3. una noche reveladora

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Kara seguía pensando en las extrañas sensaciones que ocupaban ahora sus sentidos,no podía comprender a qué se debía esta situación, lo único que pudo sacar de todo eso era que debía ver a Lena, estar frente a ella le ayudaría a aclarar un poco sus sentimientos.

Como enviada por Rao la solución llegó en modo de llamada

Holaaaaaa Kara... como estás?.

Llamo para avisarte que tendremos noche de juegos, Lena traerá el vino, por favor asegúrate de traer mucha comida chatarra, la luna de miel me ha vuelto voraz.

Alex habló sin dejar hablar a su hermana, prácticamente colgó la llamada, solo dio un hasta más tarde y cortó la comunicación en un intento de evadir la negativa

Sin embargo ella no contaba con que Kara agradeció esta excusa para poder ver a Lena sin mover ni un dedo, tardó horas probándose ropa, no se sentía tan nerviosa desde hacía mucho tiempo, ojalá pudiera decir que estaba así por que se encontraba emocionada de ver a Alex luego de su luna de miel, pero la realidad era que se encontraba inquieta por como se comportaría Lena al verla, acaso Lena se iba a comportar cortante pero con cortesía, o iba a revelar que la extrañaba tanto como ella la extrañaba?.

Kara terminó por ponerse el primer outfit que había escogido,sentía las piernas tan flojas como si tuviese zapatos de Kriptonita, al final sacó el valor para salir de su apartamento, por un momento pensó en llamar a Alex y excusarse alegando que tenía mucho trabajo pero... del ascensor salía alguien, alguien cuyo aroma le aturdía podía saber a quien le pertenecia sin temor a equivocarse.

L Lena, ho hola
Cómo es que... cómo... cómo estás?

Lena soltó una leve sonrisa al notar el nerviosismo de la chica de acero, gesto que encontró sumamente tierno y esperanzador.

Hola Kara, bien gracias, vengo a que por favor me ayudes debo llevar el vino para esta noche, mi madre se ha tomado las recervas de la cava de Lex, (esto fue parte excusa y parte verdad), Lena ansiaba ver a Kara, sentirla serca, necesitaba un abrazo, la necesitaba a ella.

Algo similar pasaba en la mente de Kara, por lo que se atrevió a abrazar a su amiga, trató de canalizar en ese abrazo todo lo que sentía en ese momento por ella, Lena recibió el abrazo de tan buena manera que lo profundizó casi que empujando a Kara contra la puerta del ascensor, la respiración de ambas comenzó a cambiar en ese abrazo se podía sentir la necesidad que cada una tenía de la otra.

Kara se encontró palpando con su mano la cara de Lena, y ella hacia gestos como un gato que se deja consentir de su amo.

El teléfono de Kara sonó haciendo que ambas se sobresaltaran

La inoportuna interrupción de Alex logró separar a las chicas, Alex le escribía a Kara que se diera prisa pues quería ver a su hermanita.

Para las dos este abrazo fue esclarecedor, sin decir una palabra ni escucharse confesión alguna, sabían que había nacido algo en sus corazones y que se necesitaban la una a la otra.

Ahora simplemente esperaban que se teminara la noche de juegos, noche en la que compartieron más de una mirada cómplice, Kara podía escuchar como el corazón de Lena latía como aleteo de colibrí cada vez que ella descubría a Kara mirándola en ocasiones tímida y tiernamente y en otras con cierta sensualidad que estaba haciendo que se le resecara la garganta.

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