Un Sueño Más.

Capitulo 2.

Recorrido por la universidad.

Son las 7 de la mañana, me baño antes de desayunar unos panqueques de plátano con avena.

Hace frío así que llevaré mi saco negro, que combina con mi vestimenta. Salgo de mi departamento y me encuentro con 2 chicos y una chica .

-Buenos días -.Saludo antes de entrar al elevador, ellos asienten con la cabeza en forma de saludo y entran al elevador conmigo.

Llegando al lobby salen rápido del elevador por lo que imagino tienen prisa, pero no es hasta el momento que uno choca conmigo que me parece familiar, como el chico de mi pesadilla.

-Lo lamento princesa, espero que no te lastimara.

Dice para después seguir a los otros dos. Sus ojos azules son encantadores, muy hermosos que no los podría olvidar y por eso se que son los de mi sueño.

Cómo lo vi sin antes conocerlo no tengo ni idea. Pero quizás sea solo una considencia.

En fin, camino hacia la salida y optó por ir en taxi ya que aún no se muy bien donde está la escuela.

∞∞Minutos más tarde∞∞

Llegué a la facultad y estoy esperando al alumno que el director dijo me daría el recorrido, al parecer es de los mejores alumnos así que estoy ansiosa de conocerlo, al decir verdad me he sentido mucho mejor al mudarme aquí, aunque extraño a mis amigos.

-Señorita Scott, ¿verdad?-. Dice una voz ronca detrás mío, me giro y es el vecino, el de los ojos azules, no me lo creo.

-Así es joven...

Espero a que el termine por mi.

-Withman, disculpe mi descortesía, un placer conocerla señorita, hoy yo seré el afortunado caballero que la llevará en el laberinto de esta facultad.

Dice con un tono de seriedad pero con una hermosa sonrisa en los labios.

-Me alegro que usted joven Withman sea el caballero que haga el recorrido a mi lado.

Dije con un tono un poco burlón pero sin quitarle el tono serio por completo. Y así es como comenzamos el recorrido, aunque me estoy uniendo dos semanas más tarde que los demás, parece no haber problema con eso.

-Fue un gusto haberla acompañado, está es la aula de su primer clase, así que aquí me retiro.

Dijo y dio media vuelta para después marcharse, entre al salón y aún no había mucha gente, ya que está era la primera clases de la día pero empezaba a las 9, así que muchos no habían llegado porque aún faltaban media hora para las nueve.

Las mesas estaban pegadas así que todos compartíamos mesa por así decirlo.Me senté al lado de una chica de pelo rubio, tez clara, ojos cafés claros, y algo chaparra.

A los pocos minutos se sentó al lado mío un chico alto, castaño, y sorprendente risueño y con piel blanca, ¡pero parece que la única bronceada soy yo!.

-Hola, chica nueva, soy Matías y ella mi mejor amiga Elenor.

Se presentó el chico de mi lado y la chica sonrió de lado.

-Podrias quitarte para que mi amigo se siente ahí -. Dijo la chica y realmente fue una combinación de amabilidad y molestia -.Oye El no le hables así, déjala no le gusta socializar mucho, ahora eres una de nosotros, necesitamos más amigos, y como te llamas?.

-Soy Luna Scott, y no te preocupes no es que me encante socializar, realmente prefiero leer que convivir, soy pésima hablando con la gente, además no controlo las situaciones y estra el equivocarse.

Al terminar de decir eso, sentí que se me quitó un peso de encima, pero a los pocos segundos Matías y Elenor se carcagiaron de mi, y no entendí hasta que repase todo lo que acababa de decir.

-Me agradas y hiciste reír a El, algo que pocos logran hacer, siéntete afortunada, no te preocupes, somos los raros y excluidos de este lugar, también preferimos hacer otra cosa que leer, y por eso deberías comer con nosotros en el almuerzo.

Me sentí aliviada de sus palabras, así que accedí a su petición, hablamos un rato en intercambiamos nuestros números, cuando empezó la clase me sentí más aliviada de lo que estaba al pensar en mi primer día de clases.

En el receso si comimos juntos, y después volvimos a estudiar. Cuando salimos de la universidad fui a dar una vuelta por el centro comercial con Matías.

Pero de la nada oímos un pequeño grito y susurros con información peculiar, caímos en cuenta que los susurros venían del callejón, uno algo oscuro pero no lo suficiente como para inpedirnos ver a las personas.

Era Withman.

-Vampiro de mierda, se que mataste a mi hermana y todo porque ataco a una miserable humana .

-Si, la maté pero las reglas aquí son claras sin ataques a los humanos, tu hermana rompió la regla y nos puso en peligro a todos los vampiros.

Estos eran los susurros que se oían y después, Withman ataco a la chica y ella hizo lo mismo, y parece pudo sobrevivir y no se dieron cuenta de nuestra presencia.

Matías y yo no podíamos creer lo que presenciamos, decidimos investigarlos y pediríamos ayuda a Elenor.

-Matias, pero y ¿si no nos cree?

-Lo hará, siempre puedo contar con ella y ella conmigo, y dime Mati, me gusta más que mi nombre completo.

Asentí pero no estaba del todo convencida, ya que ¡¿quién creería semejante locura?!

-Les creo, que haremos al respecto.

Y eso fue una completa sorpresa, porque por más amigos que fueramos no lo creria y mis amigos me tomarían como loca, a excepción de Nico, él siempre creía en mi, el fue lo que masyme dolió de irme a los angeles. Es más ni mi madre me creyó que su hijastra me hacía bullying y una completa desconocida creyó en mi y en su amigo, eso es nuevo para mí.

Pero se siente bien, que confíen en ti .

Debo de admitir que me hace sentir bien el hacho que crean en mi. En fin, hicimos un plan de investigación que nombramos P.M. (plan maestro). Me pareció una tontería pero Mati se veía feliz al poder contribuir con el nombre, así que se quedó el nombre, solo falta iniciar con nuestra investigación.