Hay que perdonar, para volver a amar.

UNA HERMOSA SENSACION

Desperté como cada mañana por la luz del sol que entraba en mi cuarto, y supe que tenia que enviarte un mensaje de "buenos días"

No dejaba de pensar en ti y en el día que habíamos pasado juntos, la única intriga que tenia en el momento es que si tu te acordabas de todo lo que había pasado o solo sería algo que olvidaríamos.

Baje a la cocina a desayunar con mi familia, pero, nunca espere recibir una noticia que haría que mi vida diera un salto por completo... mis padres ser irían a estados unidos, llevaban meses esperando que les dijeran el día en que se tenían que ir y por fin ese día había llegado, mi corazón se encogió por completo, sentí como si en ese momento la vida me quitara algo importante, sabía que este día llegaría, pero no pensé que fuera tan difícil.

Llegue a trabajar con un ánimo terrible, pero ahí estabas tú, con un dolor de cabeza y una cara de confusión al verme. Tenia miedo de preguntar si te acordabas de lo que había pasado o simplemente seria como algo pasajero. Pero agarre el valor y te pregunte.

-Hola ¿Cómo estás? – te pregunte mientras lavabas los trastes como cada mañana que te tocaba apertura.

- Con mucho dolor de cabeza, no se ni como llegue a mi casa – me respondiste un poco confundido

- Que gracioso por que ibas a llamar a la policía por que no sabias si me habías llevado a mi casa – volteaste a verme tan avergonzado por lo que te estaba diciendo - ¿quieres saber que paso ayer?

- Tengo pena de saber lo que hice, no quiero que me digas, prefiero que sea en otra ocasión, solo dime que no me pase contigo.

Solo me salió una risita y me fui a trabajar, ¿y si se arrepiente de besarme cuando le diga?, muchas preguntas pasaron por mi mente en ese momento, pero al menos deje de pensar en lo de mis padres por un momento.

No sé en qué momento fue, pero estábamos invitados los dos a una fiesta de un compañero de trabajo, te mande mensaje y te pregunte si irías, me respondiente que no sabias, estabas cansado, hasta que te convencí de ir conmigo, y así fue, cuando termine mi turno, estabas afuera fumando, te vi, y sentí como el corazón me empezó a latir como loco, sentí como los nervios recorrían mi cuerpo al verte, sentí que te veía tan estúpidamente y eso que apenas nos íbamos conociendo.

Me subí al carro de la persona que me llevaría a la fiesta, y tú, te subiste en tu moto, iba tan incomoda en el carro, parecíamos sardinas mal acomodadas, una chica dijo que se quería ir contigo, para que fuéramos menos apretados y sentí una pequeña tristeza dentro de mí, porque sabia que nadie estaba esterado de que tu yo estábamos teniendo un pequeño amor, pensé que ella se iría contigo abrazada de ti en la moto. Pero como siempre me sorprendiste, el carro se paro y te acercaste a preguntar si quería irme contigo por que se veía que iba incomoda, y por segunda vez en el día sentí que mi corazón empezaba a salirse de mi pecho.

Aun recuerdo como si fuera ayer, tu y yo en la moto por primera vez, sintiendo el frio en nuestros cuerpos, y de repente pusiste tu mano en mi pierna y la acariciaste, fue esos momentos tan inolvidables, y desde ese momento supe que ese amor sería el que me llevaría a mi perdición, llegamos a la fiesta, y supimos de inmediato que seria aburrido, entonces inventaste un pretexto para irnos, solo duramos 5 minutos en esa fiesta.

Salimos y me subí a la moto contigo, aun tenia tiempo antes de llegar a mi casa así que me llevaste a tu casa, al llegar me di cuenta de que no traía llaves de mi casa, así que me dijiste que me quedara contigo hasta que alguien respondiera para abrirme la puerta de mi casa, sabia que mi mama estaría furiosa por hacer eso, pero acepte el riesgo.

Esa noche a pesar de que estabas cansado, me volviste a besar, pero esta vez con más firmeza y deseo, fue la mejor noche de mi vida, aun que no haya pasado mas que besos, esos besos fueron los más dulces e inolvidables.