60 segundos nace con un sueño y muere con un objetivo.
El sueño de que vuelva a reconstruir los papeles que rompí hace años atrás cuando dejé de escribir. El sueño de que las palabras surjan en mi cabeza otra vez, se paseen por mi cuerpo y acaben entre mis dedos, como el que acaricia su propia alma.
Hasta los segundos mueren, pero estos mueren con un objetivo: entrar por tus ojos con toda la confianza del mundo y chocar contra tu cerebro. Esa es mi meta, compartir lo que no me atrevo a decir en alto o aquello que por mucho que lo intente se pierde en el tiempo...y sí, digo el tiempo, porque los sesenta segundos que llevas leyendo no volverán, pero al menos he logrado entrar sin llamar en ti.
Ahora que he captado tu atención te invito a ponerte cómodo, encender tu mente y sobre todo, darle la vuelta al reloj, que no nos estropee el viaje.
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60 segundos
Short Story¿Qué puedes hacer en sesenta segundos? Yo puedo hacerte llorar, reír, sonreír, soñar, volar... o simplemente robarte un minuto... (pero solo si me dejas)
