Renunciar -HIATUS-

Capítulo 6

¡A/N: Hola a todos! Mi esposa extremadamente talentosa y solidaria decidió hacer otra ilustración, esta vez de una escena del Capítulo 6. Se puede encontrar en la discordia HAPHNE en el canal #fanart. ¡Como siempre, gracias a aquellos que revisan, prefieren, siguen y PM! ¡Nos vemos la próxima semana!

Descargo de responsabilidad: No tengo nada. ¡Solo feliz de estar aquí!

Capítulo 6

El 14 de noviembre de 1992, brilló en la pantalla. Milagrosamente, Harry no había sido atrapado cuando Dobby lo atrapó en las cámaras de Daphne. El único cambio desde esa noche, hace casi una semana, ahora eran las sonrisas secretas que Harry y Daphne compartían en clases, pasillos o la gran sala evocaban un ligero rubor para ambos. Justo ayer, Harry y Daphne se pasaban en un pasillo y lograron cepillarse las manos. Incluso su recuerdo envió agradables hormigueos por la columna vertebral de Harry.

Con la escuela en un constante estado de miedo con el ataque a Creevey, Harry atacó su régimen de entrenamiento y estudios personales con renovado vigor. Había empezado a moverse con la capucha de su capa aún más frecuentemente, prefiriendo el consuelo de la invisibilidad. Su dedicación a la mejora no había pasado desapercibida para Flitwick, quien la comentó durante su última sesión.

Mientras Harry estaba haciendo todo lo posible para permanecer oculto en las sombras, otro estaba haciendo exactamente lo contrario: Draco Malfoy. Había estado pontificando toda la semana sobre cómo el Heredero de Slytherin finalmente iba a limpiar la suciedad de las escuelas. Harry había escuchado la palabra 'sangre de barro' más veces de las que le importaba, y ese temperamento que la señora Rosmerta le dijo que heredó de su madre estaba llegando a un punto de ebullición.

Desafortunadamente, alcanzó su punto máximo más temprano en la tarde. De camino a la cena, Harry se topó con Draco y sus compinches, que estaban más que satisfechos con la petrificación de Colin Creevey. Por lo general, Harry ignoraría esto. Draco, sin embargo, vio a Harry y decidió explicar cómo incluso el llamado salvador del mundo mágico también era un sangre de barro. Luego había hecho un insulto particularmente cruel a la madre ahora fallecida de Harry, y Harry había hechizado a Draco la próxima semana.

Antes de que estallara una pelea total, el profesor Snape entró como un murciélago. El grasiento git ignoró los intentos de explicación de Harry y le pidió a Draco, una fuente confiable, que proporcionara su cuenta. Harry notó a Daphne parado cerca y sacudió la cabeza con un suspiro. Sabía lo que venía. Daphne, para su crédito, se movió para defender a Harry cuando Snape lo rodeó, pero se detuvo cuando Harry la miró con los suyos.

Snape emitió alegremente la detención a Harry, quien fue salvado por un tercero poco probable: el profesor Lockhart. Snape, pensando que este era el peor tipo de castigo que uno podría infligir, felizmente transfirió la responsabilidad, y Lockhart aplaudió alegremente a Harry en el hombro mientras le decía que se reuniera más tarde esta noche en su oficina.

Harry se estremeció bajo el toque del profesor y miró hacia ver a Daphne mordiéndose el labio inferior. Una repentina necesidad de abrazarla o sostener su mano casi lo abrumaba; pero en cambio, apretó los dientes, le cuadró los hombros y marchó hacia el gran salón. Se las arregló para escabullirle una sonrisa pequeña, dolorosa, que se mostraba más como una mueca, antes de irse.

"Harry, Harry, Harry. ¿Puedes imaginar una mejor manera de servir a la detención que ayudándome a responder el correo de mi fan?" Lockhart le gritó, mientras los dos se sentaban en su oficina con pilas sobre pilas de letras y sobres a su alrededor.

"Responde a cada uno de estos, señor?" Harry preguntó con desconcierto.

"De hecho, Harry", Lockhart envió esa sonrisa inquietante una vez más hacia Harry.