𝐒𝐄𝐀 𝐌𝐎𝐍𝐒𝐓𝐄𝐑 ✦ 𝗈𝗇𝖾 𝗉𝗂𝖾𝖼𝖾; 𝗅𝗂𝗏𝖾 𝖺𝖼𝗍𝗂𝗈𝗇

𝟎𝟎𝟎. 𝒂 𝒏𝒂𝒊𝒗𝒆 𝒑𝒓𝒊𝒏𝒄𝒆 𝒘𝒉𝒊𝒕 𝒂𝒏 𝒊𝒎𝒑𝒐𝒔𝒔𝒊𝒃𝒍𝒆 𝒅𝒓𝒆𝒂𝒎

. . . . ╱╱ ︵ . . ⌗𝐒𝐄𝐀 𝐌𝐎𝐍𝐒𝐓𝐄𝐑❜
꒰꒰  ❛ ❏ 𝐩𝐫𝐨𝐥𝐨𝐠𝐮𝐞¡!~ ⌒⌒
⇘ : : A naive prince with an impossible dream . .

❝  El mundo exterior es oscuro, egoísta y cruel. Los humanos no dudarán en dañarte si te acercas a su mundo ❞

   𝓔N LAS PROFUNDIDADES DE LOS VASTOS OCÉANOS SE ALZABA ATLANTIS, un reino mítico y desconocido. Hogar ancestral de las sirenas y tritones, criaturas mitad humanas y mitad peces con una belleza inhumana, un control mágico sobre el mar y una voz hechizante. Sin embargo, esa fachada etérea escondía su verdadera naturaleza. Para los piratas y marineros, eran seres hermosos pero peligrosos. Aquellos que aseguraban haber tenido encuentros cercanos con ellos, los llamaban monstruos marinos

Y, de manera sorprendente, bajo las olas, la opinión era similar. Los relatos de las sirenas y los tritones más antiguos les contaban a los jóvenes sobre las horribles atrocidades del mundo terrestre. Los humanos, según decían, eran crueles, egoístas y aterradores. Monstruos terribles que no dudarían en matar a su especie a sangre fría. El miedo y el odio a los navegantes era tan profundo que la regla más sagrada en el reino submarino era simple: no salir a la superficie.

Azariel, el vástago más joven de los reyes de Atlantis, con sus ojos color amatista heredados de su madre y su sonrisa que parecía iluminar todo el océano, era conocido por su espíritu juguetón y su curiosidad insaciable. Pasaba las pocas horas libres que tenía explorando arrecifes de coral cercanos, jugueteando con peces tropicales y curioseando en embarcaciones hundidas. Cada objeto humano que encontraba despertaba su deseo de conocer más sobre la superficie.

Los cuentos que su madre, Thalassa, le contaba sobre el mundo exterior solo avivaban su curiosidad. Hablaban de vastas extensiones de tierra, cielos abiertos y la misteriosa humanidad. Sin embargo, sus palabras siempre llevaban una advertencia: "El mundo exterior es oscuro, egoísta y cruel. Los humanos no dudarán en dañarte si te acercas a su mundo".

Fue a los siete años cuando finalmente reunió el coraje suficiente para romper la ley más sagrada de su reino. Con la cabeza temblando, se asomó a la superficie del agua. Su asombro inicial se desvaneció cuando todo lo que pudo ver fue el vasto océano y el cielo azul, sin nada más a la vista. A punto de sumergirse de nuevo, su mirada capturó algo en el horizonte. Un barco pirata se alzaba majestuoso. Era muy diferente de los barcos hundidos que había explorado, grande e imponente, con colores brillantes que lo deslumbraron. Se acercó, siendo cauteloso para no ser visto. Sus dedos recorrieron la madera del casco, y se asomó tímidamente por el borde.

Fue testigo de una escena que lo dejó atónito. Los humanos a bordo, con sus risas y canciones, parecían estar en perfecta armonía con el mundo y la vida misma. Observó cómo se balanceaban al ritmo de la música, sin preocupaciones ni ataduras, solo la alegría de la libertad.

Los ojos de Azariel brillaron de asombro y emoción. Este era el mundo terrenal que había soñado, un lugar de aventura, risas y libertad. En ese momento, sintió que su corazón y su alma se alineaban con el canto de los piratas. Su pecho se hinchó con el deseo de una vida similar. Ya no quería ser un príncipe con responsabilidades y horas de estudio bajo la tutela de su estricta institutriz. Quería navegar por los vastos océanos y vivir miles de aventuras junto a una tripulación pirata.

Pero rápidamente entendió que su sueño era imposible. Su vida estaba bajo el mar, no en la superficie. Las cadenas de la realeza lo arrastraban a las profundidades, y más importante aún, en lugar de dos piernas, tenía una larga y brillante cola escamosa.

La decepción no aplacó su deseo. Escapaba durante horas para espiar barcos y, cuando sentía el valor suficiente, nadaba hasta la isla más cercana, donde encontraba un pequeño y alegre pueblo. Así pasaron los años, hasta que Azariel dejó de ser un niño para convertirse en un joven de diecinueve años, casi un adulto según su padre. Con la llegada de la edad adulta, sus deberes como miembro de la familia real aumentaron, y sus horas de exploración disminuyeron hasta casi desaparecer. Sin embargo, su sueño seguía intacto.

(Re-publicado)

El capitulo, como específico al principio, es para introducir brevemente el sueño de Azariel y su deseo por la superficie.

No podría decir cuando publicaré el primer capítulo, dado que estoy hasta el cuello de pruebas y trabajos, pero intentaré que sea pronto.

En fin.

Sin nada más que agregar.

Comenta, vota y sígueme. Claro, si quieres.

Lamento si hay fallas ortográficas, gramaticales y/o puntuales.