Capítulo 18

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Harry se despertó con un fuerte dolor de cabeza. Sus manos temblaban mal y se sentía extremadamente febril. Cuando trató de tragar, su garganta se apretó terriblemente y se sintió áspera y áspera. Supo de inmediato que estaba en el Ala del Hospital una vez más. Trató de sentarse, pero los golpes en su cabeza aumentaron y su estómago acechó como si estuviera a punto de estar enfermo. Harry volvió a caer sobre sus almohadas, solo concentrándose en respirar y calmando su estómago.

"Necesitas ir despacio." Llegó la voz de Daphne. "Tuviste una noche muy ocupada."

Harry sintió que le colocaban las gafas en la cara, y luego todo se aclaró. Daphne estaba sentado en una silla a su izquierda, luciendo muy cansado y preocupado. Harry extendió la mano, y Daphne rápidamente agarró su mano, apretándola con amor. Ella le dio una sonrisa aliviada, y él se sintió un poco mejor.

"Lo que pasó?" Preguntó Harry, su voz ronca como si se hubiera tragado vidrios rotos.

"No te acuerdas?" Preguntó Daphne, su cara desconcertada. Harry lentamente sacudió la cabeza, tratando de recordar cualquier cosa que pudiera decirle cómo terminó en el Ala del Hospital, en su cama habitual una vez más. Podía recordar decir buenas noches a Daphne, y volver a la torre de Gryffindor y acostarse. Recordó despertarse a la mañana siguiente y hablar con Ron. Se habían unido a Hermione en la Sala Común, y Harry había recordado darse cuenta de lo cansado que se veía Hermione. Sin lugar a dudas, ella había mentido despierta toda la noche tratando de pensar en una manera de salvarlo.

El trío había conocido a la nueva novia de Harry, Daphne, en el Salón de Entrada.

Harry y Daphne lo habían hecho oficial la noche anterior. Habían hablado mucho sobre su relación. Ya habían acordado dar a lo que estaba sucediendo entre ellos la oportunidad de florecer, pero ahora era oficial, tenía un título. Eran una pareja. Harry nunca se había sentido tan feliz y ansioso antes en su vida.

Daphne también había notado la falta de energía de Hermione, e incluso la había comentado. Hermione simplemente se lo quitó, diciendo que estaba bien. Entonces, la memoria de Harry se volvió borrosa. Parecía recordar que Snape les preguntó algo y todos estuvieron de acuerdo. Harry se esforzó por recordar, pero finalmente sacudió la cabeza, mirando con suerte a Daphne, que todavía lo estaba mirando con obvia preocupación.

"No recuerdo nada del desayuno pasado." Harry admitió.

"Atacaste a Snape." Ella dijo simplemente. "Nos atacaste a todos. Intentaste protegerlo."

Harry parecía consternado. "Yo...Te ataqué?"

"Nadie resultó herido, excepto tú, pero no por el ataque. Quizás sea mejor que lo explique." Daphne dijo, agitando las manos como si borrara una pizarra invisible. Ella sabía que lo estaba confundiendo a él, y a ella misma también.

"Sí, eso podría ser bueno." Harry asintió lentamente.

"Realmente te ves horrible. Estás seguro de que estás bien?" Daphne preguntó por tercera vez esa mañana. Hermione asintió y continuó cuidando su brindis.

Miró hacia arriba para ver a sus amigos mirándola fijamente.

"Chicos, de verdad, estoy bien. Acabo de tener una noche difícil." Ella dijo, tratando de persuadirlos para que abandonen el tema. La verdad era que ella simplemente no estaba lista para hablar sobre lo que la había mantenido despierta. Ella y Dumbledore habían hablado solo brevemente, con él tratando de desalentar su idea. Había vuelto a la cama abatida, pero se negó a renunciar a su idea. Ella estaba más decidida a encontrar una respuesta..

"Pasa los huevos." Preguntó Ron, ya golpeando una gran pila de panqueques.

"Realmente es sorprendente la cantidad de comida que puede meter en esa fauce, y todavía hablar de manera algo coherente." Daphne dijo, alejando su tazón de ella, enferma por los hábitos alimenticios de Ron.

Harry Potter y el contrato de compromiso -COMPLETO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora