Chapter 9▪︎

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El trayecto hacia el reino de Gloriana fue largo y extenuante, tuvieron algunas paradas para ingerir e hidratarse, también para descansar.

Había anochecido después de algunas horas de su caminata, obtaron por buscar un pequeño refugio, el clima amenazaba con soltar una fuerte y extensa lluvia. Encontraron una pequeña cueva y decidieron pasar la noche hay.

Buscaron ramas de árboles y madera para hacer una fogata, Katherine intentaba prender el fuego, cuando lo logró dio un pequeño vistazo a su pareja quien estaba mirando el exterior, la lluvia ya había comenzado y era con un fuerte viento pero parecía que a la morena no le importaba¿Todo bien amor? — tomo asiento a su lado.

Leonor miró por un momento a la rubia, nuevamente enfocó su vista en la fuerte lluvia  — Sí, todo bien... — el tono en el que respondió, era obvio que le sucedía o preocupaba algo.

Su respuesta enojo bastante a Andersoon, era increíble que hasta estos momentos Leonor no era capaz de contar sus miedos e inseguridades con ella aún cuando eran pareja. Tomo a la morena en sus brazos y la cargó igual a un saco de papas — ¡Hey! ¿Qué estás haciendo?  — se quejó al no recibir respuesta de la otra mujer, sintió como la tiraba al piso de manera un poco brusca, iba a levantarse pero la rubia tomó sus manos para ponerlas en su cabeza.

Leonor vio con más detalle la cara de su novia, no entendía la repentina actitud de Katherine — ¿Kathie...? — dudosamente preguntó.

Leonor...¿por que siempre te cierras así? ¿Acaso no confías en ? — exclamó la rubia

La morena entendió a lo que se referíaClaro que lo hago, solo.... — miro a otro lado — Solo no quiero que te hartes con mis problemas, no quiero ser una carga para tidijo con toda su sinceridad.

Amor, no eres una carga, yo siempre voy a velar por tu seguridad, por tus pensamientos, por ti — tomó su mentón y acarició levemente — ¿Sabes por qué? Porque te amo, te amo demasiado, no solo eres mi pareja, eres mi esposa — esa última parte lo dijo con una plena emoción.

Valentoni suelta una pequeña risa — Tu siempre aprovechando cada oportunidad para decir que soy tu esposa — la rubia imitó la misma expresiónPor supuesto, tuve la mejor suerte al momento que aceptaste casarte conmigo, solo espero que tu hermano esté feliz con nuestra unión pero de igual forma sino, eso no me importa, te amo tanto que nisiquiera hay una palabra o un número para expresarlo. — Leonor se sintió conmovida por aquellas palabras.

Eres una idiota — dijo abrazando a la rubia — Lo sé, pero soy tu idiota, solo tuya. — ambas mujeres juntaron sus labios para convertirlo en un hermoso, dulce y especial beso. La falta de aire hizo que tuvieran que separarseSerá mejor que descansemos, aún mos queda un largo recorrido hasta llegar a Gloriana — se puso a su costado, con sus dos brazos envolvió su cuerpo — Descansa, te amo — dejo un beso en la frente de Leonor — Yo también te amo, buenas noches.

Una vida feliz después de la tragedia [Nimona]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora