Capitulo 11

1.5K 160 47
                                    

El peso del remordimiento.


Aún estaban unidos, Harry tenía la cabeza enterrada en el cuello de Louis y este emitía pequeños sonidos con la boca.

Harry sacó la lengua y comenzó a lamer la herida que ahora los unía de por vida.

La cabeza de Louis dolía un poco y su respiración seguía agitada. Se sentía exhausto.

Tomó el rostro de Harry y lo besó, sus movimientos eran al unísono, en perfecta armonía.

Aún querían más el uno del otro, su deseo iba más allá de lo físico. Esa noche sus almas se unieron y la necesidad de estar juntos era inevitable.

Harry dio pequeños besos en los labios de Louis. Sus aromas mezclados eran el paraíso mismo.

—Debemos ir a casa, amor —dijo Harry con voz ronca.

Louis gruñó en desacuerdo.

Y Harry comenzó a acariciarle el cabello suavemente.

Pasó exactamente una hora cuando Louis finalmente accedió a sentarse en el asiento del copiloto.

Harry condujo hasta su departamento y ayudó a bajar a Louis lentamente, asegurándose de taparlo adecuadamente.

Se ducharon juntos, la bañera era pequeña pero aún así lograron arreglárselas para entrar los dos, Louis nuevamente encima de Harry y este limpiando su cuerpo despacio.

Esa noche durmieron juntos, compartiendo la habitación de Harry. Louis estaba más sensible de lo normal y Harry lo entendía. Los omegas se comportaban así cuando estaban recién enlazados. Como su alfa, Harry estaba dispuesto a cumplir todos sus caprichos y estaba encantado de hacerlo.

Harry despertó primero pero no se movió, Louis usaba su brazo como almohada mientras lo abrazaba por la cintura.

La sonrisa en su rostro era inevitable.

Louis se movió entre sus brazos y abrió los ojos lentamente.

—Hola, Lou —saludó Harry y le dio un pequeño beso. —¿Estás bien?

Louis asintió sonriendo, pero su sonrisa desapareció cuando movió el brazo y sintió un fuerte ardor.

—No me digas que... —Louis se levantó de golpe y quedó sentado en la cama. —¡Mierda, nos enlazamos! —gritó asustado.

Esa parte de la noche su mente la había borrado, pero recordaba todo lo demás con claridad.

Sus ojos estaban muy abiertos y eso preocupó a Harry.

—¡Perdón, Lou! No pude contenerme.

—Bobo —Louis se calmó respirando profundo. —Ambos lo hicimos, no te disculpes. —Se llevó las manos a la cabeza. —¿Cómo se lo diré a Chris?

Harry lo miró preocupado. Ese chico había demostrado ser bueno, incluso se negó a su intento de provocarlo.

—Por ahora, no pienses en eso. Vamos a curar la herida, ¿de acuerdo?

MY JEALOUS ALPHA!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora