1 audio de pol fernandez
gorda avísame cuando estés llegando así bajo.
dale tranqui, tengo para 10 min más
ok dale
la cena ya está lista 😉
que buenooo
porque no sabes el hambre que me cargo
🤣🤣
suspiré y sonreí mirando el leve temblor de mis manos, sintiendo mi corazón latir como loco. hace 1 mes estamos saliendo, dándonos el espacio para conocernos bien. para mí, todo esto es nuevo. soy una simple mortal que tuvo la suerte de que le llegara un mensaje por instagram de un jugador de fútbol.
realmente no caía que me había escrito, no pensaba responderle, por insistencia de una amiga lo hice. le agradezco todos los días. el jugador de boca es lo más dulce y caballero que existe, jamás trató de sobrepasarse conmigo y como se separó hace no mucho, realmente vamos muy lento.
digo, no me molesta para nada pero, cada vez que le miro la boca no puedo evitar pensar en lo que se debe sentir besarnos.
ya casi llegando a puerto madero, le mandé un mensaje para que baje. en el momento que el chofer frenó frente al edificio, divisé a pol saliendo. le pagué, le agradecí y bajé sonriendo. cuando cruzamos miradas él también sonrió. nos acercamos y me abrazó, automáticamente escondí mi cara en su cuello.
- te extrañé -le dejé un beso en el cachete separándonos un poco.
- yo también te extrañé, hermosa. ¿por qué no me avisaste antes que estabas llegando?, iba a pagarle yo.
- no pasa nada, es que me re colgué.
- bueno ahora te doy lo que gastaste. vamos que se enfría la comida -empezamos a caminar hacia adentro, él con su brazo en mis hombros y el mío por su cintura.
- no sabes la comida que me mandé -me dijo abriendo la puerta.
- ¿que preparaste?.
- veni, sentate que traigo todo. gracias a vos estoy ampliando todavía más mi paladar. -lo decía porque soy vegetariana. me senté y admiré cómo había preparado la mesa, está en todos los detalles. - para la señorita, plato principal, puré de calabaza con papa, croquetas de brócoli y acompaña una salsa de rúcula -me reí porque vino en modo mozo a dejarme el plato.
- gracias, visualmente está increíble, me muero por probarlo.
- también preparé esta ensaladita -la dejó sobre la mesa y pude ver que tenía lechuga morada, rúcula, tomates cherry y queso en cubitos.
- te estás luciendo, fernández -se sentó apoyando su plato y me miró.
- quería sorprenderte, hace 1 semana no nos vemos -agarré su mano por encima de la mesa y la acaricié.
- gracias, de verdad. es muy especial esto que estás haciendo -nunca nadie me cocinó alguna vez, menos de amoldarse a lo que como. -tampoco tenes por qué dejar de comer carne cada vez que nos vemos. vos podes comer lo que quieras -levantó los hombros.
