra a vivir bajo constante miedo, normalizando la situación para hacerla menos traumática y agotadora, nadie puede estar bajo estrés constante las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Lo interiorizaba, como las víctimas de secuestro o la prostitutas; esta era su realidad y no podían hacer nada para cambiarla o cuando llegaba el momento de cambiarla, ya se habían adaptado.

Mimobomba se estaba adaptando, aún que ahora caminase entre 4 o 5 personas que pasaban por casualidad por la misma calle, los miraba como sorprendido de escucharlos hablar y respirar con normalidad, su mente intentaba analizar porqué él no debería estar igual de tranquilo si después de todo, solo estaba yendo a comprar pizza.

Sus pasos lo llevaron a un local que hacía sus propias pizzas. Se quedó por unos momentos analizando el cartel con curiosidad, como si fuera raro que brillara tanto, que no fuera más opaco como los colores del televisor que oía constantemente dando las noticias. Volvió a mirar atrás. Sin señales de ___. La ausencia de su presencia empezaba a resultarle incómodo, como si de una manera burda echara de menos sus palabras al aire y sus amenazas sutiles.