Capítulo 10

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David casi se atragantó con lo que acababa de ver. Estaba tomando un sorbo de su copa de champán sin dejar de observar al ex cantante cuando de repente le vio besarse con un chico sin cortarse. Dejó la copa sobre la mesa del reservado y se pasó la mano por los labios resoplando.

—No te lo esperabas, ¿verdad?—preguntó Tom a su lado.

David negó con la cabeza.

—Mi hermano ha cambiado mucho, atrás quedó esa época en la que no hacía más que desmentir su homosexualidad. Ahora va con la cabeza bien alta sin importarle lo que la gente opine o deje de opinar—explicó Tom.

Se quedaron en silencio viendo como el ex cantante se colgada del brazo de su nueva conquista y se dirigía a la salida del local seguido de Paul.

— ¿Ya se va?—preguntó David, extrañado de que no se hubiera despedido ni nada.

—Si, al parecer le ha surgido algo—contestó Tom resoplando.

David se giró y se le quedó mirando. Él también había cambiado, en otra época estaba muy pendiente de su hermano y se preocupaba por él. Ahora le daba igual que se fuera con dos desconocidos con los que, conociendo como conocía su vida sexual, acabaría haciendo el amor ya fuera en el mismo suelo o sobre una cama blanda.

—No me mires así, David—murmuró Tom como si le hubiera leído el pensamiento—Bill ya es mayor para acostarse con quien quiera, nada de lo que yo le diga se lo va a impedir.

— ¿Te daría igual si se acostara conmigo?—preguntó David de repente.

— ¿Contigo? —repitió Tom alzando una ceja— ¿Y por qué iba a hacerlo? Has sido como nuestro padre, nos conoces desde que éramos muy pequeños y cuidabas de nosotros dos más que los demás...

Dejó de hablar al ver la cara que ponía David, como se mordía el labio y se sonrojaba.

—No puedo creérmelo, no de ti. De Bill me espero cualquier cosa—murmuró resoplando—Fue la otra noche, ¿verdad? Me dijo que se había encontrado contigo por casualidad y le invitaste a un café. Me imagino que una cosa llevó a otra y acabaste con mi hermano desnudo bajo tu cuerpo.

David se quedó sin saber que decir, esa frialdad que sintió en Bill parecía que también la tenía Tom, hablar así de las relaciones sexuales que mantenía su hermano con completos desconocidos, e incluso gente que como él casi le doblaba la edad...

—Como ya te he dicho—dijo Tom cogiendo su copa de champán que apenas había tocado—Me da exactamente igual con quien se acuesta mi hermano.

— ¿Si? Pues nadie lo diría—apuntó David—Cualquiera pensaría que estás celoso.

— ¿Celoso, yo? ¿A qué viene esa idiotez?—saltó Tom.

¡Pues claro que estaba celoso! Más bien muy enfadado, recordaba que esa noche se acostó con Bill sin saber que lo había hecho con el mismo David minutos antes. ¿Cómo le había podido hacer eso?

—No sé, es la impresión que me has dado—dijo David encogiéndose de hombros—Bueno, me voy ya a casa. Aquí no pinto nada y tengo trabajo mañana.

Se despidió del ex guitarrista con una inclinación de la cabeza y salió del local en el que se realizaba la fiesta. Tom le vio marchar y tras apurar su copa decidió hacer lo mismo. Odiaba estar solo en una fiesta, a pesar del grupito de chicas que s le había formado a su derecha, cuchicheando en voz no demasiado baja lo bueno que estaba y quién le pillara en la cama.

Suspiró y metiéndose las manos en los bolsillos de la cazadora de cuero que llevaba salió del local. Le tocó llamar a un taxi, el coche solo estaba a disposición de Bill, a pesar de que él era su productor.

Cuando menos te lo esperasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora