Junjou no Sekai Apocalipsis

Parte 7: Concentración

Capitulo 7#Concentración

Instantes después abrió los ojos, una luz los cegaba a ambos, con dificultad podía distinguir la silueta de cuatro Hombres, esperaba no estar en problemas; así mismo otro grupo de hombres salieron del lado contrario quedando rodeados. Abrazó a la pequeña protegiéndola, sintiendo temor de lo que se aproximaba.

—¡Alto!, ! ¡Es Yukina-kun! —gritó uno de ellos, aproximándose a él, lo que lo hizo voltear en su dirección.

—¿Kisa-san? —exclamó el castaño aliviado de reconocer a su amado —¡Kisa-san! —Gritó con más fuerza. Todos se acercaron y pudieron visualizarse mejor.

Onodera, Takano y Yuu llegaron corriendo viéndose alarmados por el ruido, por su parte los del auto eran Usami, Hiroki, Shinobu y Miyagi. Todos reunidos en la editorial Marukawa.

—Es Usami-Sensei y... ¿el chico apuesto de la librería? —pronunció Ritsu en un susurró.

—Y ella es la hija de Kirishima-san y... ¿el chico que...? —Volteó Takano hacia el castaño el cual solo rió nervioso evitando la mirada.

Todos se vieron entre si tratando de asimilar lo que estaba pasando.

—¿han visto a Misaki Takahashi? —preguntó Usami, quien fue el primer en hablar —Un chico de pelo castaño puntiagudo, ojos verdes y estatura baja.. —describiendo con preocupación.

—Justamente lo buscábamos Sensei —respondió Takano lo que le hizo abrir los ojos con sorpresa a Usami

—¡¿Tienen a Misaki?! ¡¿dónde está?! —Sacudiendo de los hombros al pelinegro.

Un fuerte estruendo los hizo voltear en dirección a la editorial, el edificio se estaba incendiando en la parte de arriba.

—¡Antes que todo tenemos que ir por ijuuin-sensei! —Gritó Yanase quien salió corriendo.

—Kisa-san, cuida a la niña, ¡ayudare! —Besó su frente y salió corriendo.

Takano salió corriendo dejando a Onodera junto con Kisa, Usagui los siguió, pidiéndole a Hiroki y a Miyagui que buscarán un auto para poder permanecer todos juntos, Miyagi le pidió a Shinobu permanecer con los mayores Onodera y Kisa junto con la niña en el auto.

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POV Nowaki y Minami

—¡Demonios! —gritaba Nowaki mientras conducía intentando buscar salidas alternas a la universidad, todo era un caos y la gente extraña seguía saliendo por todas partes.

—¿Usted sabe que les habrá pasado? ¿Por qué reaccionan así? —Se preguntaba la castaña, observando con terror las calles llenas de gente muerta y otras tantas perdiendo la compostura.

—Como yo me dedico a los niños no tengo mayor información, pero sea lo que sea es altamente grave como para que la gente reaccione así.

Nowaki no podía más, se sentia cada vez más impaciente, tenía que encontrar a Hiro-san, aun si eso significaba revelar su secreto un poco.

—Señora Takahashi, por favor le pido que marque al primer número que tengo en mi celular —Sin despegar los ojos del tormentoso camino. Minami tomó el celular, observando el contacto que decía "Hiro-san"

Observó el contacto y como este tenía más llamadas que ningún otro en el celular del doctor, mostró una sonrisa de empatía tomando el celular y marcó al número; sin embargo, la llamada no salía.

Después de breves momentos, donde solo se escuchaba el mensaje de buzón exclamó—Pronto oscurecerá y eso hará más preocupante la situación —dijo el Doctor aún más asustado, las cosas podrían empeorar en cualquier momento. la incertidumbre sería su enemiga.

—Será mejor aparcarnos en un lugar seguro, el combustible está por terminarse. busquemos provisiones. —Nanami habló con seguridad, a pesar de la preocupación que tenía por su familia, debia mostrar fortaleza y hacer equipo con el médico a su lado.

—Tiene razón, si deseamos encontrar a nuestra familia necesitamos provisiones. Sé de un lugar cercano. —dieron la vuelta en la siguiente esquina para encontrarse con las tiendas cercanas a las estaciones del metro.

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Pov de Takahiro

—¡Nanami, Misaki, Mahiro! —Gritaba por las calles que lo dirigen al centro de la ciudad. estaba cansado como agobiado por no encontrar a ningún miembro de su familia. el internet no estaba funcionando, aun así intentaba mandar mensajes por si llegaban a enviarse.

—¿Fuego? —miró a lo lejos viendo el humo del edificio —¿no está por ahí la editorial Marukawa? —ladeo la cabeza con duda, se ajustó los lentes soltando un suspiro.

"estaré en la editorial hasta en la tarde" recordó lo que habló con su hermano por la mañana cuando confirmaban la hora de la cena.

—¡oh no! ¡Misaki! —pensó lo peor, su pequeño hermanito podía estar en problemas, sintió un gran susto al sentir alguien tocar sus hombros.

—¡ahaaaaaaaaaa! —gritó con horror al ver el hombre sin mandíbula que lo trataba de alcanzar, corrió por la calle que tenía enfrente, se dirigiría a la editorial Marukawa; pues no le quedaba de otra, detrás suyo venía una gran horda de muertos vivientes.

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continuará...