#15 : El almuerzo benéfico

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SOHEE

Pronto sería mediodía y los nervios me recorrían el cuerpo. Estar con niños me ponía más nerviosa que ir a audiciones porque no sabía muy bien cómo tratarlos. A pesar de que había cuidado de Heeyeon desde que era prácticamente una bebé, jamás se caracterizó por ser una niña difícil de tratar. Nunca había tenido una personalidad desafiante y por suerte, tampoco había sufrido de ninguna enfermedad grave y/o prolongada.

Como de costumbre, llegué acompañada de Jayoung y separada de Taecyeon, quien no se había molestado en unir nuestros viajes. No sabía cómo sentirme al respecto. A veces podía sentir una sensación de vacío al no tener más su actitud tan...Taecyeon en mis días, al no recibir más sus memes tontos y no ver su cara de interés cuando le comentaba algo.

Tal vez había sido impulsiva.

Y lo venía pensando desde hacía días. No supe bien qué era lo que me ocurrió luego de esa noche, no supe si también fueron celos, pero, ¿celos de qué?

Haemi sí que no me daba buena espina, sin embargo, no podía hacer nada más que escuchar a Taecyeon y esa opción ya la había perdido. De repente, volví a pensar que era un idiota, fruncí mi ceño y continué con mi caminata hacia la entrada del lugar.

El evento se realizaría al aire libre, bajo unas carpas blancas sin paredes que se habían colocado para evitar el sol, el cual brillaba con intensidad en el despejado cielo azul. Nada más ingresar al jardín, nos topamos con dichas carpas y un montón de decoraciones más que incluían varias mesas grupales acompañadas de cómodas sillas, todas blancas. Para agregar más vida, habían colgado banderines y globos de los colores del arcoíris.

Las mesas tenían un centro de mesa con las famosas flores LEGO en vez de flores comunes, detalle que me pareció delicado y divertido al mismo tiempo.

Fuera del área de comida, existían diferentes atracciones para niños y adultos, pero sobre todo para niños, cosas como castillos inflables, juegos interactivos y un rincón de pintura.

Por último, en un extremo del jardín y no muy lejos de la zona de las mesas, había un escenario mediano con un micrófono y altavoces.

Aún no habían llegado los niños del hospital y éramos pocos los que estábamos allí. De manera inconsciente, busqué a Taecyeon y fue como si lo hubieran llamado específicamente para mí porque enseguida apareció en mi campo de visión.

Me quedé mirándolo más tiempo de lo normal al localizarlo. Me costó apartar la vista cuando lo vi con un atuendo tan relajado y ayudando a hacer los últimos preparativos.

—Taecyeon llegó temprano y ha estado ayudando. —la voz de mi manager me hizo dar un pequeño saltito en mi lugar.

Debía admitir que verlo fuera de su papel de empresario millonario que vestía en traje el 98% del tiempo, me generaba algo que no quería admitir en voz alta. De acuerdo, Taecyeon era atractivo, señalé que era bellísimo más de una vez, pero cuando me lo imaginaba como un chico normal de clase media, mi corazón se aceleraba innecesariamente. Y las pintas que traía aquel día, sin dudas lo hacían lucir así, además de que saber que había estado dando una mano en la organización, no ayudaba a que mi pulso se calmara ni de casualidad.

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